Hija de Karina Rivera y Orlando Fundichely expone lo duro que ha sido ser madre primeriza tras fuertes críticas: “No lo logré”

Doris Fundichely, hija de la conductora Karina Rivera y el actor Orlando Fundichely, decidió responder a una serie de críticas en redes sociales sobre su rol como madre primeriza. La joven influencer, que se hizo popular hace algunos años en plataformas digitales tras bromear sobre la posibilidad de tener quintillizos por el tamaño de su vientre durante el embarazo, decidió abordar abiertamente estos cuestionamientos mediante un video en TikTok. En él, compartió una honesta reflexión sobre los desafíos que ha implicado la maternidad, como el proceso de lactancia de su hija, nacida el 30 de septiembre de 2023.

Con casi dos años de experiencia como madre, Doris relató que la ilusión de amamantar era un anhelo que tenía incluso antes de quedar embarazada. Sin embargo, llegado el momento, se encontró con un desafío inesperado: “Tuve a mi bebé y no lo logré (...). Yo tenía problemas con el agarre de mi bebé que no logré solucionar, así que la manera que encontré para seguir dándole mi leche fue extrayéndomela, que era un chambonazo”. En su testimonio, recalcó el esfuerzo físico que implicaba este proceso y la presión emocional que sentía al no poder cumplir con un rol que, para muchas mujeres, está rodeado de expectativas.

La confesión de Fundichely tomó relevancia en un contexto donde las formas de crianza y la alimentación infantil generan opiniones divididas y, con frecuencia, despiertan comentarios severos en las redes sociales.

Doris enfatizó que la extracción de leche no fue una opción simple ni un capricho personal. “Créeme que nadie va a extraerse leche por diversión, nadie lo va a hacer porque sí. Era extraerme, almacenar la leche y guardar las piezas, mantenerlas limpias constantemente, porque, normalmente, tú le das de lactar a tu bebé varias veces al día”, explicó.

La joven madre detalló que este proceso de extracción y conservación de la leche se extendió durante los primeros nueve meses de vida de su hija, enfrentando un gran desgaste físico y emocional. “Mis pobres pechos me pedían auxilio de la chamba a la que los tenía sometidos, era un gran esfuerzo, logré hacerlo hasta los 9 meses a punta de sangre, sudor y lágrimas”, confesó.

A pesar de no poder establecer la lactancia directa, Doris expresó que desarrolló una conexión profunda con su hija: “Mi bebé está por cumplir 2 años, tenemos una conexión mágica, que, probablemente, en la lactancia también se genera otro sentimiento, me imagino, la miradita, lo que sea, pero, hay otras maneras de crear una conexión, no es tan terrible”, dijo.

El caso de Doris Fundichely puso en evidencia la presión que soportan las madres primerizas, especialmente figuras públicas, frente a las expectativas sociales y las distintas opiniones sobre la crianza. A través de sus palabras, la influencer mostró vulnerabilidad y, a la vez, una actitud de resiliencia al compartir la dificultad que vivió y cómo buscó alternativas para cuidar y alimentar a su hija.

Finalmente, Doris se dirigió a otras madres primerizas que puedan atravesar situaciones similares, señalando que no se sientan culpables. “Si quieres tener un bebé y estás en el proceso de la lactancia y no te ha ligado, no te sientas mal, o sea, vas a poder tener una relación y un vínculo con tu hijo que va más allá de las palabras”, señaló la joven, destacando que no se deben sentir culpa o frustración al no cumplir con ciertos patrones tradicionales de maternidad.

De esta manera, la influencer respondió a sus detractores, señalando que “no es necesario maletear a las mamás por no hacer las cosas como tú las harías”.