En qué momentos del día debo quitarme mi reloj inteligente, según expertos

Aunque útiles, los relojes inteligentes también pueden perjudicar tu sueño, relaciones y bienestar emocional

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Una mujer con un 'smartwatch'
Una mujer con un 'smartwatch' (Freepik)

Los relojes inteligentes se han vuelto una extensión más del cuerpo humano. Cada vez más personas los utilizan para gestionar mensajes, alarmas, rutinas de ejercicio, monitorear su sueño e incluso controlar su estado emocional. Su utilidad es innegable, pero llevarlos puestos durante todo el día —y la noche— podría no ser tan beneficioso como parece.

Según Serge Eliseeff, experto en comportamiento digital y director ejecutivo de Online Free Games, el uso ininterrumpido de estos dispositivos puede generar efectos negativos tanto físicos como psicológicos. “La mayoría de la gente no se da cuenta de que hay momentos óptimos para usar un reloj inteligente y momentos en los que es mejor no usarlo”, afirma.

El especialista sugiere que quitarse el reloj en determinados momentos del día puede mejorar tanto la salud mental como la calidad de las interacciones sociales. A continuación, te contamos cuáles son esos momentos clave en los que deberías considerar desconectarte.

Experto da detalles de por
Experto da detalles de por qué no debes usar tu reloj inteligencia en ciertos momentos del día.

Durante las comidas

Aunque puede parecer inofensivo, tener el reloj inteligente durante las comidas puede convertirse en una fuente innecesaria de estrés. Eliseeff afirma que “lo último que necesitas mientras comes es que tu muñeca vibre con alertas”.

Las notificaciones constantes pueden interferir con el disfrute del momento y también con la digestión, al generar una sensación de apuro o de multitarea. Tomarse el tiempo para comer sin interrupciones tecnológicas ayuda a reconectar con la comida, con quienes nos acompañan y con uno mismo.

No debes estar al pendiente
No debes estar al pendiente de tu reloj inteligente durante todo el día. (Casa del Audio)

En el tiempo libre por la tarde

Finalizar la jornada laboral o académica debería dar paso a un periodo de descanso mental. Sin embargo, muchas personas mantienen activado su reloj inteligente durante ese tiempo, manteniendo el mismo nivel de alerta que durante el día.

“Tu cerebro necesita cambiar de ritmo, de la productividad a la relajación”, explica Eliseeff. Al dejar el reloj de lado durante este tramo del día, se le permite al cuerpo y a la mente comenzar una transición saludable hacia el descanso.

Durante las horas de sueño

Aunque muchos relojes inteligentes ofrecen funciones como el monitoreo del sueño, su uso durante la noche puede tener el efecto contrario al deseado. Según Eliseeff, “la luz azul de las pantallas o las notificaciones pueden perturbar el sueño de las personas sensibles”.

Los relojes inteligentes no deben
Los relojes inteligentes no deben ser usados todo el día. REUTERS/Michele Tantussi

Incluso si el reloj está en modo ‘no molestar’, su sola presencia puede generar cierta incomodidad o ansiedad. Para quienes necesitan evaluar su descanso, el experto recomienda hacerlo con dispositivos alternativos o limitar el uso del reloj solo a determinadas noches.

En momentos de socialización y vida familiar

Uno de los efectos más comunes (y menos considerados) de los relojes inteligentes es su impacto en las relaciones sociales. “Esas notificaciones se convierten en distracciones que te alejan de lo que importa”, advierte Eliseeff.

Estar pendiente del reloj mientras se conversa con amigos o familiares envía un mensaje implícito de desinterés. Dejar el dispositivo de lado durante estos espacios fortalece los vínculos, permite una conexión más profunda y reduce la ansiedad de estar siempre disponible.

El smartwatch no debería ser
El smartwatch no debería ser usado todo el día, según un experto. (Foto: Samsung)

Por razones psicológicas

Más allá de lo práctico, existe un efecto psicológico preocupante vinculado al uso constante del smartwatch. Eliseeff sostiene que “el impacto psicológico del autocontrol constante a través de relojes inteligentes es algo que apenas estamos empezando a comprender”.

La necesidad de cerrar anillos de actividad, contar pasos o alcanzar metas puede convertirse en una fuente de estrés en lugar de motivación. “Algunas personas se obsesionan tanto con alcanzar objetivos que experimentan verdadera ansiedad cuando no lo logran”, agrega.

Por eso, más allá de apagar notificaciones o personalizar alertas, puede ser más beneficioso establecer momentos del día para estar completamente desconectado del reloj inteligente. Se trata de encontrar un equilibrio: usar la tecnología como una herramienta útil y no como un sistema de control permanente.