Celia Martínez, española que vivió en Corea del Sur, sobre los choques culturales: “Hay un racismo silencioso”

La joven habla también de temas como la igualdad de género o el avance tecnológico

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Fragmento del TikTok en el
Fragmento del TikTok en el que aparece Celia Martínez explicando su experiencia en Corea del Sur

Emigrar a otro país es una de las decisiones más complicadas que se pueden tomar. Factores como el cambio de idioma, los diferentes choques culturales o estar lejos de tu familia son los principales retos a los que se enfrentan estas personas.

Celia Martínez es una de las personas que ha vivido esto de primera mano. En uno de los últimos vídeos que ha subido a su cuenta de TikTok (@celiamartnz.ugc), ha explicado cómo fue su experiencia en Corea del Sur.

“Hay racismo silencioso”

Una de las cosas de las que habla es del racismo. Lo primero que ha contado es que sí que existe en el país, sin embargo, no es como mucha gente cree. “Es un racismo silencioso”, afirma la joven. Según explica, no se trata de un rechazo abierto o violento, como el que puede verse en otros países, sino de algo más sutil y difícil de detectar.

Es una discriminación que no se expresa con insultos o agresiones, pero que se percibe en gestos, actitudes y normas sociales. Durante su año en el país, la joven vio cómo en algunos locales y discotecas restringían la entrada a personas extranjeras y que el acceso al mercado laboral resulta más complicado para quienes no son blancos.

Además, señala que existe un fuerte prejuicio hacia las relaciones sentimentales entre coreanos y occidentales. Según cuenta, muchos hombres no contemplan casarse con extranjeras porque valoran la pureza y continuidad de su raza.

Una sociedad avanzada tecnológicamente, pero muy conservadora

Otro aspecto que destaca Celia es el contraste entre el enorme desarrollo tecnológico del país y la mentalidad aún muy tradicional de su sociedad. En su opinión, Corea del Sur ha evolucionado con tanta rapidez a nivel económico y digital que su progreso social no ha seguido el mismo ritmo.

Esto se refleja, según su testimonio, en el trato hacia las mujeres. La joven asegura que el machismo sigue estando muy presente y que muchas mujeres coreanas viven sometidas a una fuerte presión social.

La manifestación central en Barcelona por el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y las Niñas, convocada por la plataforma Novembre Feminista, ha empezado este lunes a las 19.40 horas en la confluencia del paseo de Gràcia con la avenida Diagonal para exigir la "erradicación de todas las formas de violencia machista". (Europa Press)

Infidelidad y apariencia social

Celia también habla de otros comportamientos que le llamaron la atención, como la alta tasa de infidelidad. Según su experiencia, las relaciones extramatrimoniales son muy frecuentes y están relativamente normalizadas, lo que contribuye a la propagación de enfermedades de transmisión sexual.

En este contexto, las mujeres extranjeras suelen ser vistas como algo “exótico” y, en muchos casos, como una aventura pasajera sin compromiso. Por último, destaca el fuerte materialismo y la importancia que se da a las apariencias en la vida diaria.

Explica que muchas personas presumen de pertenencias de lujo o fingen un estatus económico alto, incluso llegando a pasear con bolsas de marcas internacionales vacías, solo para proyectar una imagen de éxito y clase social elevada.

Mudarse a un país con una cultura tan diferente como la coreana implica adaptarse a nuevas costumbres, formas de comunicación y dinámicas sociales. A pesar de que, al principio, puede costar ciertas actitudes cotidianas y normas no escritas, siempre es interesante conocer otro tipo de culturas.