El fotógrafo de la boda de Meghan Markle y el príncipe Harry reveló detalles desconcidos de la celebración

Durante uno de los eventos más esperados, la boda de Meghan Markle y el príncipe Harry en Windsor Castle, se impartieron advertencias cuidadosamente pensadas para garantizar la privacidad. El reconocido fotógrafo Alexi Lubomirski, encargado de capturar los momentos clave durante el compromiso y la boda de la pareja, reveló los detalles sobre la seguridad y el protocolo del evento.

Según Lubomirski, los guardias del castillo advirtieron a los invitados que tuvieran cuidado con sus conversaciones ya que, “el mundo puede leer los labios”. Este consejo provocó una peculiar característica entre los asistentes, muchos se cubrían la boca al hablar, conscientes de que sus palabras podrían ser descifradas por cámaras y observadores atentos.

Lubomirski no solo fue el encargado de capturar la esencia del evento de 2018, sino también de gestionar la logística fotográfica de una reunión tan ilustre. Frente a la tarea de retratar a la familia real, compartió su estrategia en TikTok, donde reveló cómo recurrió a dulces británicos, específicamente Smarties, para obtener sonrisas genuinas de los niños durante el posado grupal.

Este ingenio le permitió romper la rigidez típica de las fotos reales al combinar poses sentadas y de pie para lograr una composición dinámica. Además, siguiendo el consejo directo de Harry, Lubomirski supo que debía ser rápido al fotografiar a la reina Isabel II y al príncipe Felipe, quienes ya estaban acostumbrados a largas sesiones de fotos.

El destino de Lubomirski como fotógrafo oficial de los duques de Sussex comenzó sorpresivamente cuando recibió una llamada inesperada del Palacio de Kensington. Este contacto marcó el inicio de su rol en captar los momentos más personales de Harry y Meghan, reflejando su deseo de liberarse de las formalidades habituales.

Para lograr esto, Lubomirski adoptó un enfoque más natural, primero fotografiando a la pareja dentro de Frogmore Cottage para lograr un ambiente distendido antes de aprovechar la belleza de un día de noviembre al aire libre. Este estilo permitió a Lubomirski capturar la personalidad auténtica de la pareja, estableciéndolo como un narrador visual clave de su historia.

Entre las imágenes emblemáticas tomadas por Lubomirski se encuentra una que canaliza energía y emoción sinceras, una foto en blanco y negro de Harry y Meghan sentados en unas escaleras, representando su primer momento solos tras la ceremonia. Esta foto simboliza el alivio y la alegría tras los votos nupciales.

Además, Lubomirski se inspiró en una fotografía famosa de Audrey Hepburn y Mel Ferrer para crear una imagen paralela de la pareja envueltos en un abrigo, un retrato que capturó una risa espontánea y fue visto por miles de millones de personas. Estas escenas lograron plasmar no solo la unión real, sino también el amor compartido .

El séptimo aniversario de bodas de Harry y Meghan fue celebrado con un toque emotivo por Meghan, quien compartió en Instagram un tributo a su relación. La publicación incluyó una serie de imágenes inéditas y un mensaje de agradecimiento a quienes acompañaron su viaje amoroso, tanto de cerca como a distancia.

“Siete años de matrimonio. Una vida de historias”, escribió Meghan, reafirmando la fuerza y significado de los momentos compartidos junto a Harry y su creciente familia, ahora en California. Su mensaje incluyó también un reconocimiento afectuoso para su comunidad de seguidores, simbolizado con un corazón rojo, enfatizando su gratitud por el apoyo constante recibido .