¿Cuántos tipos de lubricantes sexuales existen y cómo elegir el más adecuado para ti?

No todos los lubricantes son iguales, ni todas las personas reaccionan de la misma forma a sus componentes

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Existen tres clases de lubricantes
Existen tres clases de lubricantes íntimos, aunque a veces hay fórmulas híbridas que combinan características de dos tipos (Clue app)

Los lubricantes sexuales pueden ser grandes aliados para el disfrute durante un encuentro íntimo cuando la lubricación vaginal es insuficiente o cuando se usan juguetes sexuales. Al reducir la fricción, aumentan la comodidad, previenen molestias o microdesgarros y permiten que la experiencia sea más placentera para todas las partes involucradas. En el Perú también se ha observado un interés creciente por estos productos: en farmacias y tiendas se encuentran geles y lubricantes íntimos de diversas marcas.

Sin embargo, no todos los lubricantes son iguales, ni todas las personas reaccionan de la misma forma a sus componentes. Por eso es importante conocer cuántos tipos de lubricantes sexuales existen, cuáles son sus ventajas y limitaciones, y cómo elegir el más adecuado según tus necesidades.

Tipos de lubricantes sexuales

Los lubricantes a base de
Los lubricantes a base de silicona no contienen agua, por lo que no se evaporan ni se secan fácilmente (Flo)

Existen principalmente tres bases o clases de lubricantes íntimos, aunque a veces hay fórmulas híbridas que combinan características de dos tipos:

  1. Lubricantes a base de agua o hidrosolubles: son los más comunes. Se componen esencialmente de agua con componentes espesantes y humectantes. Su ventaja es que son fáciles de limpiar, compatibles con preservativos de látex y con la mayoría de juguetes sexuales. La desventaja es que tienden a secarse o absorberse durante el acto sexual, por lo que suelen requerir reaplicaciones.
  2. Lubricantes a base de silicona: no contienen agua, por lo que no se evaporan ni se secan fácilmente. Proporcionan lubricación duradera y funcionan bien en ambientes húmedos (como ducha o baño). Sin embargo, pueden ser más difíciles de lavar, algunos pueden manchar telas, y no deben usarse con juguetes de silicona, pues pueden dañarlos.
  3. Lubricantes a base de aceite u oleosos: pueden incluir aceites naturales (por ejemplo, aceites vegetales) o bases minerales. Ofrecen lubricación prolongada, pero tienen importantes desventajas: pueden degradar preservativos de látex, ser difíciles de limpiar, manchar sábanas y aumentar riesgo de infecciones si quedan residuos.

Además, algunas fórmulas híbridas combinan agua y silicona, buscando un punto intermedio: un poco más duraderas que las de agua puras, pero más fáciles de lavar que las de silicona pura. También conviene tener cuidado con lubricantes con aditivos como fragancias, azúcares, sabores muy intensos, glicerina u otros ingredientes sensibles, pues algunas personas pueden experimentar irritación o reacciones alérgicas.

Cómo elegir el lubricante sexual más adecuado para ti

La desventaja es que los
La desventaja es que los lubricantes a base de agua tienden a secarse o absorberse durante el acto sexual (Self)

Al elegir un lubricante íntimo, ten en cuenta estos criterios:

  • Sensibilidad personal / alergias o reacciones previas: si tienes piel muy sensible, busca fórmulas hipoalergénicas, sin perfume ni alcohol, con pocos ingredientes.
  • Compatibilidad con preservativos y juguetes: si usas condones de látex, evita lubricantes a base de aceite, pues pueden degradarlos. Si usas juguetes de silicona, evita emplear lubricantes de silicona con esos juguetes porque podrían dañarlos. En ese caso, es mejor optar por lubricantes a base de agua.
  • Duración del acto sexual / necesidad de reaplicación: si buscas algo que dure sin demasiada reaplicación, un lubricante de silicona o híbrido puede ser más adecuado.
  • Lugar de uso / entorno: para actos dentro del agua (ducha, bañera), un lubricante de silicona puede funcionar mejor, pues los de agua tienden a disolverse.
  • Facilidad de limpieza / comodidad: si prefieres algo que se lave con agua rápidamente, los lubricantes a base de agua son los más sencillos de manejar.
  • Composición / pH / microbioma vaginal: fórmulas con pH equilibrado y sin ingredientes agresivos ayudan a mantener el equilibrio natural de la flora vaginal. Algunos especialistas consideran que los lubricantes con menos aditivos y mejores formulaciones (como los de silicona sin conservantes) pueden ser menos disruptivos para el ecosistema de la vagina.

Además, es ideal hacer una prueba primero en una zona pequeña de la piel (por ejemplo en el antebrazo) antes de usarlo en el área íntima, sobre todo si es la primera vez con ese producto.