Violento ataque en Once: un hombre entró a un local y disparó contra una empleada sin mediar palabra

Un hecho violento y de características inusuales sacudió el mediodía del lunes en pleno barrio de Once, cuando un hombre armado irrumpió en la estética “León”, ubicada en Avenida Rivadavia 2602, y sin decir una sola palabra disparó directamente contra una de las empleadas del local. El disparo le provocó una herida en el brazo. Luego, el agresor escapó rápidamente en una motocicleta.

De acuerdo con fuentes policiales consultadas, el atacante actuó solo y con un objetivo claro: entró, extrajo un arma de fuego y disparó a quemarropa. No hubo forcejeo, ni amenazas previas. Simplemente, disparó y se fue.

Los efectivos de la Policía de la Ciudad, junto con el SAME, asistieron a la mujer herida en el lugar. Según confirmaron, su vida no corre peligro.

El caso despertó inquietud por su modalidad. Tal como explicaron fuentes del caso a Infobae, no se trató de un intento de robo, lo que llevó a los investigadores a descartar esta hipótesis. En este contexto, las autoridades investigan las motivaciones detrás del hecho.

La Fiscalía interviniente, junto con personal policial, trabaja en la revisión de las cámaras de seguridad de la zona. El objetivo es identificar al agresor y trazar la ruta de escape. Mientras tanto, no se han reportado personas detenidas.

Los investigadores continúan recolectando testimonios y material fílmico para avanzar con la causa. Se espera que en las próximas horas se puedan obtener más datos que ayuden a reconstruir el recorrido del agresor y a esclarecer el motivo de su accionar.

El barrio porteño de Palermo fue escenario el miércoles pasado de un ataque a tiros que terminó con un hombre baleado. Según pudo saber Infobae, los investigadores creen que la agresión fue la continuidad de una discusión previa dentro de un boliche. Lo concreto es que, por el hecho, hay cuatro detenidos por tentativa de homicidio. Este viernes todos fueron indagados.

Todo comenzó en la puerta de un local nocturno de la avenida Dorrego al 1700. La víctima recibió al menos dos disparos, uno en el brazo izquierdo y otro en la pelvis, y sigue internada con un estado de salud comprometido.

A través del análisis de cámaras de seguridad, los investigadores determinaron que cuatro personas —tres hombres y una mujer— estaban dentro de un Volkswagen Vento blanco cuando interceptaron al grupo de la víctima, que salía de la discoteca.

El auto iba acompañado por un segundo vehículo, un Volkswagen Fox del mismo color, que también se alejó de la escena rápidamente tras el ataque. Ambos coches fueron registrados por una cámara de la Ciudad a las 7.12 de la mañana sobre la avenida.

De acuerdo con los testimonios recogidos en la causa, desde el grupo de los imputados le dijeron a la víctima: “Vení que vamos a hablar”. La respuesta habría sido que la pelea ya estaba terminada. Fue entonces cuando se produjo la balacera.

Fue el conductor del vehículo quien sacó un arma desde el interior del coche y disparó a corta distancia. En ese momento estaban todos los imputados dentro del vehículo. Así se desprende de la reconstrucción inicial que hicieron los investigadores.

El disparo fue sorpresivo. “No mediaron más palabras”, resumió una voz cercana al expediente. Según se indicó, los cuatro ocupantes del Vento fueron imputados porque, en principio, se considera que todos tuvieron algún grado de participación en el hecho.

El caso sigue abierto. Los investigadores tratan de avanzar con otras medidas y peritajes para determinar los detalles sobre lo sucedido. Hasta el momento, el arma utilizada en el ataque no fue hallada.

Sobre la víctima, solo se confirmó que tiene 35 años, que recibió al menos dos disparos y que permanece internado en el Hospital Fernández. Los médicos indicaron que su estado sigue siendo grave.