De lugar más densamente poblado del mundo a escenario apocalíptico: la “Isla del infierno” y su pasado de explotación y muerte
El 20 de abril de 1974, el último habitante de Hashima, un islote de apenas 6,5 kilómetros cuadrados, lo abandonó para siempre, con lo que puso fin a casi un siglo durante el cual se explotó hasta agotar su mina de carbón y fue campo de trabajos forzados para prisioneros de guerra. Despoblada desde hace casi medio siglo, se convirtió en un escenario postapocalíptico en el que la naturaleza devora día tras días sus enormes estructuras de hormigón