Fiscalía abre investigación a bailarín húngaro por tocamientos indebidos a Korina Rivadeneira: “Hasta 8 años en prisión”

El escándalo que ha remecido el ámbito del entretenimiento en Lima tiene como protagonista a Korina Rivadeneira, quien decidió romper su silencio tras haber sido víctima de tocamientos indebidos durante una función del espectáculo Dioses del Circo.

El hecho ocurrió el pasado domingo 20 de julio ante cientos de asistentes, y quedó registrado en múltiples videos tomados desde el público, donde se evidenciaría una conducta inapropiada del bailarín europeo Vajda Zoltan, conocido artísticamente como Tyler.

Tras denuncia interpuesta por la modelo, el Ministerio Público abrió una investigación formal contra el ciudadano húngaro por el presunto delito de tocamientos, actos de connotación sexual o actos libidinosos sin consentimiento.

La encargada de liderar las diligencias es la fiscal provincial Luz Marina Palacios, del Cuarto Despacho de la Tercera Fiscalía Provincial Especializada en Violencia contra la Mujer y los Integrantes del Grupo Familiar.

La noticia tomó mayor fuerza cuando las cámaras de varios medios abordaron a Tyler a las afueras del edificio donde reside, en Miraflores. El artista fue captado saliendo de su departamento, acompañado por personal policial.

Pese al acoso de las cámaras, el extranjero evitó en todo momento brindar declaraciones amplias. Sin embargo, ante la insistencia de los reporteros, respondió brevemente con visible incomodidad: “No tengo nada que decir. Fue parte del show. Todo estaba ensayado”.

Al preguntársele si asumía responsabilidad por lo ocurrido, solo atinó a decir: “Sin comentarios, de verdad. Hablen con mi abogado”, mientras descendía por las escaleras custodiado por agentes.

Una vez en la vía pública, fue llevado por personal del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) de Surco, donde se encuentra detenido bajo la figura de flagrancia delictiva. De acuerdo con las autoridades, esta detención permite continuar con las indagaciones en un plazo inmediato, mientras se recogen más pruebas testimoniales, periciales y audiovisuales.

El acto de denuncia pública por parte de Korina Rivadeneira ha generado un amplio respaldo en redes sociales y en medios de comunicación.

En su programa Desvelados, la modelo relató con la voz entrecortada que inicialmente pensó que se trataba de una parte no anunciada del guion, pero rápidamente sintió que su integridad fue vulnerada sin su consentimiento.

“Me sentí completamente expuesta. No sabía si eso formaba parte del show. Intenté mantener la calma porque había niños presentes, pero internamente me sentía devastada”, confesó.

En otro momento de su testimonio, Korina agradeció públicamente el respaldo de su esposo, el piloto y cantante Mario Hart, quien fue el primero en acudir al lugar al ver lo que estaba ocurriendo. “Mario fue el primero en tomar acción, en protegerme, en ir al circo a exigir una explicación. Su apoyo fue fundamental. Me sostuvo cuando yo apenas podía hablar del tema”, expresó visiblemente emocionada.

La denuncia fue interpuesta con el acompañamiento del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, cuya intervención también fue reconocida por Korina como clave para tomar la decisión de formalizar el caso. “Gracias a las representantes del ministerio, que estuvieron conmigo todo el día, entendí que esto no puede pasar desapercibido. No puede haber la más mínima tolerancia ante el irrespeto”, declaró con firmeza.

Ante la gravedad de lo ocurrido, la Municipalidad de Santiago de Surco emitió un comunicado oficial donde anunció la cancelación definitiva del espectáculo “Dioses del Circo”. En su pronunciamiento, se detalló que la clausura responde al “riesgo, a la integridad física y emocional de los asistentes y participantes”, así como al incumplimiento de protocolos mínimos de seguridad y conducta profesional en un evento familiar.

De confirmarse los cargos, Tyler podría enfrentar una pena de hasta ocho años de prisión, según el Código Penal Peruano. Mientras tanto, su situación legal se complica con el avance de la investigación, y la opinión pública exige que este caso siente un precedente sobre el respeto al cuerpo y los límites en cualquier tipo de espectáculo, sin importar la nacionalidad o fama del implicado.