WeTransfer utilizará los archivos subidos por usuarios para entrenar su IA

El cambio en la política generó rechazo en redes sociales, donde muchos usuarios advierten sobre los riesgos para la privacidad y la propiedad intelectual

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WeTransfer actualiza sus términos y
WeTransfer actualiza sus términos y condiciones. (Foto: WeTransfer)

WeTransfer, la popular plataforma para enviar archivos de gran tamaño, anunció un cambio significativo en sus términos y condiciones de uso. A partir del 8 de agosto, todos los documentos que pasen por sus servidores —ya sean fotos, videos, textos o cualquier otro tipo de archivo— podrán ser utilizados por la empresa para entrenar sus sistemas de inteligencia artificial (IA).

La modificación fue incluida en la sección legal del servicio a fines de junio, pero ha comenzado a circular en redes sociales en los últimos días, generando una fuerte reacción de usuarios y profesionales que utilizan la herramienta de forma habitual. Muchos de ellos han manifestado su preocupación por la pérdida de control sobre sus contenidos y la falta de compensación por su uso.

WeTransfer, de origen neerlandés, es una de las plataformas más utilizadas en el mundo para compartir archivos pesados por internet. Su facilidad de uso y la posibilidad de enviar documentos sin necesidad de crear una cuenta le han permitido ganarse un lugar clave en sectores como el diseño, la producción audiovisual, la prensa y la educación.

WeTransfer actualiza sus términos y
WeTransfer actualiza sus términos y condiciones. REUTERS/Dado Ruvic/Illustration

Qué dice exactamente WeTransfer en sus nuevos términos

El cambio más polémico se encuentra en el apartado 6.3 de los términos y condiciones, donde la empresa especifica que, para poder ofrecer y mejorar su servicio, los usuarios deben concederle ciertos derechos sobre el contenido que suben. Esto incluye una licencia perpetua, mundial, no exclusiva, libre de regalías, transferible y con derecho a sublicencia sobre los archivos enviados.

Esa licencia le permitirá a la compañía reproducir, distribuir, modificar, crear obras derivadas, transmitir, exhibir públicamente y utilizar el contenido para entrenar modelos de aprendizaje automático. Según explican, el objetivo es mejorar tanto su tecnología actual como futuras funcionalidades basadas en IA.

En otras palabras, cualquier documento que pase por la plataforma —incluso de forma gratuita— podrá ser utilizado para desarrollar herramientas de inteligencia artificial, sin que el usuario reciba compensación económica ni control posterior sobre ese material.

WeTransfer entrenará a su IA
WeTransfer entrenará a su IA con archivos de sus usuarios. (foto: Trabajarencasa.com)

La reacción de los usuarios y qué opciones hay

Tras la difusión de este cambio, numerosos usuarios en redes sociales comenzaron a manifestar su rechazo a la medida. Algunos incluso han compartido capturas de pantalla de los nuevos términos, advirtiendo a otros sobre el riesgo que implica seguir usando WeTransfer sin conocer estas condiciones.

Las críticas apuntan, sobre todo, a la falta de claridad en la comunicación y al hecho de que el contenido protegido por derechos de autor —como diseños, guiones, fotografías profesionales o documentos sensibles— pueda terminar siendo usado por sistemas de IA sin el consentimiento explícito de sus autores.

Por ahora, WeTransfer no ha emitido un comunicado público más allá del documento legal en su sitio web. Tampoco ha ofrecido una opción para que los usuarios opten por no ceder sus derechos, algo que otras plataformas sí permiten en ciertos casos.

Wetransfer. REUTERS/Dado Ruvic/Illustration
Wetransfer. REUTERS/Dado Ruvic/Illustration

Frente a esta situación, algunos usuarios están comenzando a buscar alternativas que garanticen mayor privacidad, como Firefox Send (cuando estuvo activo), SwissTransfer, Tresorit Send o incluso servicios de almacenamiento en la nube como Google Drive o Dropbox, que tienen políticas más claras sobre el uso del contenido.

Una tendencia que crece en silencio

Lo ocurrido con WeTransfer es un nuevo ejemplo de una tendencia creciente: el uso de datos y contenido de usuarios para alimentar sistemas de inteligencia artificial. Muchas plataformas están incorporando cláusulas similares en sus políticas de uso, a menudo sin que los usuarios lo noten o comprendan su alcance.

Este tipo de prácticas abre un debate sobre los límites éticos del desarrollo de IA y el respeto por la propiedad intelectual. También plantea la necesidad de una mayor regulación y transparencia por parte de las empresas tecnológicas, en un momento donde la inteligencia artificial avanza más rápido que la legislación que la regula.