Denunció que le robaron $300 mil que eran de su papá y las cámaras de seguridad lo delataron

Dicen que las mentiras tienen patas cortas, y en este caso, las tenían. Es que un joven de 23 años denunció que le motochorros le habían robado 300 mil pesos, aunque todo era mentira y terminó preso.

La denuncia por robo a mano armada movilizó a la Policía de Misiones en la mañana de este miércoles en la ciudad de Posadas, pero terminó con la detención del denunciante, que simuló el hecho para encubrir una pérdida de dinero en el casino.

El caso se resolvió en pocas horas, tras un análisis de cámaras de seguridad que desmintieron por completo su relato.

Todo comenzó alrededor de las 9, cuando el joven se presentó en la comisaría local e informó que había sido asaltado por dos hombres en moto en la calle General Paz, en pleno centro de Posadas.

Según su declaración, los supuestos asaltantes lo habían amenazado con un arma de fuego tipo revólver y le habían robado $300.000 pesos que, afirmó, pertenecían a su padre.

La denuncia activó de inmediato el protocolo policial. Personal de la División Investigaciones de Posadas comenzó a trabajar sobre el caso y solicitó el análisis de las imágenes captadas por el sistema de vigilancia del Centro Integral de Operaciones 911. Fue allí donde el relato del joven comenzó a desmoronarse.

Las grabaciones mostraban que, cerca de las 8, el denunciante había salido de una entidad bancaria tras realizar una extracción. En lugar de dirigirse a su domicilio o a alguna otra gestión, las cámaras lo captaron ingresando a una casa de juegos de azar ubicada sobre la calle San Lorenzo, a escasos metros del centro comercial posadeño.

Más tarde, ya sin el dinero en su poder, se lo observó caminando hacia la calle General Paz, donde —según registraron las cámaras— arrojó intencionalmente su moto al suelo, sin que nadie lo persiguiera ni lo interceptara. No había rastros de terceros, ni testigos presenciales que avalaran su versión del asalto.

Con esa secuencia confirmada, y sin pruebas que sostuvieran la hipótesis de un robo, los investigadores confrontaron al joven con las evidencias recolectadas.

La versión del “asalto tipo motochorro” resultó completamente fabricada. Lo que en realidad había ocurrido, según la reconstrucción, fue que el denunciante perdió los $300.000 en apuestas y, ante la imposibilidad de justificarlo frente a su padre, ideó un falso robo para encubrir su accionar.

Una vez desmentida su historia, el joven fue detenido y quedó a disposición del Magistrado interviniente, acusado por el delito de falsa denuncia, una figura tipificada en el Código Penal argentino que sanciona a quien simula un hecho delictivo con el fin de inducir a error a la autoridad pública.

El“juego patológico”se encuentra dentro de los trastornos adictivos comportamentales. En los últimos años, se ha observado un incremento en la prevalencia de la adicción al juego. Este fenómeno puede entenderse en parte por la mayor exposición a estímulos relacionados con el juego, impulsada por la creciente promoción de las plataformas de apuestas en línea y los juegos de azar.

Canales de atención ante casos de juego patológico:

• 108 (Línea de asistencia gratuita del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires)
• Preguntar en BOTI sobre ludopatía.
• 0800-666-6006 (Línea de orientación por juego problemático de LOTBA)