Estados Unidos descartó fijar metas sobre el valor del yen en las negociaciones con Japón sobre los aranceles

El secretario del Tesoro, Scott Bessent, destacó que el enfoque de Washington se centra en “barreras comerciales no arancelarias, manipulación de divisas y subsidios gubernamentales a la mano de obra y la inversión en capital fijo”

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El secretario del Tesoro, Scott
El secretario del Tesoro, Scott Bessent (REUTERS/Nathan Howard/Archivo)

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, afirmó este miércoles que la Administración Trump no tiene “objetivos de divisas” en las conversaciones con Japón sobre tarifas comerciales, a pesar de los repetidos llamados del mandatario republicano para una moneda yen más fuerte.

Esta aclaración llega en el marco de la preparación para la segunda ronda de negociaciones entre ambos países, programada para el 1 de mayo, que se espera sea un indicador de los esfuerzos de otros países que también buscan alivios arancelarios.

Bessent destacó que el enfoque de Washington se centra en cuestiones como “aranceles, barreras comerciales no arancelarias, manipulación de divisas y subsidios gubernamentales a la mano de obra y la inversión en capital fijo”. No obstante, subrayó que no existen objetivos específicos en cuanto al tipo de cambio de la moneda japonesa, tal como ha solicitado el presidente Trump.

Estados Unidos descartó fijar metas
Estados Unidos descartó fijar metas sobre el valor del yen en las negociaciones con Japón sobre los aranceles (REUTERS/Evelyn Hockstein)

Por su parte, el ministro de Finanzas japonés, Katsunobu Kato, indicó que está preparado para mantener “consultas estrechas sobre las tasas de cambio” con Bessent durante su reunión prevista para este jueves, en el marco de un encuentro del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, según medios japoneses.

El yen, que se deprecia frente al dólar, hace que los productos japoneses sean más baratos en los mercados internacionales, lo que favorece las exportaciones del país. Por otro lado, un dólar fuerte significa que los productos estadounidenses se vuelven menos competitivos en comparación. Desde el anuncio de las tarifas por parte de Trump, el yen ha experimentado una apreciación significativa, alcanzando un valor de 158 yenes por dólar a mediados de enero.

Japón, que es uno de los principales aliados de EEUU y la cuarta economía mundial, se enfrenta a la imposición de tarifas de un 10 por ciento sobre la mayoría de los productos, además de aranceles más altos sobre automóviles, acero y aluminio.

El ministro de Finanzas japonés,
El ministro de Finanzas japonés, Katsunobu Kato, indicó que está preparado para mantener “consultas estrechas sobre las tasas de cambio” con Bessent (REUTERS/Issei Kato)

Además, el presidente Trump implementó gravámenes “recíprocos” del 24% sobre ciertos productos japoneses, aunque estas han sido suspendidas por 90 días, al igual que las de otros países, excepto China.

La última ronda de conversaciones se celebró a mediados de abril, pero no logró resultados concretos. El embajador japonés en EEUU, Ryosei Akazawa, se reunió la semana pasada con Trump y otros funcionarios estadounidenses de alto nivel. Según reportes de medios japoneses, Akazawa regresará a Washington para una nueva ronda de negociaciones el 1 de mayo.

El medio japonés NHK citó fuentes no identificadas que indicaron que los negociadores estadounidenses han dejado claro que Washington no puede hacer excepciones para Japón en cuanto a los aranceles. Sin embargo, otros informes sugieren que Tokio está considerando posibles concesiones, como aumentar las importaciones de arroz y soja de EEUU, así como relajar las regulaciones de seguridad para automóviles en Japón.

El embajador japonés en EEUU,
El embajador japonés en EEUU, Ryosei Akazawa, se reunió la semana pasada con Trump y otros funcionarios estadounidenses de alto nivel (REUTERS)

Además de las tarifas arancelarias, la administración de Trump ha comenzado investigaciones de seguridad nacional sobre las importaciones de chips y productos farmacéuticos, lo que podría resultar en la imposición de nuevos aranceles sobre estos sectores clave.

En cuanto a las expectativas para la próxima ronda de negociaciones, el Gobierno japonés sigue buscando una exención para la industria automotriz, que es uno de los sectores más afectados por las tarifas, dado que Japón es un importante exportador de vehículos y partes de automóviles a EEUU.

(Con información de AFP y EFE)