El exlíder de Vox en Andalucía, Francisco Serrano, se sentará en el banquillo de los acusados en 2026 por un presunto fraude de subvenciones

El caso gira en torno a una empresa que creó en la que recibieron un préstamo de 2,5 millones de euros que debía destinarse a una fábrica de pellets que no se llevó a cabo

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El exlíder de Vox en
El exlíder de Vox en Andalucía, Francisco Serrano (REUTERS/Marcelo Del Pozo)

La Audiencia Provincial de Sevilla ha anunciado que el juicio contra el exlíder de Vox en Andalucía, Francisco Serrano, y sus dos ex socios en la empresa que crearon juntos, por un presunto fraude de subvenciones se llevará a cabo en mayo de 2026, según ha podido saber este periódico por fuentes cercanas al caso.

“Examinadas y resueltas las solicitudes de prueba propuestas por las partes acusadoras y defensa, conforme lo dispuesto en el art. 785.1 y 2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, se señala como fecha del juicio oral los próximos días 4, 5, 7, 11, 12, 13, 18, 19, 20, 25 y 26 de mayo de 2026 a las 10:00 horas, que tendrá lugar en la Sala Quinta (Sala Especial) de audiencia de este órgano judicial”, relata la diligencia presentada por este tribunal.

¿Quién es Francisco Serrano?

Serrano comenzó su carrera laboral como juez en 1990 siendo su primer destino el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción n.º 1 de Valverde del Camino (Huelva). En 1998 fue promovido a la categoría de Magistrado, desempeñando la plaza de Juez en el Juzgado de primera instancia de Familia n.º 7 de Sevilla.​

Tras diferentes polémicas, en 2011 fue inhabilitado por ampliar un día y medio la custodia de un padre separado sobre su hijo, cambiando el régimen de visitas del menor establecido por otro juzgado, con el único objetivo de salvaguardar el deseo del menor de salir como paje en una procesión de la Madrugá sevillana.

La madre denunció al juez y fue condenado por prevaricación dolosa. El Tribunal Supremo sentenció que Serrano era consciente de incumplir su deber jurisdiccional, lo que el propio magistrado no ha negado, llegando a asegurar no arrepentirse del fallo que dictó y sosteniendo que las “críticas a la ideología de género” está detrás de su inhabilitación.

En 2017 consiguió que revocaran su inhabilitación, pero antes decidió meterse en la política. En 2014 se afilió al partido Vox y fue el único candidato que se presentó a las primarias para las elecciones autonómicas en Andalucía de 2015.

En las elecciones autonómicas andaluzas celebradas en marzo de 2015, Vox no obtuvo representación parlamentaria, pero ​el 2 de diciembre de 2018 Francisco Serrano se volvió a presentar como candidato a Presidente de la Junta de Andalucía, obteniendo 12 escaños al Parlamento de Andalucía, apareciendo Vox por primera vez en su historia en un parlamento autonómico.

Francisco Serrano y Santiago Abascal
Francisco Serrano y Santiago Abascal (REUTERS/Jon Nazca)

Sin embargo, en julio de 2020 tuvo que presentar su dimisión como presidente de Vox en Andalucía debido a una querella de la fiscalía superior por un presunto fraude de subvenciones por una ayuda pública de 2,5 millones.​

Un préstamo para la construcción de una fábrica que nunca se llevó a cabo

Nueve meses antes de esta querella, el vicepresidente y portavoz de FACUA, Rubén Sánchez, había presentado una denuncia ante la UDEF relatando estos hechos, lo que se convirtió en el origen de la causa.

El caso gira en torno a la empresa Bio Wood Niebla S.L., fundada en 2016 por Serrano y su socio Enrique Pelegrín Díaz. Recibieron un préstamo de casi 2,5 millones de euros en diciembre de ese mismo año que debía destinarse a la construcción de una fábrica de pellets en Niebla, Huelva, que nunca se llevó a cabo.

La empresa solo cumplió con la obligación de depositar sus cuentas en el Registro Mercantil durante su primer año, pero desde 2017 ocultó su situación financiera y movimientos de dinero. En marzo de 2017, firmó un contrato con el Ayuntamiento de Niebla para alquilar terrenos municipales por un precio simbólico de 600 euros al mes.

Un año y medio después, convenció al consistorio para que cancelara el contrato y le cediera el derecho de uso de los terrenos durante 30 años. A pesar de las promesas de crear empleo en la localidad, la fábrica nunca se materializó, y la empresa dejó de actualizar su página web en julio de 2023.

A lo largo de 2017 y 2018, Bio Wood Niebla SL retrasó repetidamente el inicio de la producción, y en febrero de 2018, cuando se esperaba que la fábrica estuviera operativa, Serrano abandonó la sociedad y redujo el capital social de la empresa de 1,2 millones de euros a 7.000.

En cumplimiento de las bases del apoyo económico otorgado, la empresa debería haber ejecutado las inversiones en un plazo de 18 meses. Sin embargo, no solo incumplió el plazo, sino que tampoco devolvió el préstamo después de que el Ministerio de Industria iniciara un expediente de reintegro en 2019. La empresa no presentó la documentación requerida para justificar la inversión y, como consecuencia, se le ordenó devolver todo el préstamo junto con los intereses de demora.

Fianza de 3,3 millones de euros

En marzo de 2024, el juzgado encargado de investigar el supuesto fraude acordó la apertura de juicio oral contra el propio Serrano y sus ex socios, Pelegrín y Francisco Javier López Ballesteros.

En la resolución, el juez les impuso a cada uno de ellos, como responsables civiles directos, el pago de una fianza de 3.318.667,00 euros para “asegurar las responsabilidades pecuniarias que, en definitiva, pudieran imponérsele”.

El líder de Vox, Santiago Abascal, ha anunciado este jueves que los cuatro vicepresidentes autonómicos de su formación presentarán su dimisión y su partido pasará a ejercer la oposición. (Fuente: Europa Press / Vox / PP / Congreso)

Ante la posibilidad de cárcel (la Fiscalía solicita ocho años, mientras que la acusación particular de Facua lo eleva a diez años) Serrano intentó escudarse en que fue engañado por sus ex socios, según informa El Diario de Sevilla.

Aseguró que tenía una “confianza ciega” en ellos y que le hicieron creer que si que iban a comprar la maquinaria necesaria para la fábrica, porque en las facturas proforma y en los presupuestos soportes de las facturas, se indicaba que tardarían en fabricarse entre seis y nueve meses desde su encargo.

Sin embargo, los jueces rechazaron estas “alegaciones exculpatorias de fondo que deberá examinar el órgano de enjuiciamiento a la luz de las pruebas de se practiquen durante el plenario”.