Es educadora canina, emigró a Madrid y explica cómo mantuvo su profesión en 7 máximas: “Hay que arremangarse y trabajar con humildad”
En 2022, Lucrecia Mangialavori se instaló en España con una convicción firme: seguir viviendo de lo que ama. Aunque tuvo altibajos, en tres años construyó una red de alumnos, encontró trabajos “de lo suyo” y hasta terminó cuidando a los perros de los Campeones del Mundo. Aquí comparte sus premisas para sostener una vocación lejos de casa