Petro lanzó dura advertencia a los campesinos del Micay, tras secuestro y liberación de 29 uniformados: habló de “poderes extranjeros”

Con un duro mensaje en sus redes sociales, el presidente de la República, Gustavo Petro, se refirió el domingo 9 de marzo de 2025 a la grave situación de seguridad en el departamento del Cauca: en el que se registró el secuestro y posterior liberación de un miembro del Ejército Nacional y 28 más de la Policía, por cuenta de habitantes de la zona, en la que tiene poderosa influencia las disidencias de las Farc.

A través de su cuenta de X, el primer mandatario volvió a pronunciarse acerca del origen de esta problemática, que se ha convertido en un auténtico “dolor de cabeza” para el Gobierno; pues las intervenciones de la fuerza pública en esta región del país parecen no dar frutos a corto plazo; en medio de la presión de estructuras armadas ilegales como el bloque Jaime Martínez y la columna móvil Carlos Patiño, leales a Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco.

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“El cañón del Micay está dominado por carteles mafiosos extranjeros que construyendo ejércitos privados construyen la obediencia y el silencio campesino, que logran con el engaño, la sujeción económica y el miedo”, expresó el primer mandatario en su perfil, en relación con los hechos que van en contra de la intención de sacar adelante la política de Paz Total del Ejecutivo; la misma que no registra progresos significativos en sus diferentes diálogos, como acontece en la zona del Catatumbo con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

De acuerdo con el jefe de Estado, “el campesinado decide, si se continúa con una economía ilícita" que, a su juicio, “solo trae muerte de hijos y desesperanza”, o, con el Gobierno, y de manera voluntaria, “nos movemos hacia una economía para la Vida, de producción alimentaria agroindustrializada y con posibilidades de exportación”. Con ello, el gobernante exhortó a los habitantes de esta región a dejar a un lado prácticas que ponen en riesgo no solo su integridad física, sino del territorio, siendo uno con más alta densidad en materia de cultivos ilícitos.

Con un mensaje en sus redes sociales y luego de la intervención del ministro del Interior, Armando Benedetti, y de Defensa, general (r) Pedro Sánchez, fue el jefe de Estado el que confirmó la liberación de los uniformados que estuvieron secuestrados por presión a la población del frente Carlos Patiño de las disidencias de las Farc, que domina en esta zona, en la que el tráfico de estupefacientes sigue siendo la economía dominante, pese a los anuncios sobre restitución de tierras.

“Hoy rindo homenaje a la enorme bandera de la Libertad que creó la República de Colombia. Han sido liberados todas las personas de la fuerza pública retenidas por grupos campesinos engañados del Micay”, expresó el jefe de Estado durante la jornada del sábado 8 de marzo, en hechos que causaron una serie de comentarios en las redes sociales; en especial, entre los políticos contrarios al Gobierno nacional, como algunos de los miembros del Centro Democrático, como la senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal.

“¿Cobardía o complicidad? Los hombres de nuestra fuerza pública no fueron ‘retenidos’ estaban secuestrados y les violaron sus derechos humanos”, afirmó Cabal en la publicación, en la que replicó el mensaje del primer mandatario, referente a la situación de orden público en el occidente colombiano. Una discusión que ha sido reiterativa contra los medios del Gobierno nacional, pues con este término buscarían –según sus críticos– bajarle el impacto a esta clase de acontecimientos, que suponen un reto para los organismos del Estado.