Cómo tomar fotos del cielo nocturno con el teléfono móvil como si fueran de la NASA

Observar un cielo estrellado es una de las experiencias más fascinantes de la naturaleza. Cuando se encuentra el lugar adecuado, sin luces artificiales y con el clima a favor, el firmamento se convierte en un espectáculo majestuoso. Y aunque parezca exclusivo de los telescopios o las cámaras profesionales, la fotografía astronómica también está al alcance de un teléfono móvil.

Gracias a la evolución de las cámaras integradas en los smartphones, hoy es posible capturar imágenes del cielo nocturno que recuerdan a las obtenidas por agencias espaciales como la NASA.

Para obtener buenos resultados, es fundamental evitar la contaminación lumínica. La ubicación puede marcar la diferencia entre una imagen apagada y una fotografía espectacular.

• Alejarse de ciudades o zonas con muchas farolas.
• Optar por entornos rurales, zonas montañosas o campos abiertos.
• Verificar que sea una noche con cielo despejado.
• Elegir una fecha con Luna Nueva o en la que la luna esté ausente.
• Consultar el pronóstico en sitios oficiales de clima para evitar nubes o neblina.
• Visitar el lugar durante el día para planificar la ubicación del equipo.

Una vez en el lugar, sin contaminación lumínica y con el teléfono listo, llega el momento de configurarlo adecuadamente. Casi todos los smartphones actuales ofrecen un “modo Pro” o “modo Profesional”, necesario para personalizar los parámetros de la cámara.

Configuración recomendada:

• Modo de cámara: activar el modo Pro, Profesional o “Expert RAW”.
• Formato de archivo: elegir RAW para conservar toda la información de la imagen.
• ISO: comenzar con valores entre 800 y 1600. Ajustar según el ruido visual que se genere.
• Balance de blancos (WB): establecer entre 4.000 K y 4.500 K para un tono natural del cielo.
• Enfoque: fijar en modo manual y ajustar a infinito.
• Zoom: utilizar el zoom x1 (sin acercamiento digital).
• Exposición (S): seleccionar entre 15 y 20 segundos para evitar que las estrellas salgan movidas debido a la rotación terrestre.
• Estabilización: nunca hacer la foto con la mano. Usar temporizador o control remoto para evitar vibraciones.

La fotografía astronómica requiere paciencia. Los resultados pueden variar según la posición de las estrellas, la contaminación atmosférica o el tipo de sensor del móvil. Por eso es recomendable:

• Hacer varias pruebas con distintos valores de ISO y exposición.
• Observar el resultado en pantalla antes de hacer nuevos ajustes.
• Editar posteriormente las imágenes RAW en una aplicación de edición como Lightroom o Snapseed para resaltar detalles sin perder calidad.

Aunque el teléfono es el protagonista, no es lo único que se necesita. Para una sesión exitosa, conviene llevar:

• Trípode para móvil: evita movimientos y mantiene la estabilidad durante exposiciones largas.
• Batería externa: prolonga el uso del teléfono durante sesiones nocturnas.
• Lente adicional (opcional): algunas mejoran la captación de luz o el ángulo de visión.
• Manta y chaqueta: las temperaturas pueden bajar, incluso en verano.
• Repelente de insectos y silla portátil: comodidad frente a los mosquitos y para sesiones largas.
• Alimentación ligera y linterna: útiles para moverse sin depender del móvil.

Las cámaras de los teléfonos móviles han evolucionado al punto de competir, en ciertos contextos, con equipos profesionales. Gracias a sensores avanzados, inteligencia artificial y ópticas de calidad, el usuario común puede capturar imágenes del cielo con un nivel de detalle sorprendente.

Lo que antes parecía una tarea reservada a astrónomos o fotógrafos especializados, hoy es una posibilidad abierta a quien esté dispuesto a salir de la ciudad, mirar hacia arriba y ajustar con precisión su dispositivo.

No es necesario invertir en equipos costosos. Solo se necesita un teléfono con modo manual, una noche clara, y la disposición para contemplar el universo desde una nueva perspectiva, desde la pantalla de un móvil convertido en ventana al cosmos.