El presidente del bloque UCR del Senado, Eduardo Vischi, aseguró que Cristina Kirchner “no está proscripta, está condenada por los delitos que cometió”, consideró que al peronismo “lo que más le gusta es romper el equilibrio fiscal y darle plata al que sea”, y se refirió a las próximas elecciones a gobernador de Corrientes.
En una entrevista con Infobae, el legislador se refirió a los proyectos de aumento a los jubilados y el referido a las políticas de discapacidad que aprobó Diputados y que deberá ser tratado por la Cámara alta. Son iniciativas resistidas por el gobierno de Javier Milei, debido al fuerte impacto en las cuentas nacionales.
También, habló de la discusión sobre la ampliación de la Corte Suprema que se discute en el Senado y consideró que, antes de debatir un cambio en la composición, el oficialismo y la oposición deberían abocarse a completar las dos vacantes que existen en el más alto tribunal del país.
La cuestión de Cristina Kirchner fue uno de los temas principales de la entrevista, sobre todo por la movilización del peronismo en contra del fallo que la condenó a seis años de prisión e inhabilitación perpetua. “Este fallo puede recuperar la confianza perdida de la sociedad en las instituciones“, afirmó.
Por último, habló del proceso electoral en marcha en Corrientes el domingo 31 de agosto, cuando la provincia elegirá gobernador, y confirmó su intención de competir. El senador se mostró a favor de un acuerdo entre la UCR, el partido del actual mandatario Gustavo Valdés, y La Libertad Avanza, con el modelo de Chaco, que permitió una victoria al oficialismo.
La entrevista al senador Eduardo Vischi
– Tenemos muchos temas para hablar. La situación de Cristina Kirchner, el Senado, el radicalismo, la situación política de su provincia. Pero quiero arrancar por lo que está ocurriendo en estos días con la ex presidenta, su condena y el arresto domiciliario. Le pido una reflexión sobre el tema.
- Es un tema que evidentemente causó un impacto importante. Cuando uno ve los medios de comunicación, está concentrado todo en este tema. Hay una gran desilusión en la Argentina sobre la política y los políticos. El shock que hubo cuando se rechazó Ficha Limpia profundizó la desilusión y puede ser que eso haya tenido algún impacto en que en todas las provincias haya votado poco más del 50%, incluso en la ciudad de Buenos Aires. Pero tengo la sensación de que la gente, con este fallo, puede recuperar algo de esa confianza perdida.
De alguna forma hay que entender que todos somos iguales ante la ley y el que es corrupto tiene que ser castigado y no porque tenga votos pueda salvar la situación, porque de lo contrario se justifica lo que decíamos, donde al final la política termina siendo el resguardo de los corruptos o de los delincuentes, que buscan ser candidatos para tener fueros, para no ir preso.
Esta puede ser realmente una bisagra, dejando para atrás un mensaje, pero mucho más hacia adelante: los políticos tenemos que entender que aquel que comete delitos en algún momento se lo va a condenar, se lo va a castigar. Igual, nos gustaría que la actuación de la Justicia sea mucho más rápida.

– El peronismo fue muy confrontativo con la decisión de la Justicia. Todos los sectores alineados con el kirchnerismo criticaron la actuación de los jueces y hablan de proscripción y de una sentencia injusta. ¿Para usted, Cristina Kirchner está proscrita?
- El peronismo, el justicialismo, el kirchnerismo tiene que dejar el relato y hacerse responsable de sus acciones. Déjeme sospechar de que esto termina siendo una nueva forma de instalarse como centralidad política. Hay muchos que hasta le conviene que Cristina no esté más, porque de alguna forma también favorece una renovación en el peronismo.
Correr a la figura política que más problemas le trae al peronismo, que es Cristina. Es como esos cuadros enormes, que ya no se sabe dónde poner en un departamento. Al peronismo le viene bien que la saquen y que esto inicie un proceso de renovación. Hoy hay más una épica de la resistencia, que genera un relato que ya todos lo vivimos y sabemos que está acabado.

– ¿Para usted Cristina está proscripta?
- No, está condenada por los delitos que cometió. Tuvo todo su proceso judicial correspondiente. Sea como sea, la Justicia tomó la decisión y no hay que meterse en las decisiones de la Justicia. Para mí no es una proscripción.
Sabiendo el relato que iban a armar en función de eso, ella adelantó una candidatura para justamente colisionar con la sentencia. La condena ofrece un motivo para unir y movilizar, porque más allá del relato, no tienen nada para contar, en una Argentina que está fundida por culpa de muchas de sus acciones.
– ¿Esto que pasó con la ex expresidenta puede impactar también en el Congreso, en el Senado? ¿El kirchnerismo y la oposición en general puede adoptar una posición más agresiva con el Gobierno?
- Si el kirchnerismo -o el peronismo que acompaña- no es más confrontativo, es porque no puede. Como ha perdido la brújula y el acompañamiento de la gente, si no hizo más, fue porque no pudo. En todo momento que puede, el peronismo intenta romper el equilibrio fiscal, que es lo que más le gusta. Busca cualquier acción populista para darle plata al que sea, con tal de que eso genere quedarse con el mensaje, con el relato, y hacerle al Gobierno pagar un costo de equilibrio fiscal, con el objetivo de romper las finanzas públicas.
– El Senado debe discutir el proyecto de jubilaciones y el referido a discapacidad, iniciativas que el Gobierno advirtió que afectan el superávit. El kirchnerismo quiere tratarlo de manera rápida. ¿Como presidente del bloque UCR, qué posición va a tener el radicalismo?
- No lo hemos debatido internamente todavía. Hace un año pasó exactamente lo mismo. Lo que no queremos es que haya un veto y que esto otra vez sea una gran desilusión. Queremos analizar en profundidad cómo son los números, por qué el Gobierno dice que esto le afecta, porque tampoco tenemos Presupuesto, que es la hoja de ruta de cómo se gasta y en qué se está gastando. Queremos entender por qué estas medidas afectarían el equilibrio fiscal. Sé que el debate en comisión va a ser muy importante y vamos a darle el tiempo al Gobierno para que nos explique cuál es la situación.
¿Ahora quién no quiere dar aumentos? Sabemos la posición en la que están muchos jubilados, pero también tenemos que ser responsables y mirar bien hasta dónde podemos acompañar. Y en ese sentido vamos a trabajar con mucha responsabilidad, que es realmente nuestro papel.
– Pensé que me iba a decir “no lo vamos a aprobar”. ¿Cree que hay que discutirlo?
- Hay que discutirlo, como todo lo que llega al Senado. Hay que discutirlo, mirarlo, estudiarlo.

– Lo digo porque Javier Milei fue muy claro. Dijo que esos proyectos tienen un costo fiscal del orden de dos puntos de del PBI. ¿Habilitar esa discusión no es ponerse en contra de lo que está planteando el Presidente?
– No tengo por qué estar a favor o en contra del Presidente, lo que tengo que hacer como senador es analizar la situación. Viene un proyecto de ley que tiene media sanción y debemos estudiar la situación y mirar qué es lo que corresponde y exigir al Ejecutivo que nos diga cuáles son los verdaderos números. Sin Presupuesto, no sabemos de dónde se puede sacar o poner recursos y cuáles son las prioridades que puede tener un gobierno. Para eso aprueba el Congreso el Presupuesto, para saber cuál es la dirección que toma un Gobierno a través de los gastos, porque los gastos son los que representan la verdadera política pública.
– ¿Entonces qué le piden al Gobierno?
- Que mande el Presupuesto cuando sea, no importa si es fuera de término, pero que lo envíe y, si no, que vengan a explicar.
– Hablo sobre esta discusión en particular. Jubilados y discapacidad.
- Que vengan a explicar de qué modo afecta y cuáles son las consecuencias. Porque cuando hablamos solo de equilibrio fiscal, lo único que no quiere el Gobierno es gastar. ¿Ahora cuáles son las consecuencias si gastás más de lo que te entra, y cómo impactaría en algo tan valorado como es la estabilidad?
– Un tema que cada tanto tiene flujo y reflujo es el tema de la Corte. Si hay que ampliarla, hay que dejarla como está, si tienen que ser siete, nueve o 25 integrantes. El Senado ya está en un proceso de discusión sobre ese tema. ¿Cuál es su posición?
- La institución Justicia está gravemente herida, muy debilitada, por una vacancia muy importante: casi un tercio de la justicia federal y nacional y casi el 40% de la Corte. Tenemos de cinco miembros, hay solo tres. Si hablamos solamente de la Corte, es un tema realmente muy delicado, porque es un órgano colegiado que está en manos de tres. Quiere decir que estamos concentrando el poder en tres y eso afecta muchísimo a lo que necesitamos como un organismo de discusión y que genera impacto sus decisiones y lo estamos viendo.
Lo más importante es cubrir con las dos vacantes lo antes posible. El Gobierno salió muy herido de lo que pasó este año con las postulaciones, pero también hicieron mal las cosas y se lo marcamos. Diría que lo antes posible debería tratarse cómo se cubren no solamente los dos miembros de la Corte, sino también el Defensor y demás.

– El Procurador General.
- El Procurador también. Si queremos discutir también el aumento de los miembros de la Corte, lo primero que debe definirse es ¿para qué y por qué? Si es solamente para que cada partido tenga un representante en la Corte, me parece que no entendimos lo que la sociedad está pidiendo respecto a la recuperación de la confianza en las instituciones. Primero, recuperemos lo que tenemos y después, si quieren, discutimos el aumento de integrantes.
– Hoy, el fiel de la balanza lo tiene el kirchnerismo, porque con su número puede lograr una aprobación o puede impedirlo, como ya lo demostró.
- Nadie por sí solo puede tomar una decisión.
– Pero el kirchnerismo sí puede vetar, puede bloquear. Eso impone una negociación.
- El kirchnerismo solo tampoco podría. Obviamente que tiene que haber un acuerdo y una negociación, pero tiene que ser respecto a la idoneidad, no a los nombres propios, porque sino lo que estamos pensando es cómo pongo mi juez en la Corte, no qué perfil queremos y cuáles son las posibles personas que, para mí -se lo he dicho al Gobierno en alguna oportunidad- tienen que ser dos mujeres. El Gobierno tendría que tener un acto realmente de confianza en proponer dos mujeres.
– Le repito la pregunta porque no fui claro. ¿La Corte tiene que quedar como está y tiene que completarse? ¿Esa es su posición?
- Para mí, hoy es lo mejor que podemos hacer.
– ¿Y la discusión sobre una ampliación?
- Abramos el debate, pero no es un tema que hoy tiene que imposibilitar que cumplamos con lo que tenemos que hacer.
– El Gobierno está en riesgo en el Congreso de sufrir derrotas legislativas. ¿Qué piensa?
- Sí, por supuesto, porque siempre ha tenido un número muy inferior de mayorías. Tiene muy pocos fieles-fieles. Estamos viviendo un Senado, un Congreso donde algunos a ciegas aprueban todo lo que manda el Gobierno. Y por el otro lado, los que quieren recuperar el populismo y la narrativa del pasado. Por eso, el rol del radicalismo en este tiempo es muy importante, porque la gente todavía está en una situación en la que ve la antinomia, la grieta de dos cosas que tampoco le cierran. Le gusta el cambio, necesita el cambio y apoya el cambio, porque no quiere volver para atrás, pero tampoco está muy seguro de lo que el Gobierno está llevando adelante, muchas veces sin ninguna empatía.
– Mencionó el radicalismo. ¿Cómo está el partido?
- El radicalismo está muy debilitado en términos federales, con muchos líderes provinciales con fuerza, gobernadores que además son ejemplo. Cualquier gobernador radical puede mostrar con creces lo bien que está llevando adelante la administración, que tiene equilibrio fiscal y que además hace obras, se dedica a la salud pública, la educación y demás. Tenemos modelos de gestión, buenos gobernantes radicales para mostrar en la Argentina.
El problema es que no tenemos líderes federales, no hay posibilidad de encontrar un líder. El actual presidente terminó teniendo una posición que era la más convincente para su propuesta local, que también le salió mal, otros que fueron invitados a participar al radicalismo y terminaron generando su propio partido, como Facundo Manes. Esas cosas van hiriendo al radicalismo.
Estoy convencido de que con lo que tenemos podemos recuperarnos, porque además es una etapa que va a necesitar del radicalismo, como ya se necesitó en otro momento de la historia. Cuando nace el radicalismo, lo hace saliendo de la generación del 80: ahí apareció un Hipólito Yrigoyen proponiendo austeridad, transparencia y ser ejecutivos y eficientes.
– El radicalismo atraviesa un estadio de mucha discusión interna, con sectores muy alineados con el Gobierno, sectores que están muy en contra, y sectores que están en el medio. ¿Usted en qué lugar está?
- No sé si lo veo así.
– Están los radicales con peluca, por ejemplo...
- Lo que digo es que casi no hay discusión y ese es un problema del radicalismo nacional. ¿Dónde está la discusión? ¿Dónde se ve? Cada uno está tratando de ver cómo se posiciona. Sí, es cierto que hay algunos radicales que directamente no quieren saber absolutamente nada y no aceptan nada de este gobierno, es cierto. Y también “radicales con peluca”, que todo lo que el Gobierno diga lo aceptan.
Pero también estamos los que entendemos que hay radicales que gobiernan y tienen responsabilidades, y yo me paro ahí, en cómo se mantiene una relación institucional con el Gobierno. En las cosas en las que no estamos de acuerdo, saber explicarlas con firmeza y responsabilidad, y las cosas en las que estamos de acuerdo, acompañar, incluso si hay posibilidades de hacer algunos cambios. Lo hicimos con la Ley Bases: la mayoría de los cambios, lo hicimos los radicales en el Senado y después se aprobó en Diputados. Cuando se puede se intenta aportar para mejorar.
– ¿El Gobierno está haciendo las cosas bien, mal o regular?
- En algunas cosas bien, en otras cosas no me parece muy bien.
– A ver, le pido detalles...
- Me parece muy bien plantarse en el gasto público, algo que antes era insospechado. Que un Gobierno diga “no quiero gastar” y que todo el mundo aplauda. Antes era “¡qué gobierno desalmado, que no se hace cargo”. Eso logra el equilibrio fiscal y ofrece una estabilidad absolutamente necesaria para tener un panorama de la realidad de la economía argentina.
Lo que no estoy viendo es cuál es la salida o cuál va a ser la mirada para que podamos salir de esta situación de estancamiento, para que empiece a crecer la Argentina. Cuál va a ser el modelo, dónde vamos a poder ecualizar la economía para que no nos transformemos en otro menemismo, donde era más barato importar y destruir fuentes de trabajo. Cómo hacemos para sostener esa Argentina que todavía tiene la posibilidad de producir. Tampoco me gusta el ataque a las instituciones y el tema de la transparencia. Esto de no mandar el Presupuesto y no poder controlar, al punto que la Auditoría todavía no podemos integrarla.
Lo dije con el tema de los decretos de nominación de los dos miembros de la Corte, planteando que iba a afectar que no haya una buena institucionalidad, porque nadie va a invertir en la Argentina si no hay instituciones fuertes. Creo que si no hay inversiones, se va a retrasar el crecimiento.
Ahí el Gobierno tiene una falencia. Podemos poner el radicalismo a disposición, porque tenemos mucha cultura en trabajar en las instituciones y fortalecerlas, para que eso también sirva como armado en lo económico. Si el Gobierno piensa solamente en la economía, necesita instituciones fuertes, sino nadie va a invertir ni va a arriesgar en este país.
Las elecciones en Corrientes
– Ya está lanzada la carrera por la Gobernación en Corrientes. Todavía no está definido quiénes van a ser los candidatos del oficialismo, más allá de que Gustavo Valdés convocó a elecciones. ¿Cómo está viendo el panorama y cuál va a ser su rol?
- Al gobierno de Gustavo Valdés la gente lo valora muchísimo y eso indica que además la Alianza Vamos Corrientes, que es la que sostiene el radicalismo y otros actores, es una alianza de la más fuerte que existe. Vamos a resolver nuestra Convención para darle un marco de alianza final. Hay una posibilidad de diálogo con La Libertad Avanza para hacer algo parecido a lo del Chaco y esa posibilidad, si se da, realmente encaminaría muy bien electoralmente. Estamos en etapa de alianzas y después de etapa de nombres, al 12 de julio, que sería la última fecha.
– ¿Hay margen para que haya un acuerdo electoral con el Gobierno y aplicar el modelo de Chaco? Porque desde Casa Rosada llegan señales contradictorias o confusas.
– El debate que tiene el Gobierno, por lo que uno escucha, es que buscan saber “cuánto tengo”, en esta etapa de crear su propio partido. También puede pasar que en algunos lugares, como en Chaco, diga “bueno, tal vez acá no me conviene tanto saber cuánto tengo, sino mostrar una victoria” con un gobierno provincial que ha sido aliado, porque todo lo que acompañé en el Senado tiene que ver con una directiva del Gobierno de la Provincia, en este caso, de Gustavo Valdés.
Sí, hay formas de entendernos y hay tal vez coincidencia en algunos aspectos. Eso va a depender de que el Gobierno también termine de decidir si quiere ver cuánto vale en Corrientes o si realmente quiere tener una victoria con el gobierno provincial.
– Trascendió que la charla que tuvo Gustavo Valdés con Karina Milei no terminó muy bien. ¿Hay buena sintonía entre el gobierno de Corrientes y la Casa Rosada?
- No tengo conocimiento de la intimidad de esa reunión. Creo que había sido una reunión tranquila, sin conclusiones, porque la pasaron para más adelante. Las conclusiones de esas conversaciones calculo que vendrán esta semana.
– Si usted tuviera que decidir, ¿firmaría un acuerdo con La Libertad Avanza, como en Chaco?
- Sí, creo que puede ser muy positivo.
– ¿Y usted va a ser candidato?
- Vengo trabajando, para eso vengo. Vengo buscando adhesiones.
– Porque hay alguna alternativa de que sea el hermano de Gustavo Valdés?
- Juan Pablo Valdés también tiene sus mediciones y él representa mucho al gobernador, pero también tengo una trayectoria para ofrecer. Tratamos de ofrecer nuestras ideas y nuestra trayectoria y esta experiencia para llevar el proyecto para adelante.
– En los últimos días, Corrientes tuvo la singularidad de que estuvo Cristina Kirchner en la provincia, en Paso de los Libres, su ciudad, apoyando a Martín Ascúa, que es el candidato del kirchnerismo. ¿Qué piensa de eso?
- Me duele que haya ido a mi ciudad, porque goberné ocho años Paso de los Libres. Que se pinte muy peronista no me resulta muy agradable. Pero Cristina Kirchner es una figura pública y está bien. Sé por muchos libreños que la mayoría de los que participaron vinieron de afuera, no de Paso de los Libres. Hubo muchos colectivos de todo el país y llenaron el lugar para ese acto, que no solamente era un lanzamiento del candidato a gobernador, sino también una puesta en escena de lo que iba a pasar después, porque de ahí surgió mucha narrativa de lo que fue su defensa.

– La del final. ¿Cómo ve al presidente y qué piensa de su gobierno y de su acción política?
- Milei es una persona muy determinada. Se pone algo en la cabeza y va para adelante, sin importar las consecuencias o los riesgos que enfrenta. Al ser una persona nueva y disruptiva en la política, no tiene mochila, no tiene que dar explicaciones a nadie. Guste o no, las cosas que él resuelva las va ejecutando.
En muchos aspectos veo que esas decisiones pueden a veces hacer flaquear al Gobierno, porque toman medidas muy drásticas, que en algunos casos había que tomarlas, pero en otros casos pueden interpretarse como con falta de empatía. Ahí es donde, no sé cómo, el Gobierno va a tener que resolver cómo hace para mirar también para que entren todos los argentinos dentro de sus decisiones.
Últimas Noticias
El Gobierno respaldó la ofensiva contra Irán y condenó las amenazas a Rafael Grossi
Funcionarios libertarios expresaron su apoyo a la ofensiva militar sobre instalaciones nucleares iraníes, reafirmando su alineamiento con Washington y Tel Aviv. Los mensajes compartidos por el presidente Javier Milei

En Mendoza buscan aplicar sanciones económicas a funcionarios públicos que no cumplan con su deber
La Legislatura provincial se encamina a aprobar dos proyectos de ley que pretenden que estos empleados estatales asuman los costos de su propia ineficiencia

Santiago Cúneo rechazó el protagonismo de Máximo Kirchner en el PJ: “Es una mochila de plomo en el peronismo”
El dirigente criticó la falta de participación de las bases en la confección de listas y advirtió que la unidad solo será posible si se impulsa una competencia abierta. “Cristina tiene mi solidaridad, jamás tendrá mi obediencia”, añadió

Milei vuelve a la arena política de PBA después de semanas de bajo perfil por la condena a CFK y el extenso viaje al exterior
Está confirmado que el Presidente cerrará el proselitista Congreso de la Libertad el jueves, en La Plata, junto a los ministros, su hermana y los eventuales candidatos para las locales y nacionales. No está claro si irán los referentes de PRO

Un bloque aliado al Gobierno le pidió sesionar a Villarruel y le suma presión al clima del Senado
Provincias Unidas solicitó ir al recinto el miércoles o jueves de la semana próxima -el segundo día dará un informe de gestión Guillermo Francos- para que el pleno no quede atrapado entre las agendas libertaria y kirchnerista. Los motivos detrás de la jugada
