Confianza en la PNP se encuentra en su nivel histórico más bajo de los últimos 12 años

En medio de señalamientos por crímenes graves dentro de sus filas, el respaldo social hacia la Policía Nacional del Perú desciende a su punto más bajo desde 2014, mostrando el impacto de la crisis de legitimidad institucional en 2025

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PNP en Perú - Reuters
PNP en Perú - Reuters

La confianza en la Policía Nacional del Perú (PNP) alcanza actualmente su nivel más bajo en 12 años, según los datos del Observatorio Nacional de Seguridad Ciudadana y el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) a través de la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) y divulgados por el analista de datos Juan Carbajal. Las cifras marcan un declive constante de la percepción ciudadana hacia la institución, ubicando el índice de confianza en apenas 14,2% al primer semestre de 2025.

Evolución de la percepción hacia la PNP

El registro histórico elaborado a partir de encuestas oficiales muestra que la confianza ciudadana en la PNP presentó valores cercanos a 18% entre 2014 y 2019. Esa proporción tuvo una excepción durante 2020, año en que la pandemia por COVID-19 obligó a la policía a asumir un rol clave en los controles de confinamiento, lo que derivó en un repunte hasta 28,2%. Posteriormente, el respaldo ciudadano descendió tras episodios de fuerte impacto social, como la represión durante las protestas en noviembre de 2020 en las que murieron Inti Sotelo y Bryan Pintado, periodo en el que disminuyó la confianza hasta 24,6%.

Durante los siguientes años, el nivel de confianza continuó retrocediendo. Para 2022, ya durante la presidencia de Pedro Castillo, el porcentaje se situó en 21,2%. Al asumir Dina Boluarte la presidencia, la situación se agravó por nuevos enfrentamientos entre manifestantes y miembros de la policía, lo que habría impactado nuevamente en la percepción ciudadana. En 2023, la confianza bajó a 20,5%, y para 2024 ya se encontraba en 17,6%.

PNP en Perú - Juan
PNP en Perú - Juan Carbajal

El escenario actual: datos y contexto

Para junio de 2025, el nivel de confianza en la PNP llegó a 14,2%, el valor más bajo registrado en los últimos años. Los datos del INEI y el Observatorio Nacional de Seguridad Ciudadana señalan el deterioro de la relación entre la ciudadanía y la institución policial.

La caída de la confianza no solo estaría vinculada con episodios de represión policial y muertes en protestas, sino también respondería en buena medida a la aparición de casos delictivos en los que figuran agentes policiales como actores principales. Varias investigaciones han revelado la implicación de miembros de la policía en crímenes graves, lo que influye en la percepción pública sobre la institución.

PNP en Perú - (Foto:
PNP en Perú - (Foto: OjoPúblico)

Casos recientes que han agravado la desconfianza

Entre los hechos de mayor notoriedad se encuentra el feminicidio de Sheyla Cóndor, en el que la investigación identificó la participación de al menos un agente policial y la existencia de más de una persona implicada, lo que ha generado protestas y demandas de justicia por parte de la familia de la víctima.

Otro caso relevante involucra a siete policías en el asalto de varias toneladas de oro en el Callao. Las investigaciones determinaron que los agentes no solo facilitaron el hecho, sino que existen mensajes de texto que revelan la planificación del delito al interior de la propia institución.

En octubre de este año se registró la captura de nueve agentes ligados a la banda criminal ‘Los Piratas’ en Tarapoto, organización que ha operado en actividades como el sicariato y el narcotráfico. Este caso expuso la infiltración del crimen organizado en la estructura policial regional.

A ello se suma otro incidente grave, cuando dos efectivos fueron encontrados con menores desaparecidas en un hostal ubicado en el distrito limeño de La Victoria. El hallazgo provocó la intervención inmediata y la detención de ambos implicados.

La presencia de efectivos policiales implicados en feminicidios, robos, redes de sicariato y casos de abuso sexual ha sumado preocupación y aportado elementos de juicio al escepticismo ciudadano. La tendencia refleja una institución cuya legitimidad y rol se ven fuertemente cuestionados en el escenario actual.