Feliz cumpleaños a las Apple Store: así fue el lanzamiento de las primeras tiendas de la manzana

Desde su apertura en Estados Unidos, estos espacios fueron concebidos como entornos donde los productos se podían explorar sin intermediarios ni vitrinas

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En mayo de 2001, dos
En mayo de 2001, dos locales en Virginia y California marcaron el inicio de un modelo comercial que expandiría el universo Apple mucho más allá del hardware - REUTERS/Abdul Saboor/File Photo/File Photo

El 19 de mayo del 2001, Apple dio un paso que cambiaría para siempre la forma en la que las personas interactúan con la tecnología. Ese día, Steve Jobs presentó las dos primeras Apple Store, una en el centro comercial Tysons Corner Center, en Virginia, y otra en Glendale, California.

Aquel debut, observado con escepticismo por parte de la industria, se convirtió en uno de los pilares del resurgimiento de Apple. Hoy, 24 años después, las Apple Store no solo siguen activas, sino que son referentes globales de diseño, servicio y experiencia de usuario.

Una tienda centrada en el Mac

En sus primeros días, las Apple Store eran espacios pensados exclusivamente para el ecosistema Mac. Apple aún no fabricaba teléfonos ni relojes inteligentes; su catálogo se limitaba a ordenadores, y Steve Jobs quería que todos estuvieran disponibles para que los clientes pudieran probarlos encendidos, sin intermediarios.

Cada zona estaba dedicada a una categoría específica, con ordenadores listos para usarse, software instalado y personal capacitado para responder cualquier duda.

Uno de los elementos que se mantuvo desde aquel momento fue el Genius Bar, un mostrador de asistencia técnica que se convirtió en símbolo de las Apple Store. Allí, los usuarios podían resolver dudas o problemas con la ayuda de especialistas.

En aquella primera etapa, incluso existía una línea directa con la sede de Apple en Cupertino para escalar consultas técnicas a los ingenieros de la compañía.

El boom de las Apple Store

Sede de Apple Store en
Sede de Apple Store en Hong Kong

Pocos meses después, las ventas en las tiendas superaban las expectativas. El éxito fue inmediato, en su primer fin de semana, las tiendas facturaron más de 600.000 dólares.

Para 2003, Apple abría su primera “Flagship Store” en Chicago y, ese mismo año, inauguraba su primera tienda internacional en Tokio.

La llegada del iPod dio un impulso a la marca y atrajo nuevos públicos, pero fue el lanzamiento del iPhone en 2007 lo que transformó por completo el concepto de tienda. El teléfono de Apple no solo se convirtió en el producto más demandado, también cambió la manera en que se organizaban los espacios.

Sin saberlo, el fundador de
Sin saberlo, el fundador de Apple estaba diseñando el escenario perfecto para lo que vendría en 2007: un dispositivo que convertiría esas tiendas en centros de aglomeración global

Las zonas dedicadas al Mac perdieron protagonismo frente a las áreas centradas en el iPhone. Cada nuevo modelo generaba colas que se extendían por horas e incluso días.

Miles de personas acampaban frente a las tiendas para ser los primeros en tener el nuevo dispositivo. Apple tuvo que adaptar su sistema de reservas debido al volumen de usuarios que asistía a cada lanzamiento.

La evolución de las tiendas

Con la expansión del catálogo, las Apple Store cambiaron de aspecto y distribución. El lanzamiento de productos como el iPad, el Apple Watch y los AirPods obligó a rediseñar las tiendas para incorporar nuevas secciones.

A ello se sumaron los servicios como Apple Music, iCloud o Apple TV+, que también encontraron un espacio físico para presentarse al público.

El impacto del iPhone superó
El impacto del iPhone superó cualquier previsión y obligó a rediseñar por completo los locales ideados por Jobs, pensados inicialmente para mostrar ordenadores de escritorio - REUTERS/Abdul Saboor

Pero más allá de lo funcional, las tiendas evolucionaron hacia un diseño arquitectónico singular. Techos altos, luz natural, materiales nobles y presencia de elementos naturales como árboles interiores, transformaron las tiendas en espacios abiertos, más cercanos a plazas públicas que a comercios tradicionales.

Un ejemplo de este enfoque es la emblemática Apple Store en la Puerta del Sol, en Madrid, que se ha convertido en un punto de encuentro para usuarios y turistas.

En los últimos años, las Apple Store incorporaron un nuevo concepto: “Today at Apple”, sesiones gratuitas donde los visitantes pueden aprender a usar sus dispositivos, editar videos, mejorar sus fotos o incluso desarrollar música y aplicaciones.

Estos talleres se imparten en una pantalla central en la mayoría de las tiendas y están abiertos al público sin costo, reforzando la idea de que estos espacios son más que simples puntos de venta.

En la actualidad Apple cuenta con más de 500 tiendas en 20 países. A 24 años del inicio, el proyecto que comenzó con dos locales ahora es una red global que redefine el comercio minorista. Las Apple Store no solo venden productos, ofrecen experiencias, comunidad y conocimiento. Y todo comenzó con una idea que muy pocos creyeron posible.