Juan Román Riquelme reconoce la trascendencia de Nolberto Solano obsequiándole su camiseta ‘10′ de Boca Juniors

Juan Román Riquelme ha realizado un gesto de grandeza hacia Nolberto Solano, peruano que marcó época en Boca Juniors a finales de la década de los noventa. El presidente ‘xeneize’ se reunió con el Maestrito, a horas del partido ante Alianza Lima por la llave de ida de la Fase 2 de la Copa Libertadores 2025, para sostener un emotivo encuentro y luego regalarle una camiseta ‘azul y oro’.

La gentil acción de JR10 emocionó a Nobby, quien empleó sus redes sociales para demostrar su enorme agradecimiento en dos historias. “Lindo encuentro con amigos, gracias Román. Gran reencuentro”, expresó Solano acompañando sus publicaciones con imágenes exhibiendo el dorsal ’10′ al lado de su entrañable amigo, con quien compartió vestuario por aquellas épocas.

Nolberto Solano dejó una huella en Boca Juniors durante su paso entre 1997 y 1998, convirtiéndose en uno de los peruanos más queridos en vestir la camiseta xeneize. Su talento como volante derecho, sumado a su precisión en los tiros libres, lo convirtieron en una pieza clave del equipo dirigido por Héctor Veira.

En Boca, compartió vestuario con figuras como Juan Román Riquelme y Claudio Caniggia, además de coincidir con Diego Maradona en el tramo final de la carrera del astro argentino. Su rendimiento en el fútbol argentino llamó la atención del Newcastle United, que lo fichó en 1998, marcando el inicio de su exitosa etapa en la Premier League.

A pesar de su breve estancia en Boca, Nobby Solano dejó una grata impresión en la hinchada y el fútbol sudamericano, consolidándose como uno de los jugadores peruanos más destacados de su generación.

Solano, quien empezó como lateral derecho para luego asentarse como volante central de excelsa pegada, disputó un total de 49 partidos con la indumentaria de Boca Juniors —todos en condición de titular— anotando un total de 7 goles. Los rivales que sufrieron de su depurada técnica fueron Independiente (Supercopa 1997), Rosario Central (Apertura 1997), Huracán (Apertura 1997), Unión de Santa Fe (Apertura 1997), Racing Club (Amistoso 1998), Newell’s Old Boys (Clausura 1998) y Deportivo Español (Clausura 1998).

Ñol abandonó el fútbol local luego de haber alcanzado su pico de rendimiento en Sporting Cristal. Aquel desplazamiento a La Bombonera le permitió crecer exponencialmente para así convertirse en un futbolista total. “Mi desafío siempre fue jugar fuera del Perú y gracias a Dios se dio la oportunidad”, reconoció en una entrevista con Infobae.

“Llegué a un Boca de mucha exigencia, donde encontrarme con mi ídolo máximo [Diego Maradona] fue una gran sorpresa, una coincidencia. Porque yo estaba muy joven y decía, ¿Diego seguirá jugando al fútbol? Y se dio todo redondo pese al corto tiempo. El fútbol de Argentina me terminó de madurar desde el aspecto competitivo y mental“, continuó Solano.

“Llegar a Boca Juniors fue muy impresionante, no lo creía. Nosotros todavía jugábamos Libertadores con Cristal, fui y firmé mi contrato, y Boca me dejó terminar la Copa. Te imaginas que después uno escuchaba los rumores de que Maradona regresaba otra vez al fútbol. Doble premio llegar a un club de los más grandes y con mi ídolo”, finalizó.