
Cita marcada en rojo en el calendario de los aficionados taurinos este domingo en Las Ventas con la tradicional corrida de La Beneficencia, protagonizada por Morante de la Puebla -que ha logrado su primera salida a hombros por la puerta grande en Madrid-, Fernando Adrián y Borja Jiménez. Como no podía ser de otro modo, la plaza se llenó de rostros conocidos dispuestos a disfrutar del espectáculo.
Una embarazadísima Teresa Urquijo -radiante con un veraniego diseño estilo boho con un llamativo estampado de reminiscencias hippies- junto a su marido, José Luis Martínez-Almeida; la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, que de lo más sonriente presenció la faena desde la barrera; José Ortega Cano, que no falta ni un día a su cita con la Feria de San Isidro; Mari Ángeles Grajal; el chef Mario Sandoval; Elena Hormigos y el juez Santiago Pedraz, que grandes aficionados a la tauromaquia se separaron por unas horas de su hijo Jacobo para ver a Morante; Nuria González acompañada por su hermana Yolanda; Ramón García con su hija Natalia; Maribel Yébenes; o Rafa Medina con un grupo de amigos.
Pero si alguien ha acaparado todas las miradas en la plaza esas han sido, sin duda, la infanta Elena y Victoria Federica. Demostrando una vez más su apoyo a la Fiesta Nacional, la nieta del Rey Juan Carlos disfrutó de la corrida tras su emocionante debut en el camino del Rocío junto a la Hermandad de Triana de Sevilla. Acompañada por un amigo y sin rastro de su novio Borja Moreno y Oriol, con el que hace semanas que no la vemos, la influencer derrochó risas y confidencias con su acompañante desde el burladero, apostando para la ocasión por un elegante top marrón con escote halter y detalles de botones nacarados por toda la prenda, pantalón blanco y su larga melena suelta ligeramente ondulada.
A varios metros de distancia, doña Elena en el tendido con su íntima amiga Rita Allende-Salazar, rivalizando en elegancia con Victoria con un look compuesto por blusa de jaretas en tonos verdes, blazer blanca, borsalino a juego y una maxi flor tridimensional en la solapa en color caqui. Especialmente sonriente, la tía de la Princesa Leonor agitó el pañuelo blanco pidiendo la oreja para Morante después de que el torero le brindase el toro.
Aunque madre e hija disfrutaron de la corrida por separado, se reencontraban a la salida de la plaza para poner rumbo a su domicilio en un coche conducido por la hermana de Felipe VI, y con la instagrammer en la parte de atrás sin hacer declaraciones sobre cómo ha vivido su primera romería al Rocío.
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