Abrazó su identidad indígena, encontró pares para tejer comunidad y trabaja reivindicando la cultura de los pueblos originarios
Aunque su madre nunca le ocultó de dónde venía, toda la vida había intentado que dejara a un lado sus raíces indias y se asimilara a la cultura urbana, bonaerense, para que no fuera discriminada y pudiera progresar. Pero Adriana Gerez no pudo ignorar lo que latía bajo su piel y buscó sitios de pertenencia en los que se sintiera ella misma. Cuando los encontró no hubo vuelta atrás