El enigma sobre los asesinos y las sospechas sobre el encubrimiento: las preguntas abiertas del crimen de Candela Rodríguez
La niña de once años fue secuestrada a metros de su casa en Hurlingham el 22 de agosto de 2011 y apareció muerta nueve días más tarde dentro de una bolsa negra. El caso causó conmoción y estuvo salpicado de versiones que lo vinculaban al narcotráfico, a la corrupción policial y hasta a un ajuste de cuentas contra el padre, quien cumplía condena por piratería del asfalto. “El fiscal Tavolaro llegó a decirme que mi hija era una atorranta y que yo la prostituía”, denunció la madre, Carola Labrador