Descubrieron en Canadá una mariposa que vivió oculta 40.000 años sin contacto con otras especies

El insecto fue hallado en un ecosistema remoto donde desarrolló una genética única que intriga a los científicos

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Una nueva mariposa fue descubierta
Una nueva mariposa fue descubierta en Canadá tras 40.000 años de aislamiento genético extremo (Wilder Institute)

Un equipo internacional de científicos ha identificado una nueva especie de mariposa en el Parque Nacional Waterton Lakes, en las Montañas Rocosas de Canadá.

Según informó National Geographic, esta especie, denominada Satyrium curiosolus o “curiously isolated hairstreak” (mariposa curiosamente aislada), ha permanecido genéticamente separada de sus parientes más cercanos durante aproximadamente 40.000 años.

Este descubrimiento, publicado en la revista ZooKeys, destaca no solo por la singularidad genética de la especie, sino también por su adaptación a un entorno ecológico único.

De acuerdo con The Washington Post, esta mariposa fue confundida durante mucho tiempo con la especie Satyrium semiluna, conocida como “half-moon hairstreak” o mariposa de media luna.

Ambas son pequeñas, con alas de tonalidades marrón grisáceas, pero un análisis genético realizado en la región de Blakiston Fan, un abanico aluvial en el Parque Nacional Waterton Lakes, reveló que se trata de una especie distinta.

Este hábitat, caracterizado por una mezcla de praderas y pastizales, ha sido el refugio exclusivo de S. curiosolus, que se encuentra a unos 400 kilómetros de su pariente más cercano.

El aislamiento prolongado de esta mariposa ha dejado una huella notable en su genoma. Según explicó el investigador Zac MacDonald a National Geographic, la especie presenta una diversidad genética extremadamente baja y una alta tasa de endogamia histórica.

Sin embargo, este fenómeno, que en otras circunstancias podría haber llevado a la extinción, parece haber favorecido a S. curiosolus.

Los científicos sugieren que la especie ha experimentado un proceso conocido como “depuración genética”, mediante el cual las mutaciones perjudiciales se eliminan a lo largo de generaciones de aislamiento.

Este fenómeno también se ha observado en otras especies aisladas, como el zorro de las Islas del Canal.

Además de su singularidad genética, S. curiosolus ha desarrollado relaciones simbióticas únicas en su entorno. Según detalló BBC Wildlife, las larvas de esta mariposa dependen exclusivamente de la lupina plateada (Lupinus argenteus) como planta huésped, una asociación que no se encuentra en otras poblaciones de Satyrium semiluna.

Asimismo, las larvas mantienen un vínculo sorprendente con la hormiga Lasius ponderosae.

Científicos identificaron una especie inédita
Científicos identificaron una especie inédita que vive en simbiosis con hormigas y depende de una planta exclusiva (Wilder Institute)

A cambio del néctar dulce que secretan, las hormigas protegen a las orugas de depredadores y parásitos. Incluso se ha documentado que las orugas buscan refugio en los nidos subterráneos de las hormigas durante olas de calor o situaciones de peligro.

El origen de este aislamiento genético y geográfico se remonta a la última glaciación. Según explicó el investigador Julian Dupuis a BBC Wildlife, S. curiosolus logró sobrevivir en un “refugio glacial”, una pequeña área de tierra que no se congeló durante la era de hielo.

Este refugio permitió que la especie persistiera mientras otras poblaciones desaparecían. Sin embargo, esta adaptación a un nicho ecológico tan específico también representa una amenaza para su supervivencia futura.

El cambio climático y las alteraciones en el ecosistema de Blakiston Fan podrían poner en peligro a esta especie, que ya enfrenta riesgos debido a su baja diversidad genética y su pequeña población, estimada en alrededor de 500 individuos.

Estas características limitan su capacidad de adaptación a nuevas condiciones ambientales. Aunque en otros casos se ha recurrido al “rescate genético”, introducir individuos de poblaciones cercanas para aumentar la diversidad genética, los científicos advierten que esta estrategia podría ser contraproducente para S. curiosolus.

Las diferencias genéticas y ecológicas entre esta especie y sus parientes cercanos podrían generar una “depresión por mestizaje”, debilitando aún más a la población.

Los investigadores han recomendado un monitoreo continuo y una evaluación cuidadosa para determinar las mejores estrategias de conservación.

Según consignó The Washington Post, la inclusión de S. curiosolus en la lista de especies en peligro, al igual que su pariente S. semiluna, podría ser un paso crucial para garantizar su protección.