Un policía y dos civiles murieron en un violento ataque armado vinculado a disputas criminales en el Vraem

El Ministerio Público abrió una investigación para esclarecer las circunstancias del ataque y dar con los responsables. Las diligencias se realizan en coordinación con la Policía Nacional en el distrito de Pichari, donde ocurrió la balacera

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Agentes de la Policía y
Agentes de la Policía y peritos del Ministerio Público llegaron hasta el sector de Cuchipampa, en Natividad, para realizar el levantamiento de los cuerpos y recolectar evidencias tras la violenta balacera. Foto: Composición Infobae Perú

Una nueva jornada de violencia golpeó al Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) tras una balacera ocurrida en el distrito de Pichari, provincia de La Convención, región Cusco, que dejó un policía en actividad y dos jóvenes civiles muertos. Las primeras indagaciones relacionan el ataque con disputas ligadas al tráfico ilícito de drogas.

El hecho tuvo lugar la noche del lunes 29 de septiembre en el centro poblado de Natividad. Testigos informaron que los disparos sorprendieron a los vecinos cerca de la medianoche cuando un grupo de sujetos armados abrió fuego frente a un local nocturno. La intensidad del ataque generó pánico entre quienes transitaban por la zona.

Entre las víctimas figura el suboficial de tercera Nelio Godoy Boza, miembro de la Policía Nacional del Perú (PNP) asignado a la comisaría de Natividad. El agente, hallado con heridas graves, fue trasladado al centro de salud local, pero falleció a causa de los impactos de bala.

Los civiles fallecidos, Juan Carlos Almonacid Jacobe, de 21 años, y Yobar Romero Quispe, recibieron atención de emergencia. Uno perdió la vida en el lugar y el otro fue evacuado al hospital San Juan de Kimbiri, donde murió en las primeras horas del martes.

Ataque armado en Natividad causa pánico en la población

El enfrentamiento se desencadenó en “Cuchipampa”, frente al local nocturno “Jhony Walker”. Autoridades recogieron versiones de que dos personas en una motocicleta dispararon varias veces contra sus objetivos y luego huyeron con dirección desconocida.

Los disparos desataron escenas de caos entre vecinos y clientes, que buscaron refugio en viviendas cercanas. La Policía Nacional y el Ministerio Público acudieron minutos después para realizar el levantamiento de los cuerpos y asegurar el área.

Una persona carga la pistola
Una persona carga la pistola para disparar. (Canva)

Los restos de las víctimas fueron conducidos a la morgue de Pichari. Al mismo tiempo, se dispuso la presencia de unidades policiales en puntos estratégicos de Natividad y Pichari para evitar nuevos ataques y hallar a los responsables de la emboscada.

Este ataque evidenció, una vez más, la vulnerabilidad de la población civil y el riesgo constante para los agentes del orden en una de las regiones más conflictivas del país.

Investigaciones apuntan a crimen planificado

Las primeras diligencias sostienen que la balacera estaría ligada a un ajuste de cuentas por narcotráfico. Investigadores policiales detallan que bandas rivales disputan espacios de control en el Vraem, lo que incrementa los ataques selectivos y emboscadas.

El club nocturno, centro del tiroteo, es punto frecuente de reunión en Natividad, y testigos indican que también era visitado por personas presuntamente vinculadas a actividades ilícitas. Este aspecto refuerza la hipótesis sobre la planificación del ataque.

La Fiscalía Penal de Pichari y la PNP continúan recogiendo testimonios y analizando la trayectoria de los proyectiles para entender la dinámica de los hechos. No se reportan detenidos hasta el momento; las investigaciones se concentran en las bandas criminales presentes en la zona.

El asesinato de un agente activo inquieta a la Policía, que ha denunciado reiteradamente el alto riesgo que implica operar en territorios bajo influencia del narcotráfico.

El Vraem sigue bajo la sombra del narcotráfico

El Vraem permanece como epicentro de la producción y tráfico de drogas en el Perú. La región alberga miles de hectáreas de hoja de coca destinadas al narcotráfico y laboratorios clandestinos protegidos por organizaciones criminales en lugares de difícil acceso.

Las Fuerzas Armadas y la
Las Fuerzas Armadas y la PNP destruyen laboratorio clandestino y decomisan 240 kg de cocaína . Foto: Andina

Días antes del ataque en Natividad, fuerzas del orden realizaron una operación en el centro poblado de Paltaypampa, provincia de La Mar, Ayacucho, donde destruyeron un laboratorio rústico, una poza de decantación para procesar cocaína, y decomisaron 240 kilos de alcaloide de cocaína, 685 kilos de insumos químicos y más de 3.900 kilos de hoja de coca en maceración.

Estos operativos exhiben la magnitud de la actividad ilícita en la zona. Sin embargo, a pesar de los constantes golpes por parte de la Policía y las Fuerzas Armadas, el narcotráfico permanece como un desafío estructural en el Vraem, impulsado por su geografía y la dinámica de las bandas criminales.

La balacera en Natividad se suma a una extensa lista de hechos violentos en la región. Las autoridades buscan identificar a los atacantes, mientras se refuerza la presencia policial y militar para evitar nuevos actos de violencia.