El 78 % de los colombianos admite dependencia al celular: revisan el celular antes de salir de la cama

El hábito, común entre jóvenes y adultos, despierta alertas sobre el efecto de las pantallas en el metabolismo cerebral y acentúa la importancia de promover actividades alejadas de la tecnología al comenzar la jornada

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El estudio de Nomophobia expone
El estudio de Nomophobia expone una rutina cada vez más extendida, donde la hiperconectividad temprana desafía la salud mental y exige nuevas estrategias de autocuidado y límites claros desde el entorno familiar y laboral - Imagen Ilustrativa Infobae

El ruido del despertador marca el inicio de la jornada, pero para la mayoría de los colombianos el verdadero impulso al abrir los ojos no es apagar la alarma, sino revisar el celular.

WhatsApp notificaciones, redes sociales y correos se convierten en prioridad incluso antes de preparar el primer café. Según una encuesta de Nomophobia, el 75 % de la población reconoce que lo primero que hace al despertar es mirar su teléfono. Antes de salir de la cama, ya se ha invertido en promedio veinte minutos frente a la pantalla.

Según expertos médicos, el uso
Según expertos médicos, el uso intenso del móvil en los primeros minutos del día puede impactar negativamente la memoria, la liberación de dopamina y el equilibrio emocional, reforzando un ciclo adictivo difícil de romper - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Qué indica el estudio sobre los colombianos

No se trata de un fenómeno aislado ni de una costumbre que pase inadvertida. El mismo estudio señala que el 48 % de los colombianos experimenta ansiedad o irritación cuando no tiene el dispositivo cerca y el 78 % admite sentirse dependiente del celular.

El teléfono inteligente ha dejado de ser solo una herramienta funcional para convertirse en una auténtica extensión del cuerpo, un objeto omnipresente en lo cotidiano y, en muchos casos, una fuente de estrés silencioso.

El auge tecnológico ha obligado a las marcas a repensar su rol más allá de la innovación de hardware o las mejoras en cámara y potencia. Cada vez más fabricantes exploran funciones que permitan a los usuarios gestionar su vida digital con mayor conciencia.

Herramientas para separar espacios personales y laborales, automatizar accesos sin distracciones y limitar el tiempo en pantalla surgen como respuestas a una necesidad profunda: la de recuperar parte del control sobre el propio bienestar digital.

El aumento de la ansiedad
El aumento de la ansiedad por el móvil motiva a fabricantes y desarrolladores a crear herramientas que facilitan la gestión del tiempo en pantalla y la diferenciación entre espacios personales y laborales en un mismo dispositivo - (Imagen Ilustrativa Infobae)

En busca de mayor equilibrio, los desarrolladores apuestan por soluciones como la creación de entornos independientes dentro de un mismo dispositivo. Este tipo de funciones ayuda a marcar, desde el propio teléfono, la diferencia entre lo personal y lo laboral, evitando que ambas esferas se invadan mutuamente. Así, se logran límites más sanos y una mejor gestión de la vida digital diaria.

Implicaciones del uso del teléfono al despertarse

Sin embargo, la dependencia va más allá de la organización: el uso del celular inmediatamente después de despertar comienza a arrojar señales de alerta desde la medicina. El doctor Manuel Viso, especialista en urgencias y hematología, advierte sobre los riesgos de esta rutina.

En sus publicaciones, sostiene que los primeros sesenta minutos tras levantarse son esenciales para el ajuste cerebral, un periodo en el que es preferible evitar el contacto con dispositivos electrónicos.

El experto apunta que el uso intensivo del teléfono al salir de la cama puede afectar procesos cerebrales clave como la memoria y el sueño, y favorecer alteraciones en la liberación de dopamina, la hormona del placer. La gratificación instantánea que produce el repaso de notificaciones genera un ciclo de recompensa inmediata, que el cerebro asocia como hábito, reforzando la dependencia.

Una encuesta revela que, antes
Una encuesta revela que, antes incluso de salir de la cama, la mayoría de los colombianos dedica veinte minutos al teléfono, una rutina que especialistas asocian con dependencia y riesgos para la salud cerebral y emocional - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Esta exposición temprana a la pantalla, sostiene el especialista, puede influir negativamente en la capacidad de concentración y la regulación emocional, con resultados en cadena durante el resto del día.

Incluso si aún no hay evidencia concluyente sobre el impacto de las radiaciones electrónicas, algunos estudios ya muestran alteraciones en el metabolismo de la glucosa cerebral tras el uso prolongado, con potenciales efectos sobre niños y adolescentes, quienes son más vulnerables a estos estímulos.

El celular se volvió indispensable en todos los ámbitos: personal, social y laboral. Pero la dependencia tecnológica plantea desafíos de salud mental que obligan a reflexionar sobre el uso responsable del dispositivo.

De acuerdo con los especialistas limitar el contacto durante los primeros minutos del día y promover actividades fuera de pantalla, como la lectura o el ejercicio, pueden influir significativamente en la salud mental.

La relación de los colombianos con el celular se redefine entre dependencia, bienestar y búsqueda de equilibrio. El reto de fondo será aprender a convivir con la tecnología sin que esta absorba por completo la atención y la salud en el inicio y desarrollo de cada jornada.