Revolución en la medicina: una molécula producida por bacterias del intestino causa la aterosclerosis, culpable de millones de muertes

Este hallazgo liderado por el CNIC permite avanzar hacia el diagnóstico previo para una de las enfermedades más letales del planeta

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Una persona sufre un infarto
Una persona sufre un infarto a causa de aterosclerosis. (Canva)

Un grupo de científicos españoles ha identificado una molécula generada por bacterias intestinales que causa la aterosclerosis, el proceso por el cual se acumulan grasas y colesterol en las arterias, lo que puede desembocar en infartos y accidentes cerebrovasculares. El hallazgo, liderado por el biólogo David Sancho desde el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), ha sido publicado este miércoles en la revista científica especializada Nature.

La sustancia identificada, propionato de imidazol (C₆H₈N₂O₂), es una molécula producida por ciertas bacterias del intestino. Esta entra en el torrente sanguíneo y desemboca en una reacción inflamatoria que ayuda a la formación de placas en las arterias, según explican los autores del estudio.

Este avance científico es el resultado de un proyecto iniciado hace 15 años, cuando el CNIC buscó miles de voluntarios sanos para estudiar el origen de las enfermedades cardiovasculares. El análisis ha incluido a más de 4.000 personas, lo que permitió detectar que el 63% de los participantes, todos aparentemente sanos, ya presentaban síntomas de aterosclerosis.

La molécula provoca inflamación arterial incluso con colesterol normal

Se ha demostrado mediante ratones que administrar directamente el propionato de imidazol provoca la enfermedad. Además, han observado niveles elevados de esta molécula en uno de cada cinco voluntarios con aterosclerosis.

Los autores inciden en que la aterosclerosis no es solo una enfermedad de grasas, sino que también tiene un componente inflamatorio. Esto refuerza los resultados encontrados de otros grupos, como el realizado por el cardiólogo Arash Haghikia, quien destacó, según El País, que la molécula parece promover la aterosclerosis incluso cuando los niveles de colesterol son normales.

Aterosclerosis en el corazón. (Infobae
Aterosclerosis en el corazón. (Infobae España)

Un marcador en sangre para el diagnóstico precoz

Según destaca Annalaura Mastrangelo, investigadora del CNIC, “la presencia de ImP en sangre se relaciona con el desarrollo de aterosclerosis activa en personas aparentemente sanas”. Lo importante, añade, es que “su detección en sangre representa una gran ventaja, ya que las pruebas actuales requieren técnicas de imagen complejas y costosas no cubiertas por la sanidad pública”.

De ahí que uno de los aportes clave del estudio sea la propuesta de usar esta molécula como marcador de diagnóstico temprano, lo que podría permitir un tratamiento personalizado antes de que aparezcan los síntomas. Según señala EFE, el ImP activa un receptor llamado imidazolínico de tipo 1 (I1R), lo que genera una inflamación sistemática que contribuye y afecta directamente a la enfermedad.

David Sancho explica a EFE que bloquear este receptor impide que esta molécula cause aterosclerosis en modelos animales, lo que abre la posibilidad de tratamientos que combinen esta medida estratégica con la reducción del colesterol. “Esperamos que el efecto combinado sea sinérgico y prevenga el desarrollo de la enfermedad”, afirma.

El ImP, una nueva vía para tratar la enfermedad más mortal del mundo

El CNIC destaca que este descubrimiento puede revolucionar el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad, al permitir una intervención más temprana y eficaz. El proyecto ha contado con financiación del Consejo Europeo de Investigación, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, y la Fundación ‘la Caixa’, según informa EFE.