Quiénes son los nominados de Gran Hermano: sorpresas, alianzas y tensiones en la gala especial

De cara a la recta final de la competencia, los jugadores pasaron por el confesionario y definieron la placa

Guardar
De cara a la recta final de la competencia, la casa de Gran Hermano vivió otra gala de nominación (Video: Gran Hermano - Telefe)

Con solo diez jugadores en carrera, el martes 13 de mayo se vivió una nueva gala de nominación en Gran Hermano (Telefe) y la tensión se sintió desde el primer minuto. A esta altura del juego, cada decisión, cada voto y cada mirada se convierte en una jugada estratégica rumbo a la esperada final. Esta semana, la placa volvió a ser negativa, y quien obtenga mayor porcentaje en la gala del domingo tendrá que dejar la casa

El primero en ingresar al confesionario fue Juan Pablo De Vigili, quien sin rodeos decidió apuntar sus votos contra Luz Tito, a quien le dio dos puntos, y contra Ulises Apóstolo, con un voto. En segundo turno entró Sandra Priore, quien no dudó en usar la espontánea, una jugada que le permitió otorgar tres votos a Juan Pablo y dos a Lucía Patrone. Katia La Tana, que ingresó después, eligió nominar con dos votos a Juan Pablo y uno a Luz, siguiendo así la línea que se empezaba a armar en la placa.

Selva Pérez optó por distribuir sus votos de manera diferente y apuntó dos contra Lucía y uno contra Luz. Santiago Algorta, el único uruguayo de la casa, votó a Ulises y a Selva, aunque sus votos fueron anulados por la última eliminada, lo cual hizo que no contaran para el resultado final. Como capitana de la semana, Luz Tito tuvo la posibilidad de emitir tres votos en lugar de dos. Ella eligió hacerlo contra Lourdes Ciccarone, con tres puntos, y contra Selva, con dos, buscando reconfigurar una placa que ya comenzaba a tomar forma.

Cómo quedó la placa parcial
Cómo quedó la placa parcial de esta semana (X)

Por otro lado, Eugenia Ruiz fue más directa y votó con dos puntos a Luz y uno a Katia. Luego ingresó Lucía, quien se inclinó por Juan Pablo con dos votos y Selva con uno. Ulises, por su parte, nominó a Luz y Juan Pablo, con dos puntos para cada uno, reforzando la tendencia que se venía acumulando. Finalmente, Lourdes dio sus votos a Lucía y a Juan Pablo, completando así una ronda de nominaciones cargada de alianzas, tensiones y decisiones que marcarán el rumbo en las próximas semanas.

De esta forma, la placa quedó conformada por Juan Pablo, Luz, Lucía, Katia, Selva y Ulises. Vale destacar que el liderazgo esta semana no implica salvación ni posibilidad de modificar la placa, ya que por el nivel avanzado del juego, esa facultad fue suspendida. Por lo tanto, los nominados definitivos ya están a consideración del público.

Este nuevo escenario se da después de la reciente eliminación de Gabriela Gianatassio, que ocurrió el domingo pasado tras una gala con votación positiva. La cantante brasileña quedó fuera de competencia al recibir solo el 2,3% de los votos del público, siendo superada por Lucía, quien acumuló un 3,5%. Fue una de las eliminaciones más ajustadas de la temporada y dejó a los jugadores remanentes en una situación aún más competitiva.

En la última gala de eliminación, Gabriela quedó afuera de la competencia (Video: Gran Hermano - Telefe)

La gala del domingo tuvo una estructura particular. Santiago del Moro fue el encargado de revelar los sobres plateados, naranjas y el rojo, este último reservado para quien menos apoyo obtuviera del público, en una secuencia que mantuvo en vilo tanto a los jugadores como a los televidentes. Los nombres fueron revelados uno a uno: Katia, Sandra, Eugenia, Tato, Selva, Luz, Lourdes y Ulises lograron zafar de la placa, quedando Lucía y Gabriela como las dos menos votadas. El sobre final determinó que la brasileña debía abandonar la casa.

La salida de Gabriela marcó la semana 23 de competencia y reconfiguró las estrategias de cara a lo que viene. La eliminación se definió por la falta de apoyo, lo cual dejó en evidencia que su juego no estaba conectado con el pulso del público. Además, su partida terminó con una de las alianzas más silenciosas de la casa, y su ausencia se hizo sentir de inmediato en los votos de sus excompañeros.

Ahora, con solo diez jugadores y una placa definida, el juego entra en su etapa más cruda. Cada decisión puede ser definitiva, y cada movimiento tiene consecuencias. En Gran Hermano ya no hay margen para los errores. El final se acerca y, con él, las verdaderas caras del juego empiezan a revelarse. Afuera, el público decide y adentro, los nervios crecen.