Detonan explosivos en cajero automático y roban cerca de S/3 000 a pocos metros de la plaza de armas de Chincha

Un grupo de delincuentes detonó explosivos caseros en un cajero automático del Banco Santander ubicado en el centro de Chincha, a escasos metros de la plaza de armas de la ciudad, durante la madrugada de este jueves. El ataque ocurrió alrededor de la una de la mañana y permitió a los responsables huir con un botín de aproximadamente S/3 000, según confirmó el coronel Daniel Elías Soto, jefe de la División Policial de Chincha. El hecho ha provocado inquietud entre los vecinos por la proximidad con el principal espacio público y la audacia del método empleado.

Según el reporte oficial, los delincuentes emplearon la denominada modalidad “cocodrilo”, que implica manipular el sistema eléctrico del cajero para provocar una explosión concentrada en la base del dispositivo. El coronel Daniel Elías Soto explicó que los asaltantes conectaron baterías a cables pelados para generar una descarga capaz de detonar el mecanismo y desprender la mampara de vidrio que protegía el terminal de la entidad. De esta manera, lograron acceder a la bandeja donde se encontraba el efectivo, compuesto por billetes de S/100 y S/20.

El impacto del estallido voló la parte frontal del cajero y esparció fragmentos de vidrio en la vereda, alterando la calma habitual de la zona, que se ubica a poca distancia de la Plaza de Armas de Chincha. Las autoridades indicaron que, pese al estruendo y la cercanía con áreas frecuentadas, no se registraron heridos.

Tras el ataque, la Policía Nacional del Perú (PNP) activó el denominado “Plan Cerco” para tratar de cerrar las vías de escape. Los agentes lograron localizar el primer vehículo utilizado por los responsables del robo, abandonado poco después del atraco. Según las declaraciones recogidas por la PNP, los asaltantes escaparon en otro automóvil al percatarse de la persecución policial.

Las cámaras de seguridad del sector están siendo analizadas para identificar los movimientos previos y posteriores al incidente, así como las características físicas de los delincuentes y las rutas utilizadas tras abandonar el automóvil inicial. El coronel Soto señaló que la investigación se centra en determinar el número exacto de implicados y en recuperar el dinero sustraído, aunque hasta ahora no se han producido detenciones.

La detonación y robo en el cajero se registran en un contexto de creciente inseguridad en Chincha. Solo un día antes, la ciudad fue escenario de otro hecho violento cuando un hombre fue atacado a disparos mientras circulaba cerca de la Plaza de Armas. La víctima, herida en su camioneta, falleció durante su traslado al hospital local debido a la gravedad de las lesiones. En el lugar del atentado, la PNP encontró al menos 15 casquillos de bala.

Vecinos y comerciantes del centro de Chincha han expresado preocupación por la seguidilla de delitos ocurridos en zonas de alta concurrencia. Tanto el ataque al cajero automático del Banco Santander como el asesinato del ciudadano en las inmediaciones de la Plaza de Armas han puesto en evidencia la vulnerabilidad de áreas clave de la ciudad.

Funcionarios del Banco Santander no han dado declaraciones públicas respecto al monto exacto del dinero robado ni sobre el estado de su infraestructura tras el ataque. Mientras tanto, la Policía Nacional continúa con el análisis de las imágenes de seguridad y la búsqueda de los responsables, con énfasis en el uso de modalidades delictivas que emplean explosivos de fabricación casera en entidades bancarias.

Las autoridades no han informado nuevas capturas, pero aseguran que avanzan en la identificación de los involucrados. La incidencia de estos hechos pone de relieve los desafíos actuales en la lucha contra la criminalidad organizada en centros urbanos de la provincia de Chincha.