Adrián Chico, psicólogo: “Los hombres con ‘mamitis’ son un peligro para construir cualquier relación adulta”

En estos casos, la figura materna tiene un peso constante en las decisiones del hijo, desde las más cotidianas hasta las más relevantes dentro de la relación

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Muchos de estos hombres se
Muchos de estos hombres se sienten culpables cada vez que priorizan su relación. (Composición fotográfica/Canva)

Las redes sociales se han convertido en un espacio donde no solo se comparten tendencias, sino también reflexiones profundas sobre las relaciones personales. En los últimos días, un vídeo viral en TikTok ha puesto el foco en una realidad incómoda, pero frecuente: la dificultad de construir una relación adulta con hombres que mantienen una dependencia emocional excesiva hacia sus madres.

Bajo el término popular de “mamitis”, el contenido aborda una dinámica que, lejos de ser anecdótica, genera conflictos, desgaste emocional y relaciones desequilibradas, especialmente cuando no existen límites claros entre la familia de origen y la pareja.

Adrián Chico, psicólogo, ha reflexionado sobre esta situación en un reciente vídeo publicado en su cuenta de TikTok, en el que ha reavivado el debate sobre la dependencia emocional de algunos hombres hacia sus madres y a cómo esta dinámica puede afectar seriamente a las relaciones de pareja. El mensaje es contundente: “la mamitis no es amor sano, es una dependencia emocional disfrazada completamente de cariño”.

¿Qué es la mamitis?

Según explica el creador de contenido, enamorarse de un hombre con este tipo de apego implica una relación a tres: “si te enamoras de uno, no estás saliendo con él, estás saliendo con él y con su madre también”. En estos casos, la figura materna tiene un peso constante en las decisiones del hijo, desde las más cotidianas hasta las más relevantes dentro de la relación.

El problema, señala, no es el amor hacia la madre, sino la falta de límites propios de la edad adulta. “Ella opina, él obedece. Ella es su prioridad, no tú, y eso no es amor”, afirma en el vídeo, donde también recalca que este comportamiento responde más a una “inmadurez crónica” que a ser un buen hijo.

Algunas actitudes que tenemos, pueden ser señales de lo que somos según los psicólogos

El contenido describe situaciones habituales que reflejan esta dependencia, como interrupciones constantes en momentos de pareja para atender llamadas innecesarias: “Que estés en una cena con él y de repente su madre le llame para absolutamente nada importante y se ponga a hablar durante 20 minutos”, ejemplifica, subrayando que este tipo de actitudes suponen “una falta de respeto hacia ti”.

Esta situación supone una carga emocional

Además, el vídeo apunta a la carga emocional que acompaña a estas dinámicas. Muchos de estos hombres se sienten culpables cada vez que priorizan su relación, especialmente cuando se enfrentan a madres “muy victimistas y culpabilizadoras”. Esto genera discusiones constantes y una sensación de competencia permanente dentro de la pareja, donde “te hace sentir secundario o secundaria en tu propia relación”.

“Una pareja sana necesita dos adultos, no un niño apegado a su mamá”, concluye el psicólogo. Además, invita a reflexionar antes de justificar el estancamiento de una relación: “pregúntate si estás con un hombre o con un niño, porque hasta que él no se coloca en el rol de adulto ninguna relación puede funcionar”.

El mensaje que deja el vídeo es claro y directo: amar a una madre no debería implicar relegar a la pareja a un segundo plano. Sin una diferenciación emocional propia de la adultez, sin límites y sin una jerarquía clara de prioridades, la relación difícilmente puede avanzar.