Así es la ciudad inteligente de Toyota donde los robots asistentes y los autos voladores son parte de la vida diaria

El innovador proyecto urbano a los pies del monte Fuji inicia su primera fase con 360 habitantes, quienes experimentarán la integración de inteligencia artificial, robótica y movilidad avanzada en un ambiente completamente sostenible

Guardar
Las primeras fases serán para
Las primeras fases serán para evaluar cómo será el comportamiento de lo humano con la tecnología más avanzada. (Foto: Toyota)

La inminente apertura de Woven City, el ambicioso proyecto de Toyota a los pies del monte Fuji, marca un gran paso en la experimentación urbana: 360 residentes se preparan para habitar el que se presenta como el “laboratorio viviente” más avanzado del mundo, donde la convivencia diaria con robots asistentes y la promesa de autos voladores dejarán de ser ciencia ficción para convertirse en realidad.

Con una inversión que asciende a 8.500 millones de euros, Toyota ha concebido esta comunidad inteligente como un espacio controlado en el que tanto habitantes como investigadores podrán evaluar, en condiciones reales, la integración de tecnologías de vanguardia.

El presidente de la compañía, Akio Toyoda, presentó el proyecto durante el CES 2025, describiendo a Woven City como una ciudad completamente sostenible, en la que la energía solar y la generada por pilas de combustible de hidrógeno desempeñarán un papel central.

Es un espacio sostenible y
Es un espacio sostenible y con sistemas avanzados que estarán en cada hogar. (Foto: Toyota)

El propósito declarado es someter a prueba la interacción entre sostenibilidad ambiental, autonomía, inteligencia artificial y robótica, con la meta de impulsar el desarrollo de tecnologías que definirán el futuro de la vida urbana.

Cómo es el diseño de la ciudad inteligente de Toyota

El diseño de Woven City ha sido responsabilidad del arquitecto danés Bjarke Ingels y su estudio BIG, en colaboración con la firma japonesa Nikken Sekkei y la constructora Obayashi Corporation.

La propuesta urbanística integra viviendas, centros de investigación, áreas verdes y espacios comunitarios, buscando que la tecnología más avanzada se incorpore de manera natural en la vida cotidiana, sin sacrificar la conexión con el espacio natural.

La ciudad está ubicada cerca
La ciudad está ubicada cerca al monte Fuji. (Foto: Toyota)

Antes de la inauguración, los futuros habitantes participaron en un evento preparatorio en el Fuji Susono Technical Centre, situado frente a la nueva ciudad.

Durante esta jornada, los asistentes recibieron información detallada sobre el funcionamiento de los servicios, participaron en sesiones interactivas con robots y presenciaron demostraciones de los sistemas inteligentes que se instalarán en sus hogares, anticipando así la experiencia de vivir en un entorno experimental.

A cuántas personas acogerá la ciudad inteligente de Toyota y qué innovaciones hay

En la primera fase, Woven City acogerá a 360 personas, denominadas “weavers”, en su mayoría empleados de Toyota y sus familias. La compañía prevé aumentar gradualmente la población hasta alcanzar los 2.000 habitantes, y a partir de 2026, abrirá las puertas de la ciudad al público general.

La apuesta por coches autónomos
La apuesta por coches autónomos genera gran expectativa. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Entre las innovaciones que se desplegarán progresivamente destacan los vehículos autónomos, las mascotas robóticas interactivas, las sillas de ruedas de competición y, en un horizonte cercano, los esperados coches voladores.

Con este despliegue tecnológico, la empresa automotriz aspira a que Woven City se convierta en un referente para las ciudades sostenibles y tecnológicamente avanzadas del futuro.

Qué desafíos tiene esta integración entre lo robótico y lo humano

Este tipo de experimentos implicará la exposición de sus habitantes a tecnologías disruptivas sin precedentes, planteando interrogantes sobre los posibles desafíos sociales, éticos y técnicos.

Este tipo de desarrollos plantea
Este tipo de desarrollos plantea dudas sobre cómo afectará la dinámica social y la privacidad. (Imagen Ilustrativa Infobae)

La interacción cotidiana con robots asistentes, vehículos autónomos y sensores inteligentes exigirá la adaptación de rutinas y dinámicas familiares tradicionales, porque la automatización no solo facilitará tareas domésticas sino que recabará información sobre los hábitos de los residentes para optimizar servicios, gestionar la energía y anticipar necesidades.

A nivel social, uno de los principales retos será el equilibrio entre privacidad y eficiencia. Según informes recientes, experimentos urbanos similares han demostrado que la aceptación de estos sistemas depende en gran medida de la transparencia en la gestión de datos personales y de que existan mecanismos claros para proteger la intimidad.

Asimismo, estudios en ciudades inteligentes piloto en Asia han evidenciado que la “fatiga tecnológica” puede surgir cuando las personas sienten que pierden control sobre sus actividades diarias frente al predominio de algoritmos.