Condenaron a un soldadito narco por amenazar a un intendente y a una fiscal en Santa Fe

Gabriel Agustín Díaz, de 25 años recibió una pena de seis años de prisión. Los hechos ocurrieron en la localidad de Venado Tuerto

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Condenaron en la localidad santafesina
Condenaron en la localidad santafesina de Venado Tuerto a un soldadito narco a la pena de 6 años de prisión

La Justicia de Santa Fe condenó a un “soldadito” narco —como se conoce al último eslabón de las organizaciones criminales— por amenazar al intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarell, a un ex senador y una fiscal. Además, se le atribuye haber participado de una balacera, cometida en 2023.

Se trata de Gabriel Agustín Díaz, un joven de 25 años, que deberá cumplir una pena de 6 años de prisión.

El juez Mauricio Clavero dictó la sentencia en un juicio abreviado celebrado en los tribunales de Venado Tuerto, con el fiscal Damián Cassullo representando al Ministerio Público de la Acusación.

El violento ataque ocurrió el 8 de enero de 2023, a las 4 de la mañana, cuando Díaz, junto a otros dos individuos, ejecutó un atentado contra una vivienda disparando al menos diez veces desde una motocicleta antes de huir del lugar, de acuerdo con la información a la que pudo acceder el medio local Rosario3.

El fiscal Cassullo explicó que este ataque era una muestra de las amenazas que Díaz continuó realizando. Cuatro días antes, el 4 de enero, el joven había enviado mensajes a un vecino de Venado Tuerto en los que apuntaba también contra el intendente Chiarella, el ex senador Lisandro Enrico, y a la fiscal Susana Pepino. “En una de esas comunicaciones insinuó que también iba a hacerles daño a los tres funcionarios del sur provincial”, mencionó Cassullo. Estos mensajes sembraron temor en el receptor, a quien Díaz también le envió fotos y videos de su casa como un claro gesto intimidatorio.

Según detalló el fiscal, Díaz atribuía su accionar a “la banda de los Novelino”, liderada por Mauro Nahuel Novelino, buscando crear confusión con respecto a la autoría real. Sin embargo, esta pista era falsa, ya que el ahora condenado operaba realmente bajo el mando de Matías Ernesto “Bicho” Álvarez, un notorio criminal que ya cumplía con una prisión perpetua por sus propios delitos.

El vínculo entre Díaz y estos grupos delictivos quedó al descubierto cuando el intendente Chiarella denunció las amenazas que recibía, iniciando así una investigación. Una de las pruebas decisivas para condenarlo fue un exhaustivo cotejo de voz que mostró un 77% de compatibilidad entre los audios recuperados y otras muestras vocales obtenidas en audiencias judiciales. Esto, junto al testimonio de las víctimas y otros elementos de prueba, consolidaron su culpabilidad.

Finalmente, el joven reconoció su responsabilidad penal. Admitió ser autor de varios cargos, entre ellos amenazas coactivas agravadas, amenazas simples, y portación indebida de arma de fuego.

En este contexto, el fiscal Cassullo detalló: “Díaz no solo admitió su participación en la balacera, sino que también aceptó plenamente las consecuencias de sus amenazas”. La combinación de estas acciones y su aceptación llevó al tribunal a imponer una pena de seis años de prisión.

El condenador tuvo participación en
El condenador tuvo participación en una balacera y en una serie de mensajes intimidatorios enviados a personas

Condenaron al cómplice de un sicario que mató por error en Rosario

En los últimos días, Gerson Jair Churquina fue condenado a 20 años de prisión debido a su implicación en un crimen ocurrido en 2022, donde un joven fue asesinado debido a un error. La víctima fue identificada como Kevin Leguizamón. Según declaró la Agencia Noticias Argentinas, los jueces Silvana Lamas González, Florencio Malaponte y Facundo Becerra determinaron la culpabilidad de Churquina en un juicio oral y público, considerándolo una pieza clave en el ataque.

El asesinato tuvo lugar en la calle Montero al 6400 justo cuando Leguizamón regresaba a casa después de recoger a la hija de su pareja del jardín de infantes. Mientras caminaba junto a la niña de 4 años, fue emboscado por un sicario que, desde un Peugeot 208 negro conducido por Churquina, abrió fuego y terminó con su vida tras disparar siete veces. De acuerdo con el fiscal Adrián Spelta, los agresores siguieron a Leguizamón desde temprano, deambulando por el barrio mientras esperaban el momento adecuado para llevar a cabo el atentado.