Día de Apreciación del Capibara: historia, origen y curiosidades del roedor gigante más querido del continente

La especie vive en grandes grupos, utiliza vocalizaciones y señales olfativas para comunicarse y mantener la cohesión, lo que refuerza su rol ecológico y la fascinación que despierta en comunidades científicas

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El roedor más grande del mundo inspira una jornada especial en julio, donde se resaltan sus cualidades únicas, su rol ecológico y la fascinación que despierta en redes sociales y comunidades ambientales (Instagram: detox_integral)

En el Perú y en toda esta parte del continente americano, cada 10 de julio dedica un día especial al capibara, también llamado carpincho, para reconocer su importancia ecológica y cultural. Originario de humedales y bosques ribereños, este roedor semiacuático destaca por su tamaño, convivencia en grupo y naturaleza pacífica.

La celebración busca difundir sus rasgos biológicos, su rol en los ecosistemas y fomentar una relación armoniosa con el medio ambiente. Su presencia en redes se multiplica en esta jornada, donde entusiastas comparten datos, imágenes y actividades para honrar a este singular mamífero sudamericano con voz en estos lugares y más allá de las fronteras sudamericanas.

Origen de la fecha y su relevancia

Aficionados, docentes y ambientalistas se
Aficionados, docentes y ambientalistas se unen cada 10 de julio para dar protagonismo al capibara, una especie emblemática que ahora también tiene su propia efeméride.  (Freepik)

El Día de Apreciación del capibara, instaurado el 10 de julio, se popularizó en diversos países de América Latina como una fecha dedicada a visibilizar a este roedor gigante. La elección del día responde a iniciativas de asociaciones y aficionados que querían dedicar un momento anual para celebrar sus cualidades.

Desde este 2025, la fecha aparece en calendarios de efemérides, y en redes sociales se observa una notable participación con etiquetas alusivas. Aunque la efeméride no está formalizada por organismos internacionales, ha encontrado acogida en centros de educación ambiental y zoológicos, donde se organizan charlas y actividades temáticas.

¿Qué distingue al mayor roedor del planeta?

Superando el metro de largo
Superando el metro de largo y los 60 kilos, este roedor semiacuático destaca por su peculiar fisonomía, diseñada para nadar, esconderse y reinar en la ribera.  (Freepik)

El capibara es reconocido como el roedor más grande que existe, llegando a medir más de 1,3 m de longitud y pesar hasta 60 kg, según distintos estudios. Su cuerpo robusto, extremidades palmeadas y ojos ubicados en lo alto del cráneo evidencian su adaptación a ambientes cercanos al agua.

Esta morfología facilita la natación y le permite mantenerse parcialmente sumergido para evitar depredadores. Se le ha comparado en tamaño con lobos y castores, destacando su singularidad dentro del grupo de mamíferos roedores .

Además, se reconocen dos especies: el capibara mayor y el menor. El primero es el más común, mientras que el menor ocupa zonas del centro-norte de Sudamérica y se mantiene por debajo de los 45 kg .

Comportamiento social y vida en grupo

La vida del capibara se
La vida del capibara se construye en comunidad. Entre ríos y esteros, se desplaza con otros, comparte espacios y mantiene un equilibrio clave con la naturaleza.  (Freepik)

Los capibaras viven en bandadas que usualmente cuentan con 10 a 20 individuos y, en ocasiones, llegan a formar grupos de hasta 100 ejemplares. Su vida se desarrolla en entornos acuáticos como ríos, esteros o lagunas.

Muestran un comportamiento tranquilo, pacífico, con vocalizaciones variadas que permiten la comunicación entre sus miembros. Su régimen alimenticio incluye pastos y plantas acuáticas, lo que refuerza su rol en la regulación de la vegetación ribereña .

La celebración anual procura poner en relieve estos rasgos sociales, además de promover su protección frente a amenazas como la caza, la degradación de hábitats y el desplazamiento humano.

¿Cómo se comunican los capibaras?

La comunicación en los capibaras es uno de sus aspectos más fascinantes. Este roedor emplea una gran variedad de vocalizaciones, como silbidos, gruñidos, chillidos y hasta ladridos cortos. Cada sonido tiene una función específica dentro del grupo, ya sea para advertir sobre la presencia de depredadores, mantener a las crías cerca o reforzar la cohesión entre los miembros.

Los capibaras también utilizan señales olfativas, ya que los machos dominantes marcan su territorio con glándulas situadas en el hocico y la zona perianal, aportando más información al resto del grupo sobre jerarquías y estados reproductivos.

Mil maneras de llamarlo

Más que un nombre, el
Más que un nombre, el capibara posee identidades múltiples que revelan su arraigo en la cultura de cada país. Es símbolo, criatura y palabra viva a la vez.  (Freepik)

Más allá de su apacible imagen y andar sereno, el capibara guarda una riqueza lingüística que refleja su arraigo en la cultura sudamericana. Su nombre más común, “capibara”, tiene origen en el idioma guaraní, donde se le conoce como bapiÿvá o kapi’yva, que puede traducirse como “comedor de pasto” o “señor del pasto”. En lengua tupí, se le llama ka’apiûara, una forma poética de decir “el que se alimenta de hojas finas”.

Su denominación científica tampoco es casual: Hydrochoerus hydrochaeris proviene del griego y significa literalmente “cerdo de agua”, una alusión directa a su hábitat anfibio y su contextura robusta.

En el mapa lingüístico de la región, este roedor gigante suma apodos según la tierra que pisa. En Argentina y Uruguay es conocido como carpincho o capincho. En Colombia y Venezuela, lo llaman chigüiro o piro-piro. En Brasil es la emblemática capivara. En Perú, aparece como ronsoco, mientras que en Panamá y Paraguay puede responder incluso al curioso “poncho”.

Cada variante del nombre cuenta una historia: de ecosistemas, de lenguas nativas, de observaciones populares. El capibara, más que un animal, es un puente entre naturaleza y palabra.

Difusión, celebraciones y presencia digital

El 10 de julio, los
El 10 de julio, los capibaras saltan del humedal a la pantalla. Con imágenes virales y hashtags afectuosos, su día se celebra con entusiasmo en todo el mundo.  (Freepik)

En la era digital, el carpincho ha logrado cierta popularidad gracias a su fama en redes por su carácter relajado y amistoso. En comunidades como Reddit se observa un fuerte entusiasmo: usuarios postean “¡¡¡HOY 10 DE JULIO ES EL DÍA DE APRECIACIÓN DEL CARPINCHO!!!” junto a fotos de estas criaturas descansando o en agua.

La efeméride impulsa iniciativas educativas, publicaciones en blogs y videos informativos. Organizan talleres con escolares, actividades temáticas en reservas naturales e incluso el lanzamiento de productos y campañas de sensibilización.

El Día de Apreciación del Capibara anima a celebrar a este emblemático roedor sudamericano, destacar su valor ecológico y defender su existencia en entornos naturales. La fecha, enriquecida por su difusión digital y su atractivo simpático, promueve una mirada más respetuosa hacia la vida salvaje.