Si tienes tortícolis, esto es lo que debes hacer, según un fisioterapeuta: “Lo peor son los estiramientos”

Un especialista cuenta los problemas que puede causar pincharte cualquier calmante

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Dolor en el cuello. (Imagen
Dolor en el cuello. (Imagen ilustrativa infobae)

La tortícolis es un tipo de distonía muscular que acaba afectando a todo el mundo en algún momento de su vida. Se presenta como un dolor punzante en el cuello que es muy molesto, originado por estrés, malas posturas o movimientos muy bruscos.

A pesar de ser algo común, no todos conocen los errores que se repiten y que están normalizados, y que pueden empeorar la situación. Y es que muchas de las cosas que están vistas como beneficiosas no tienen ningún aspecto positivo para la mejoría muscular.

Este dolor tan fastidioso puede alargarse semanas, pero un especialista conocido como Damorefisio en redes sociales, explica cómo erradicarlo rápidamente. En su cuenta de TikTok, donde acumula miles de seguidores, crea contenido especializado sobre fisioterapia deportiva.

Las falsas creencias

“Si te has levantado tras pasar la noche en una mala posición y te duele el cuello, no estires y mucho menos corras a pincharte”, explica el experto. Según él, esa rigidez que se acumula en el cuello no es ni una lesión ni un desgarro. Se trata de un mecanismo de defensa del cuerpo donde el cerebro está contrayendo los músculos para protegerte.

Alcaraz, en bucle con las lesiones en los últimos 18 meses: ya ha sufrido más que Nadal cuando tenía sus 21 años.

“Lo peor que puedes hacer contra eso son estiramientos agresivos o agujas innecesarias”, afirma el fisioterapeuta, reconociendo que estas medidas son las principales opciones de los pacientes. Son falsas creencias que se han normalizado, pero que solo hacen que el músculo siga en tensión en vez de ayudar a la relajación completa.

Aunque algunas personas recurren a infiltraciones o relajantes musculares aplicados directamente en la zona, esta práctica no solo es innecesaria en la mayoría de los casos, sino que también conlleva riesgos significativos. El cuello es una zona delicada, con gran cantidad de terminaciones nerviosas y estructuras vitales, por lo que cualquier intervención invasiva debe estar estrictamente justificada y realizada por un especialista.

Lo que sí que hay que hacer

Lo más óptimo es continuar con tu rutina habitual de gimnasio sin modificaciones. El día que se presente el dolor en el cuello aprovecha para realizar los ejercicios de espalda. Este tipo de deporte es muy beneficioso para la tortícolis. “Puedes hacer remo, puedes hacer jalón o face pool”, recomienda David (como se llama este especialista). Todo lo que active esa zona será válido, sin necesidad de externos y tratándolo con la máxima naturalidad.

Si la causa es muscular, el mejor descontracturante es el movimiento. Aunque la tortícolis puede resultar dolorosa e incapacitante, realizar actividad física moderada y adecuada puede ser beneficioso para aliviar sus síntomas. Además de la rutina de espalda, puede ayudar; ejercicios suaves, como estiramientos controlados, caminatas o rutinas de bajo impacto.

Ejercicio beneficioso de rodillas al
Ejercicio beneficioso de rodillas al pecho(Freepik)

Todo esto ayuda a mejorar la circulación sanguínea en la zona afectada, lo que favorece la relajación muscular y reduce la rigidez del cuello. Además, mantener el cuerpo en movimiento evita que la musculatura se atrofie y contribuye a una recuperación más rápida y efectiva.

Es importante, sin embargo, adaptar el ejercicio a la condición del cuello y evitar movimientos bruscos o de alto impacto que puedan agravar el dolor. Consultar a un fisioterapeuta o a un profesional del deporte puede ser clave para establecer una rutina segura. En muchos casos, el deporte no solo acelera la recuperación de la tortícolis, sino que también previene futuras recaídas al fortalecer la musculatura cervical y mejorar la postura general del cuerpo.