Asombrosa vasija del Pingüino de Humboldt: Cultura Nazca también representaba animales en cerámica al igual que sus geoglifos

Una pieza hallada en Perú revela que la cultura Nazca confirma el protagonismo de la fauna costera tanto en su cerámica como en las emblemáticas líneas del desierto

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Líneas de Nazca, Perú (Wikimedia).
Líneas de Nazca, Perú (Wikimedia).

Una pieza de cerámica con forma de pingüino de Humboldt, parte de la colección del Instituto de Arte de Chicago, ubicado en Estados Unidos, ha despertado el interés internacional sobre las representaciones animales en la cultura Nazca.

Esta vasija, elaborada hace más de 1600 años en la costa suroeste del Perú, mide casi 21 centímetros de alto y muestra detalles en las alas y el pico. El hallazgo aporta una nueva perspectiva sobre el vínculo entre el arte cerámico nazca y los famosos geoglifos del desierto peruano, conocidos mundialmente como las Líneas de Nazca.

Una pieza de cerámica con
Una pieza de cerámica con forma de pingüino de Humboldt, parte de la colección del Instituto de Arte de Chicago. (Foto: Instituto de Arte de Chicago)

El enigma detrás de las representaciones animales nazca

La cultura Nazca, que habitó entre el 100 a.C. y el 800 d.C., ha sido ampliamente estudiada por sus geoglifos monumentales, figuras como el mono, el gato o el pelícano, visibles desde el aire en el desierto.

Estos diseños han generado numerosas teorías respecto a su función, ya que los Nazca no dejaron registros escritos. Los motivos animales aparecen tanto en la tierra como en la cerámica, donde se combinan criaturas reales y fabulosas, personas y dioses, siempre con técnicas multicolores y estilos inconfundibles.

La vasija del pingüino de Humboldt plantea preguntas sobre la observación aguda del entorno natural por parte de los Nazca. A pesar de vivir en un desierto tropical, lograron identificar e inmortalizar en su arte especies que habitaban la costa, como el pingüino de Humboldt, conocido por su presencia en las aguas frías que llegan a la costa peruana gracias a la Corriente de Humboldt.

Este fenómeno marino, responsable de enfriar las aguas tropicales, permitió a los pingüinos establecerse en la región durante siglos. Aunque la representación en cerámica es rara, se suma a un conjunto de piezas que reflejan animales marinos como orcas y langostas.

Una misma mirada hacia la naturaleza

Las similitudes entre las figuras de animales en cerámica y los geoglifos muestran una coherencia simbólica en la cultura Nazca. Animales como la orca tienen una presencia reiterada en todos sus soportes artísticos, posiblemente ligados a mitos o significados sagrados.

La pregunta que surge respecto al pingüino de Humboldt es si su inclusión en la cerámica tenía un propósito concreto o era resultado únicamente de una observación detallada del mundo natural.

El análisis de la vasija muestra que los Nazca no solo miraban hacia el cielo para plasmar sus figuras, sino que también utilizaban la cerámica como soporte para capturar la diversidad de fauna costera.

Este enfoque, que combina elementos realistas y míticos, ha sido un sello distintivo de la cultura nazca y permite a los arqueólogos entender mejor las creencias, prácticas y el entorno de este pueblo.

Las piezas nazca, como la vasija del pingüino, siguen siendo testigos del modo en que una civilización precolombina logró retratar y preservar la riqueza de la naturaleza en el arte, al igual que en sus monumentales geoglifos del desierto.