Madrid, 20 ene (EFE).- La ministra de Sanidad, Mónica García, ha puntualizado este lunes que la exclusividad que quiere exigir a los jefes de servicio y directivos del Sistema Nacional de Salud debe ir acompañada de una mejora de sus retribuciones y se ha mostrado contraria a imponer obligaciones a los médicos más jóvenes.
En un vídeo remitido a los medios y ante las críticas de los sindicatos por varias de las medidas del borrador de anteproyecto de ley del estatuto marco, la responsable de Sanidad ha censurado las filtraciones "interesadas y tergiversadas" que se han hecho sobre este documento que se lleva negociando desde hace dos años y que sigue en pleno proceso de diálogo.
"Cargar toda la artillería, contrapropuestas y debates que todavía hay que tener es la manera más rápida para dinamitar el proceso y demostrar las pocas ganas de renovar el Estatuto marco y las muchas ganas de generar miedo entre los profesionales", ha proseguido.
Ha explicado así que, como sucede con todas las leyes, el proceso de negociación "es largo y la discreción y la confianza son elementos fundamentales para la puesta en común". "Filtrar un documento que no está trabajado ni hablado es como sacar a la venta un disco en un primer ensayo. Es absurdo", ha criticado.
Ante la reunión que mantendrá con los sindicatos el próximo miércoles para reanudar las negociaciones sobre la futura ley que rige las condiciones laborales del personal del SNS, Mónica García ha querido puntualizar varios extremos sobre el borrador, que contiene medidas de todas las partes que participan en el proceso.
El primero es que las horas de guardia que Sanidad quiere reducir de 24 a un máximo de 17 no habrá que devolverlas; para ello, se computarán las horas de guardia o los descansos como horas trabajadas o con la fórmula que se decida "entre todos, que será la más justa" con los profesionales sanitarios.
Aunque esa fórmula se tiene aún que debatir, García ha advertido que no se va "a bajar de reconocer las guardias de 17 horas máximas porque es justo y ofrece calidad y seguridad a nuestros pacientes".
Respecto al régimen de incompatibilidades, ha precisado que la exclusividad que se pretende en la sanidad pública de los jefes de servicio y de los directivos debe ir acompañada de una mejora de las retribuciones, y son las comunidades las que tendrán que remunerarles adecuadamente y "liberarles de la carga burocrática innecesaria".
"Es una medida que ya se está debatiendo en algunos parlamentos autonómicos y en otros países. Nadie se imagina que alguien pueda trabajar en Coca-Cola y en Pepsi a la vez. Sabemos que genera conflictos de interés y malas prácticas que perjudican a nuestro Sistema Nacional de Salud", se ha reafirmado.
Mientras, se ha desmarcado de otra de las propuestas contenidas en el borrador, la de incompatibilizar el ejercicio de la sanidad privada a los médicos jóvenes durante los cinco años posteriores a la finalización del MIR.
Su compromiso, ha proseguido, es buscar fórmulas para retener el talento "en condiciones dignas, estabilidad laboral y retribuciones justas, nunca en obligaciones, especialmente en las realidades más inestables".
"Tiene que quedar muy claro: Estamos abiertos a propuestas que prioricen el bienestar y las condiciones dignas de nuestros profesionales, siempre en coordinación con las comunidades autónomas, responsables de gestionar todos estos incentivos", ha recalcado.
La del miércoles será la primera reunión para avanzar en los derechos de los profesionales del SNS, y en ella el Ministerio de Sanidad "tiene clarísimos sus compromisos: guardias justas, retención del talento y condiciones laborales dignas", ha concluido. EFE