Esta es la frecuencia con la que debes ducharte a partir de los 65 años

Los expertos difieren en la frecuencia del baño, que debe adaptarse a las particularidades de cada persona

Guardar
Una mujer mayor en el
Una mujer mayor en el baño. (Freepik)

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y, como tal, exige un cuidado adecuado. Mantener su hidratación y protegerlo de agresores externos como el sol o el tabaco es crucial para mantener sana esta barrera protectora contra virus, bacterias, toxinas y radiación solar. Pero por mucho que se cuide, la piel cambia y pierde parte de sus propiedades con la edad.

Según pasan los años, se vuelve más fina, menos elástica, uniforme y más seca, lo que le hace más susceptible a lesiones, infecciones y otros problemas de salud. Por ello, las personas mayores deben prestar especial atención al cuidado de la piel. En este contexto, la higiene es uno de los pasos más importantes y hace que muchos se pregunten cuál debe ser la frecuencia del baño para fortalecer este órgano vital.

Lo cierto es que los dermatólogos no dan una respuesta clara: algunos aconsejan ducharse tan solo dos o tres veces por semana, dependiendo del tipo de piel; otros abogan por bañarse a diario.

La ducha diaria puede resecar la piel

Piel seca o deshidratda. (Freepik)
Piel seca o deshidratda. (Freepik)

La mayoría de las personas tienden a ducharse a diario, algo que, según el doctor Robert H. Shmerling de la Universidad de Harvard, puede terminar siendo perjudicial para la piel. Si bien ayuda a eliminar el olor corporal y puede suponer un paso importante en la rutina diaria de cada persona, “en lo que respecta a la salud, no está claro que una ducha diaria consiga mucho”, asegura el experto.

“La piel sana mantiene una capa de aceites y un equilibrio de bacteria ‘buena’ y otros microorganismos. Lavarse y frotar los elimina, especialmente si el agua está caliente”, explica el doctor Shmerling. Como resultado, la piel puede resecarse e irritarse, además de perder bacterias que ayudan al sistema inmune. En personas mayores puede ser todavía más perjudicial, pues tienden a una piel más seca de por sí, especialmente en la zona baja de las piernas, los codos y los brazos. “Darse duchas o baños calientes o utilizar demasiado jabón, antitranspirante o perfume puede empeorar la piel seca”, aseguran desde el Instituto Nacional del Envejecimiento estadounidense, que aconseja a las personas mayores tomar “menos baños o duchas” y usar “jabones más suaves”, además de poner el agua a una temperatura tibia.

En este sentido, para la doctora Sylvie Meaume, dermatóloga y jefa del Departamento de Geriatría, Heridas y Cicatrización del Hospital Rothschild, lo ideal es darse dos duchas por semana y, “si es posible, enjuagarse el cuerpo a diario, pero usar jabón cada tres días sin frotar la piel con demasiada fuerza”, explicó para el medio galo Futura.

Pero estos consejos dependen de las particularidades de cada persona, apuntan desde la Academia Americana de Dermatología. “Todos somos diferentes en nuestros niveles naturales de aceites, sudor y nuestras actividades diarias y entornos”, apunta la doctora Sasha Haberle. En ese sentido, si cada día se realizan trabajos sucios o ejercicios demandantes físicamente, una ducha diaria puede ser lo adecuado. “Si entrenas en el gimnasio a diario, tal vez quieras ducharte cada día”, ejemplifica la experta, apuntando que las necesidades pueden cambiar según la estación y el clima.

Consejos para mantener la piel hidratada

Aunque depende de cada caso particular, los expertos parecen de acuerdo en rechazar las duchas diarias, sin marcar una frecuencia exacta para cada persona. Si se opta por ducharse cada día, habrá que prestar atención a la hidratación de la piel, especialmente en personas mayores de 65 años.

Desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) aconsejan limitar el tiempo de exposición al sol y hacerlo siempre con protección, utilizar jabones suaves para asearse y beber dos litros de agua al día, además de llevar una dieta equilibrada rica en frutas y verduras. El uso de cremas hidratantes también está recomendado, especialmente si incluyen protección solar.