
Una investigación liderada por un equipo internacional de científicos abrió nuevas vías para entender la atmósfera de la Era Mesozoica gracias al análisis de dientes fosilizados de dinosaurio.
El estudio desarrollado por investigadores de las universidades de Göttingen, Mainz y Bochum demuestra que estos dientes actúan como verdaderas cápsulas del tiempo y permiten acceder a datos precisos sobre las condiciones ambientales que dominaron la Tierra durante el reinado de los dinosaurios.
La investigación se publicó en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, y según la Universidad de Mainz, el equipo examinó restos dentales procedentes de América del Norte, África y Europa, de ejemplares que habitaron tanto el Jurásico tardío como el Cretácico tardío.
Un método innovador: análisis de isótopos de oxígeno
El procedimiento desarrollado representa una herramienta novedosa para reconstruir el clima prehistórico. Los científicos consiguieron identificar las proporciones relativas de los tres isótopos naturales de oxígeno presentes en el esmalte dental, que reflejan la composición del oxígeno inhalado y se ven modificados por factores como la cantidad de dióxido de carbono atmosférico y la actividad fotosintética de la vegetación.
El esmalte de los dientes, conocido por su extraordinaria estabilidad biológica, conserva de manera sobresaliente la información isotópica, lo que posibilita una lectura directa de las condiciones atmosféricas del pasado.

Hasta la fecha, la paleoclimatología se basaba principalmente en el análisis de carbonatos del suelo y de proxies marinos, indicadores presentes en ambientes acuáticos que funcionan como testigos indirectos del clima antiguo.
Esta nueva técnica se convierte en el primer método específico para vertebrados terrestres, permitiendo ampliar las fuentes de información y reducir la incertidumbre de los enfoques tradicionales. La capacidad de estudiar los tres isótopos de oxígeno en dientes fosilizados representa un avance crucial en la comprensión de los climas prehistóricos, según afirmó la Universidad de Mainz.
Cambios en el dióxido de carbono y clima durante la Era Mesozoica
La investigación revela aumentos considerables en las concentraciones de CO₂ durante la era de los dinosaurios. En el Jurásico tardío, hace aproximadamente 150 millones de años, la atmósfera tenía niveles de dióxido de carbono cuatro veces superiores al periodo preindustrial. Este dato marca una diferencia sustancial respecto a la actualidad y permite un entendimiento más profundo de los mecanismos de los climas de efecto invernadero antiguos.

Para el Cretácico tardío, entre 73 y 66 millones de años atrás, la concentración de CO₂ se situaba en torno a tres veces la del periodo preindustrial. Los científicos destacan que estos valores fueron posibles gracias a la precisión derivada de la medición isotópica en dientes, una aproximación hasta ahora inexplorada en especímenes terrestres. Este punto de referencia resulta esencial para comparar la evolución de la atmósfera a lo largo del tiempo, previo a la alteración antrópica.
Efectos sobre la fotosíntesis y la productividad vegetal
Además de analizar los gases atmosféricos, el método permitió conocer la actividad vegetal global durante la era mesozoica. Según los datos recogidos, la producción primaria de las plantas duplicaba la capacidad observada en la actualidad. Este hallazgo indica que los elevados niveles de CO₂ y las temperaturas medias altas potenciaron la fotosíntesis en la vegetación terrestre y acuática, incrementando de forma significativa la productividad de la biomasa.
Los autores vinculan el dinamismo climático mesozoico con esta elevada productividad vegetal, explicando que la vegetación respondió con un desarrollo y una actividad notablemente mayores que las que se presentan hoy. Los registros obtenidos en los dientes permiten comprender mejor esta singularidad del clima en época de dinosaurios.
Picos de CO₂ y el papel de la actividad volcánica
El análisis isotópico mostró combinaciones inusuales en dientes de especies como Tyrannosaurus rex y Kaatedocus siberi. Estas anomalías indican la existencia de picos repentinos de CO₂ que, según los científicos, podrían estar relacionados con intensos episodios volcánicos, como las erupciones de la región de Deccan Traps en la actual India hacia el final del Cretácico.

Esta conexión sugiere que las variaciones químicas detectadas en los fósiles reflejan episodios de alteraciones atmosféricas drásticas causadas por la geología terrestre. Los datos, además, refuerzan la hipótesis de que los aumentos abruptos de CO₂ están directamente asociados a grandes extinciones y transformaciones ecológicas, especialmente durante los cambios de era, de acuerdo con las observaciones del equipo investigador.
Importancia del avance metodológico
Según la Universidad de Mainz, esta investigación representa una mejora fundamental para la paleoclimatología, ya que brinda una alternativa a los estudios centrados exclusivamente en sedimentos y marcadores marinos. El método nuevo permite aproximarse directamente a las condiciones atmosféricas experimentadas por animales terrestres a través del análisis detallado del esmalte dental fosilizado.
El Dr. Dingsu Feng, del Departamento de Geoquímica y Geología Isotópica de la Universidad de Göttingen, destacó: “Nuestro método proporciona perspectivas totalmente nuevas sobre el pasado de la Tierra. Ahora es posible estudiar la composición de la atmósfera primitiva y la productividad de la vegetación, tanto terrestre como marina, haciendo uso del esmalte dental fósil. Esto resulta esencial para comprender las dinámicas climáticas a largo plazo”.
Dientes fosilizados, isótopos precisos y vinculaciones volcánicas conforman las claves de este avance, que amplía el horizonte del estudio climático prehistórico y refuerza la relevancia de los fósiles terrestres para descifrar el pasado de nuestro planeta.
Últimas Noticias
Ritmo cerebral: cómo la música electrónica impacta en la mente y la conciencia
Una investigación reveló que ciertas frecuencias sonoras influyen en la actividad neuronal. El estudio analizó los patrones acústicos repetitivos y su efecto en las experiencias individuales

Nuevos hallazgos fósiles revelan cómo era el planeta antes del asteroide que extinguió a los dinosaurios
Científicos lograron reconstruir ambientes marinos en el sur de Estados Unidos e identificar señales geológicas de catástrofes ocurridas hace millones de años

El secreto de los lagartos australianos para resistir el veneno de las serpientes más mortales del mundo
Una investigación identificó 25 modificaciones genéticas distintas en los eslizones que les permiten sobrevivir a toxinas de alta peligrosidad. Por qué el hallazgo brinda pistas para el desarrollo de antídotos más eficaces

Investigan un hongo intestinal que revierte el daño causado por una enfermedad hepática silenciosa
Un ensayo preclínico realizado por especialistas de la Universidad de Minnesota identificó en modelos animales una especie capaz de producir un compuesto que mejora la función del órgano afectado

El rover Curiosity de la NASA cumplió 13 años en Marte y lo “festejó” con la foto de una roca coral
El poderoso robot marciano sigue haciendo historia. Concebido para operar por dos años, continúa asombrando a los científicos y amantes del espacio con cada tarea que lleva adelante antes de ponerse en modo de reposo
