
En un vídeo difundido en TikTok, el abogado laboralista Juanma Lorente, conocido en redes como @juanmalorente_laborista, ha explicado cómo es posible abandonar voluntariamente un trabajo sin perder el derecho a indemnización ni al subsidio por desempleo. En la publicación, el especialista propone tres casos en los que un empleado puede solicitar la extinción del contrato sin esperar a ser despedido, y aun así cobrar el paro y recibir una compensación económica.
“Yo sé que algunos estáis quemados en vuestro trabajo y os queréis marchar”, explica Lorente al inicio del vídeo. Muchos trabajadores, explica, se sienten estancados en situaciones laborales insostenibles, pero no se atreven a dar el paso porque tienen miedo a quedarse sin ingresos. Sin embargo, añade, “hay situaciones en las cuales esto es posible”.
El abogado aclara que se trata de circunstancias muy concretas, que están respaldadas por la regulación laboral española. No se trata simplemente de renunciar porque uno no está a gusto, sino de identificar si la empresa se ha comportado de cierta forma que permita al trabajador solicitar la baja con derechos.
Cambio de funciones o bajada de sueldo
La primera de estas situaciones se produce cuando la empresa modifica de forma sustancial las funciones del empleado. Si las nuevas tareas asignadas no se corresponden con las que figuran en el contrato o muestran un cambio muy significativo de la categoría profesional, el trabajador puede realizar la petición de extinguir voluntariamente el contrato con derecho a indemnización y desempleo. “Si la empresa decide cambiarte tus funciones totalmente, podrías irte con indemnización y con paro”, explica Lorente.
Otro caso en el que se puede dar esta situación es si la empresa decide reducir el salario unilateralmente. En ese caso, si el trabajador no está de acuerdo con esta reducción de salario, puede solicitar también la extinción del contrato en las mismas condiciones. Según Lorente, “podrás pedir la cuenta y marcharte con indemnización y con paro”.

Alteración del horario laboral
La tercera situación, y la más habitual según el abogado, tiene que ver con el cambio del horario de trabajo. Si un trabajador tiene una jornada continua, por ejemplo de siete a tres, y la empresa decide imponer un horario partido, con varias horas de pausa intermedia, esto puede generar un perjuicio claro, sobre todo en términos de conciliación, según indicas el especialista en el video. En estos casos, el trabajador también puede marcharse con derecho a paro e indemnización, siempre que pueda justificar el daño que le causa el nuevo horario.
Lorente también insiste en que los cambios deben ser sustanciales y no deben haber sido acordados previamente. La empresa tendrá que haber actuado de manera unilateral y el trabajador tendrá que demostrar cómo esos cambios afectan negativamente a su situación.
Respecto a la compensación económica, el abogado señala que la indemnización correspondiente es de veinte días por año trabajado, con un máximo de nueve mensualidades. La cantidad dependerá del salario y del tiempo que la persona haya permanecido en la empresa.
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