El álbum de fotos de Rosalía en Buenos Aires: del atardecer en el Obelisco a la visita a La Bombonera con Trueno y Momo

La artista española sigue mostrando en sus redes las cosas que va descubriendo en su visita porteña

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Rosalía compartió en sus redes una serie de imágenes que retratan su paso por Buenos Aires y dejó en evidencia el vínculo cada vez más profundo que mantiene con la ciudad. En esta visita, la artista española recorrió distintos rincones porteños, desde íconos turísticos hasta espacios culturales y gastronómicos, y también se reunió con figuras locales de la música y el streaming.

Entre las postales que publicó, se la ve disfrutando del atardecer desde una terraza con vista privilegiada a Puerto Madero, posando con un vestido rosa pastel y botas negras, celebrando el cielo porteño que luego inspiraría el texto con el que acompañó las fotos: “El cielo nació en Buenos Aires y de ahí nadie me baja”, en honor a su canción, Reliquia, en la que menciona “Pero el cielo nació en Buenos Aires”. En entrevistas posteriores mencionó que es “el más hermoso que vio en su vida” y que “está tan cerca que es como si pudieras comértelo”.

En otro de los registros aparece, captada desde el Obelisco, la Avenida 9 de Julio iluminada al caer la tarde, una imagen que confirma cuánto la impacta la ciudad desde lo visual. Una parte importante de su recorrido tuvo que ver con la música. Rosalía visitó La Bombonera junto a Trueno y el streamer Momo, donde posó con la camiseta de Boca y recorrió el estadio por dentro, incluso el vestuario. Otra noche asistió a un show de la banda Cindy Cats, donde se la vio desde la platea VIP, con la mirada puesta en el escenario.

Una postal porteña de recuerdo
Una postal porteña de recuerdo
El el vestuario de Boca
El el vestuario de Boca
Palpitando la Bombonera
Palpitando la Bombonera
Comiendo un sándwich de miga
Comiendo un sándwich de miga ("en Europa no se consiguen")
En una entrevista con Mariana
En una entrevista con Mariana Enriquez

La artista también aprovechó su estadía para sumergirse en la cultura porteña desde lo literario: conoció a la escritora Mariana Enríquez en el bar notable Los Galgos, donde conversaron y compartieron una mesa en medio de un set de filmación. El costado gastronómico tampoco faltó: recorrió panaderías tradicionales, fotografió medialunas, masas secas y tortas, probó sándwiches de miga y visitó el restaurante “Encuentro Nativo”, conocido por fusionar estética de conventillo, tango y parrilla.

En su tiempo libre, Rosalía también exploró templos históricos, como se aprecia en las imágenes donde posa bajo cúpulas ornamentadas y mosaicos antiguos, y compartió planos de sus pies sobre pisos calcáreos típicos de las iglesias porteñas. La conexión con la cultura rioplatense siguió en la cocina: preparó recetas y tomó mate junto a Ailu Tokman y el creador de contenido culinario “Las Recetas de Simón”, quienes la recibieron en su hogar como una invitada más.

Aunque no aparecen en las fotos, la cantante también pasó por Luzu TV, se entrevistó con Mario Pergolini —una figura clave en la historia de los medios argentinos— y participó de un emotivo encuentro con Charly García, uno de sus ídolos.

El encuentro se produjo en el Hotel Faena y según pudo saber Teleshow se trató de un diálogo con muy buena onda en el que charlaron, sobre todo de música, tanto de la propia como de la ajena. Y un compromiso que quedó flotando en el aire. “Cuando Rosalía venga acá a tocar, se van a juntar con más tiempo, ella ya lo tenía muy escuchado Charly”, aseguraron desde el entorno de García.

Con Charly García en el
Con Charly García en el Faena

Antes de la despedida, los artistas intercambiaron souvenirs de sus respectivas cosechas, como se ve en la foto a la que accedió este medio. Charly le obsequió un vinilo de La hija de la lágrima, su ópera rock editada en 1993 y firmado de puño y letra. Por su parte, Rosalía intervino en modo saynomoreano la angelical portada de su álbum Lux. “Para Charly, la leyenda. Con amor”, firmó la artista con marcador negro y mucha gratitud. Y se llevó un tupido ramo de rosas.

En conjunto, las imágenes y las actividades que eligió muestran a una Rosalía cercana, curiosa y profundamente conectada con la identidad porteña, en una visita que sus seguidores locales celebraron como un gesto de amor hacia Argentina y su cultura.