
Katherine Johnson, brillante matemática de la NASA, decisiva en la llegada del hombre a la Luna, quien trabajó en las primeras misiones espaciales de la NASA y cuya vida fue retratada en la película “Talentos ocultos”, murió este lunes a los 101 años, según informó la agencia espacial en un comunicado.
Los cálculos de Johnson ayudaron en 1969 a poner al primer hombre en la Luna, pero fue poco conocida hasta que la película nominada al Oscar en 2017 contó las historias de tres mujeres negras que trabajaban en la NASA.
"Ella fue una heroína americana y su legado pionero nunca será olvidado", afirmó el administrador de la NASA, Jim Bridenstine, que también recordó "su coraje y los hitos" que la agencia no habría podido alcanzar sin ella.
Johnson y una colega fueron las primeras en calcular los parámetros del vuelo suborbital de 1961 del astronauta Alan Shepard, el primer estadounidense que llegó al espacio.

Gracias a su talento para las matemáticas, determinó después la trayectoria del vuelo del Apolo 11, que llevó a Neil Armstrong y Buzz Aldrin a la Luna en julio de 1969.
El expresidente de Estados Unidos Barack Obama le entregó en 2015 la Medalla Presidencial de la Libertad, el más alto honor a un civil del país.
Dos años más tarde, Johnson, que entonces tenía 98 años, asistió a la ceremonia del Oscar de 2017 cuando la película "Talentos ocultos" fue nominada, y recibió una ovación al subir al escenario.

“Johnson ayudó a nuestra nación a ampliar las fronteras del espacio, incluso cuando hizo grandes progresos que también abrieron puertas para las mujeres y la gente de color”, sostuvo Bridenstine en una declaración.
En un tuit publicado este lunes, la agencia espacial dijo que celebraba los 101 años de vida y legado de excelencia de Johnson durante los cuales derrumbó barreras sociales y raciales.

La matemática de la NASA, pionera en la búsqueda de la igualdad racial, contribuyó a los primeros triunfos de los Estados Unidos en los vuelos espaciales humanos. Fue campeona de la educación de las disciplinas académicas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. “Katherine G. Johnson se encuentra entre las figuras más inspiradoras de la NASA”, comunicó la agencia.
Nacida el 26 de agosto de 1918 en White Sulphur Springs, Virginia Occidental, Johnson se graduó de West Virginia State College con los más altos honores en 1937. Después de asistir a la escuela de posgrado y trabajar como maestra de escuela pública, fue contratada en 1953 por lo que hoy es conocido como el Centro de Investigación Langley de la NASA en Hampton, Virginia, pero luego fue bautizado como el Laboratorio Aeronáutico Langley Memorial. Se retiró del centro en 1986. Los logros de Johnson en Langley se destacaron en el libro más vendido “Talentos ocultos” y la exitosa película del mismo nombre.
(*) Con información de Reuters y AP
SEGUÍ LEYENDO:
Últimas Noticias
Por qué una galaxia con “orejas de conejo” a 300 millones de años luz intriga a los astrónomos
La formación estelar en forma espiral deformada captada por los telescopios ALMA y Hubble reabre preguntas sobre las fuerzas extremas en el espacio profundo

Qué es la amusia, la condición que impide a niños y adultos disfrutar de la música
Para quienes transitan esta afección, las canciones pueden ser irritantes o incluso dolorosas. Cuáles son los síntomas y cómo se diagnostica

Por qué es más peligroso tomar azúcar que comerla, según nuevos estudios
Investigaciones recientes revelaron que las bebidas como gaseosas, jugos y energizantes, tienen un impacto más perjudicial para el metabolismo que el dulce en alimentos sólidos. La ingesta aumenta el riesgo de diabetes tipo 2, advierten expertos

Cuáles son las consecuencias graves que puede generar la mononucleosis y a qué órganos afecta
El virus se adquiere principalmente en la niñez y la adolescencia a través del intercambio de saliva. Qué se descubrió sobre las variantes de Sudamérica y cuál es la relación con la esclerosis múltiple

Científicos estudian cómo los gusanos intestinales podrían ayudar a combatir la obesidad y la diabetes
Investigaciones recientes sugieren que dichos parásitos tienen el poder de mejorar el metabolismo, ofreciendo nuevas oportunidades para combatir este tipo de enfermedades
