Puente Miraflores-Barranco presentó vidrio rajado y otros problemas técnicos, según Contraloría

La Contraloría General de la República emitió una alerta sobre posibles afectaciones en la calidad y durabilidad de la infraestructura del Corredor Turístico Miraflores-Barranco, tras encontrar problemas técnicos y administrativos en la ejecución de los trabajos finales. Este corredor, que busca unir ambos distritos con una estructura de 112 metros de longitud sobre la Quebrada Armendáriz, aún no ha sido concluido y acumula varios retrasos.

Durante una inspección realizada el 27 de junio, la Contraloría constató la presencia de un vidrio curvo instalado en el lado este del puente peatonal con una fractura. El expediente técnico exige que el material sea laminado y de tipo templado, características que aportan mayor resistencia y seguridad. Sin embargo, el daño observado no correspondería a una rotura típica de vidrio templado. Este elemento había sido reemplazado recientemente, pero el panel defectuoso seguía a un lado.

Consultado sobre este punto, Daniel Abril, gerente de infraestructura pública de Miraflores, afirmó que los vidrios utilizados cuentan con protección laminada y aseguró que eventuales daños externos no representarían riesgos de desprendimiento para los transeúntes.

El informe etambién advirtió que el expediente técnico de los trabajos de saldo de obra no incluyó un sistema de conexión a tierra para la estructura metálica del puente. Esta omisión podría exponer a los usuarios a riesgos de sobretensiones eléctricas o incluso electrocución. Abril aseguró que la seguridad está garantizada, aunque la Contraloría sostiene que la falta de este sistema debe subsanarse antes de la inauguración.

El informe de la Contraloría expone otra observación: los canales de telecomunicaciones en la parte lateral del puente no se encuentran al mismo nivel del tablero de concreto. Según la municipalidad, estas canaletas permitirán la instalación de cámaras de seguridad y el desnivel no afectará su funcionamiento.

La semana pasada, desde el malecón Paúl Harris, en Barranco, se observó que los paneles de vidrio continuaban instalándose en el eje central del puente, zona destinada para ciclistas y peatones. Del lado de Miraflores, desde el malecón de la Reserva, los trabajos en veredas y sardineles seguían en la etapa de encofrado y persistía la ausencia de mallas de protección en tramos del acantilado, lo que mantiene sin habilitar esos espacios.

Vecinos de la zona manifestaron su preocupación por la calidad y la demora de los trabajos. “Nosotros vemos por las redes las maravillas que hacen en otros países y nosotros no podemos hacer ese tramo tan pequeño. No me extraña”, comentó un residente de Miraflores a 24 Horas. Otra vecina expresó su esperanza en que la obra ofrezca mayor seguridad y se ejecute con garantía, pese a los retrasos acumulados.

Ante estas observaciones, la Municipalidad de Miraflores cuenta con un plazo para presentar su plan de implementación y subsanar las fallas detectadas. La fecha oficial de inauguración aún no ha sido anunciada y dependerá del levantamiento de estos pendientes técnicos y de seguridad. Por el momento, la culminación del Corredor Turístico Miraflores Barranco sigue en espera cuando estaba prevista para finales de 2024.