El último harakiri: el célebre escritor japonés que se suicidó en un ritual sangriento para llamar la atención de la sociedad
Yukio Mishima se mató en el despacho de un importante general nipón. Quería rescatar el honor del Imperio luego de la derrota de la Segunda Guerra Mundial. El pedido póstumo y las palabras de su madre

Emilio Salgari, un trotamundos de la fantasía que casi nunca salía de casa y terminó suicidándose en medio de la pobreza
Historias de piratas, navegantes y soldados que emprende enigmáticos viajes por parajes exóticos marcaron generaciones de lectores interesados por ver más del mundo gracias a la imaginación de este talentoso italiano
