Cómo es la vida del primer hombre al que Elon Musk implantó un chip en su cerebro

Noland Arbaugh confesó que, al principio, este procedimiento le parecía sacado de la ciencia ficción. Sin embargo, gracias a él, ha logrado recuperar funciones que había perdido, como la capacidad de jugar videojuegos, tras un accidente que lo dejó discapacitado

Guardar
Neuralink busca utilizar sus interfaces cerebro-computadora para tratar enfermedades y trastornos neurológicos como el Parkinson, la epilepsia y la parálisis. (@ModdedQuad)

Noland Arbaugh se convirtió en el primer hombre en recibir un implante cerebral de Neuralink, la compañía de neurotecnología de Elon Musk. El objetivo de este dispositivo era aumentar su autonomía, tras un accidente en 2016 que le causó parálisis del cuello hacia abajo de por vida.

Al conocer la iniciativa de Musk, Arbaugh decidió darle una oportunidad a este innovador invento tecnológico.

Así, se ofreció como voluntario, y la implantación resultó un éxito. Ahora, con el chip instalado en su cerebro, puede controlar una computadora utilizando únicamente sus pensamientos o imaginación.

Noland Arbaugh asegura que su
Noland Arbaugh asegura que su vida ha cambiado totalmente: ahora puede hacer cosas por él mismo y no depender de los demás. (Neuralink)

Cómo fue el procedimiento de implantación del chip

El chip de Neuralink se implanta en el cerebro sin tocar venas ni arterias, gracias al diseño preciso de su robot quirúrgico. La tecnología de Neuralink se basa en un implante llamado “Link”, un dispositivo del tamaño de cinco monedas apiladas, que se coloca en el cerebro mediante una cirugía invasiva.

Según la empresa, los 64 hilos conectados al chip permiten que el implante experimental, alimentado por una batería que se carga de manera inalámbrica, registre y transmita señales cerebrales también de forma inalámbrica.

Estas señales se envían a una aplicación que interpreta cómo la persona desea moverse.

El proyecto de Neuralink busca
El proyecto de Neuralink busca crear dispositivos implantables que puedan leer y escribir información en el cerebro. REUTERS/Dado Ruvic/Illustration/File Photo

El chip funciona captando las señales eléctricas generadas en el cerebro cuando la persona piensa o realiza alguna acción. Los hilos, extremadamente finos, tienen electrodos que se insertan en diferentes áreas del cerebro, según lo que se desee medir o estimular.

La comunicación con una computadora se realiza a través de un dispositivo inalámbrico colocado detrás de la oreja, lo que permite enviar y recibir información entre el cerebro y la computadora, facilitando el control de dispositivos externos o la modificación del funcionamiento cerebral.

Cómo es la vida de Noland Arbaugh

Noland Arbaugh, un joven que se ha convertido en uno de los primeros beneficiarios del innovador chip desarrollado por Neuralink, ha compartido su experiencia en una entrevista con el medio británico BBC.

Noland Arbaugh fue el primer
Noland Arbaugh fue el primer paciente de Neuralink. (Rebecca Noble/The New York Times)

Su vida ha cambiado radicalmente desde que se sometió a este procedimiento. “No sabía qué esperar. Parecía de ciencia ficción”, confiesa Arbaugh. Aunque al principio se sentía inseguro, pensó que si todo salía bien, podría ser de ayuda participando en el proyecto.

Por otro lado, también estaba consciente de que, si algo salía mal, al menos aprendería de la experiencia.

Antes del implante, Noland sufrió un grave accidente que le dejó secuelas tan severas que temió que jamás podría estudiar, trabajar o jugar nuevamente. “Tuve que dejar los videojuegos cuando quedé discapacitado.

Neuralink es una empresa de
Neuralink es una empresa de neurotecnología fundada en 2016 por Elon Musk y un grupo de científicos y expertos en tecnología. REUTERS/Dado Ruvic/Illustration/File Photo

Ahora les gano a mis amigos”, revela con una sonrisa, mostrando el impacto positivo que la tecnología ha tenido en su vida. El chip le ha permitido recuperar funciones que creía perdidas para siempre.

Sin embargo, a pesar de los avances, Arbaugh también admite que la experiencia no ha sido fácil. “No tienes control, no tienes privacidad y es difícil”, explica.

Al vivir con el dispositivo, ha tenido que aprender a confiar en los demás para gestionar aspectos de su vida cotidiana, ya que, en muchos sentidos, depende de las personas que manejan la tecnología y los sistemas asociados.

El proyecto del chip cerebral
El proyecto del chip cerebral tomó popularidad por Musk. REUTERS/Nathan Howard/File Photo

Aunque el proyecto ha estado rodeado de controversia, especialmente debido a la participación de Elon Musk, Arbaugh no considera que el chip sea “un dispositivo de Elon Musk”.

Más bien, lo ve como un avance de “los científicos y de la ciencia” en general, destacando la importancia del trabajo colectivo detrás de la tecnología.

Una de las experiencias más impactantes para Noland fue ver cómo sus neuronas se dispersaban en la pantalla durante el proceso.

Fue en ese momento cuando comprendió “por completo” que, con su mente, podría controlar un ordenador. Después de meses de adaptación, comenzó a utilizar esta capacidad para jugar al ajedrez y a los videojuegos, actividades que tanto había echado de menos.