
La ONG Foro Penal reportó que en Venezuela hay actualmente 902 presos políticos, de los cuales 86 tienen otra ciudadanía o doble nacionalidad, según un boletín publicado este sábado correspondiente al 15 de diciembre.
El informe, difundido a través de la red social X, detalla que entre los detenidos hay 782 hombres y 120 mujeres; 898 son adultos y cuatro adolescentes de entre 14 y 17 años. Del total, 728 son civiles y 174 militares.
La organización advirtió que este listado “no incluye, todavía, a todos los que han sido arrestados y liberados o se mantienen bajo arresto a corto plazo (48 horas)” desde el momento de la publicación.
La mayoría de las detenciones se produjeron después de las elecciones presidenciales de julio de 2024, cuando el órgano electoral, bajo el control del régimen chavista, proclamó vencedor al dictador Nicolás Maduro, pese a las denuncias de fraude de la oposición agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), que reivindica la victoria del presidente electo Edmundo González Urrutia.
La dictadura venezolana de Maduro y la Fiscalía aseguran que en el país no existen presos políticos, al sostener que quienes permanecen privados de libertad cometieron delitos comunes, postura rechazada por ONG y dirigentes opositores.

Por otra parte, mencionaron el registro histórico de detenciones con fines políticos en Venezuela: “Detenciones políticas desde 2014 a la fecha: 18.612″. Por otra parte, hicieron hincapié en que el Foro Penal asistió a más de 14 mil detenidos, hoy excarcelados, y a otras víctimas de violaciones a sus derechos Humanos. “Además de los presos polítcos, más de 10.000 personas siguen sujetas, arbitrariamente, a medidas restrictivas de su libertad”.
El pasado jueves, la ONG Justicia, Encuentro y Perdón (JEP) alertó que 91 de los presos políticos presentan “enfermedades graves” y denunció un “deterioro físico progresivo” de los detenidos, al que calificó como “forma de violencia estructural”. En un mensaje en X, la JEP denunció la “negación sistemática de atención médica, el incumplimiento de tratamientos y la exposición a condiciones insalubres” en las cárceles, lo que supone “una violación directa al derecho a la vida y a la integridad personal”.
Martha Tineo, abogada y coordinadora general de Justicia, Encuentro y Perdón (JEP), informó que entre los presos políticos detenidos en Venezuela se registran “al menos 8 casos de cáncer en estado avanzado”, detallando diagnósticos de adenocarcinoma de próstata, cáncer pulmonar microcítico, linfoma no Hodgkin, sarcoma epitelioide, así como tumores pancreáticos y cerebrales.

La letrada agregó que algunos detenidos sufren “daño renal irreversible o infecciones urinarias persistentes”, lo que les obliga a usar sondas urinarias permanentemente, pero muchos no reciben estos insumos o carecen de recursos para adquirirlos.
La JEP denunció a través de X la “negación sistemática de atención médica, el incumplimiento de tratamientos y la exposición a condiciones insalubres” en las cárceles venezolanas, situación que calificó como “una violación directa al derecho a la vida y a la integridad personal”.
El 6 de diciembre, Foro Penal informó la muerte en prisión —y bajo custodia del régimen— del ex gobernador de Nueva Esparta, Alfredo Díaz, quien llevaba más de un año encarcelado y en aislamiento. Desde 2014, “murieron 17 presos políticos” bajo custodia de la dictadura, según indicó Alfredo Romero, director presidente de Foro Penal.
(Con información de EFE)
Últimas Noticias
La estrategia del régimen cubano para sostener a Maduro, aferrarse al petróleo venezolano y sobrevivir a su peor crisis
Asesores y agentes de inteligencia de La Habana operan en Venezuela y contribuyen al sostenimiento de la dictadura chavista a cambio del crudo que necesita Cuba para evitar el colapso energético
Un historiador de la Sociedad Bolivariana renunció tras el reconocimiento a Maduro como “Arquitecto de la Paz”: “Es una perversión de la Historia”
Francisco Perdomo Terrero tomó esa decisión -de manera irrevocable- al sostener que se premió a una persona que ha edificado su poder sobre la “represión, el miedo y la miseria nacional”



