Cuánto cuesta escriturar una casa y cómo hacerlo

Entender en qué consiste este procedimiento y cuánto cuesta puede ayudar a los compradores a planificar mejor su inversión y evitar imprevistos económicos

Guardar

La compra de una vivienda suele implicar varios pasos legales y administrativos fundamentales para garantizar la seguridad jurídica del comprador. Uno de los momentos clave en este proceso es la escrituración de la casa, un trámite indispensable que certifica oficialmente la transferencia de la propiedad. Entender en qué consiste este procedimiento y cuánto cuesta puede ayudar a los compradores a planificar mejor su inversión y evitar imprevistos económicos.

La escritura pública de compraventa es el documento legal que formaliza la adquisición de un inmueble. Para que esta tenga validez, debe firmarse ante un notario, quien certifica que ambas partes, vendedor y comprador, acuerdan la operación conforme a la ley. Posteriormente, la escritura debe inscribirse en el Registro de la Propiedad, lo que asegura que el nuevo dueño quede registrado oficialmente y protege sus derechos frente a terceros. Este registro es crucial para evitar posibles conflictos legales o fiscales en el futuro.

Costes principales al escriturar: notaría, impuestos y registro

En cuanto a los costes asociados a escriturar una vivienda, existen diferentes conceptos que se deben asumir. Los honorarios notariales constituyen una parte importante del gasto y, aunque están regulados por el Estado, pueden variar según el notario y el valor del inmueble. En términos generales, este coste puede oscilar entre 300 y 1.200 euros. Además, hay que considerar los impuestos vinculados a la compra, que dependen del tipo de vivienda y de la comunidad autónoma en la que se encuentre.

Tal y como explican desde Gilmar, el pago de impuestos es otro aspecto fundamental dentro del proceso de la escrituración. Para viviendas de segunda mano, se aplica el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que suele situarse entre el 6% y el 10% del precio de compra, dependiendo de la región. En el caso de viviendas nuevas, en cambio, el comprador debe hacer frente al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), que equivale al 10% del valor del inmueble, y al Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD), cuyo porcentaje varía entre el 0,5% y el 1,5%, también según la comunidad autónoma.

Otro gasto relevante es el relacionado con la inscripción de la escritura en el Registro de la Propiedad. Este trámite oficializa la transmisión del inmueble y garantiza su publicidad legal. El coste de este servicio puede ir desde los 300 hasta los 600 euros, en función del valor declarado de la vivienda.

Lo que le costó comprar una casa en Madrid a la generación X y lo que pagan los ‘millennials’ o los Z: el precio de la vivienda crece hasta un 46% en una década.

Aspectos clave y plazos a considerar antes de escriturar

Más allá del aspecto económico, es importante tener en cuenta ciertos factores antes de proceder con la escrituración. Una de las primeras recomendaciones es verificar que la propiedad esté libre de cargas o gravámenes, como hipotecas o embargos, que puedan afectar al comprador. Esta comprobación es imprescindible para evitar problemas legales posteriores.

También conviene negociar con el vendedor quién asume los diferentes gastos que genera la operación. Aunque normalmente es el comprador quien paga la mayoría, algunas partidas pueden ser objeto de acuerdo entre las partes. La comunicación clara en este punto puede evitar disputas y facilitar la formalización de la compra.

El calendario del proceso también es un aspecto a considerar. Tras la firma ante notario, la copia simple de la escritura suele estar disponible en pocos días, lo que permite al comprador disponer del documento para sus registros o trámites adicionales. No obstante, la inscripción definitiva en el Registro de la Propiedad puede tardar hasta tres meses, tiempo en el que se consolida legalmente la titularidad del inmueble.