Un padre mata a su bebé porque le interrumpió mientras jugaba a la consola: 26 fracturas de costillas y hematomas en el cuerpo de la menor

El asesino ha sido condenado a 30 años de prisión, debido a las graves lesiones y la corta edad de la menor

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(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

Las autoridades judiciales de Virginia Beach han condenado a La’Shaun Quintae Holloway, un hombre de 27 años, por el asesinato de su hija de tan solo dos meses. El Fiscal de la Commonwealth detalló a los medios la sentencia, de 30 años de prisión, por los hechos ocurridos hace siete años, el 20 de diciembre de 2019.

Según narran los medios locales, el incidente se debió a una riña por la consola Xbox. Fueron los familiares los que alertaron a las autoridades, después de escuchar a Holloway “gritar obscenidades a la niña a través de unos auriculares conectados a la Xbox”, de acuerdo con el comunicado oficial de la ciudad. Tras los gritos y el llanto, los familiares notaron que la bebé, cuyo nombre no ha sido divulgado, dejaba de llorar y permanecía en silencio, por lo que acudieron a la habitación y la hallaron inconsciente. Rápidamente, la menor fue trasladada a un hospital, donde permaneció varios días con soporte vital hasta que finalmente falleció a causa de las graves lesiones sufridas.

El informe forense reveló que la pequeña presentaba 26 fracturas de costillas en varias fases de curación, una fractura de clavícula, una fractura de cráneo, hematomas alrededor de los ojos, en la caja torácica y una hemorragia cerebral extensa. Los profesionales médicos determinaron que la causa de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico abusivo.

Una sentencia superior al máximo estatal

Los investigadores revelaron que Holloway ya había sido condenado anteriormente en Chesapeake por abuso y negligencia infantil. Al intentar ser localizado por la policía, trató de huir, lo que sumó un delito grave por eludir a las autoridades. En total, el juez impuso una pena de 50 años de prisión, con 20 suspendidos, dejando un total de 30 años de privación de libertad La sentencia supera el límite máximo recomendado en las pautas estatales, que era de 23 años y 8 meses.“Al argumentar a favor de esta sentencia tan alta, la Commonwealth hizo referencia a las graves lesiones, la edad del bebé y la brutalidad del asesinato”, expuso en un comunicado la Ciudad de Virginia Beach, factores que motivaron una sentencia tan severa.

Los detalles forenses y las pruebas tecnológicas fueron fundamentales para determinar la culpabilidad en este proceso que ha vuelto a abrir el debate en Estados Unidos sobre la protección de los menores en el entorno familiar, así como la vigilancia frente a episodios de violencia doméstica.

No es el único caso de abuso y asesinato infantil que se ha vivido en Estados Unidos. En el año 2016, un hombre fue condenado en Filadelfia por la muerte de su hija de 17 meses tras enfadarse mientras jugaba a la Xbox, después de que la niña tropezara con el cable de la consola y esta cayera al suelo. Según la investigación recogida por el Philadelphia Inquirer, el padre golpeó repetidas veces a la pequeña, arrojándola de un lado a otro de la habitación. Aunque inicialmente afirmó que se había caído de la cama, la autopsia y pesquisa posterior confirmaron el homicidio.