Inicia el rescate de los cuerpos de tres montañistas perdidos en nevado de Áncash: Habrían fallecido producto de una avalancha

Casi un mes luego de su desaparición, un grupo de rescatistas logró ubicar los cuerpos de los tres montañistas perdidos en el nevado Artesonraju, en Áncash, a más de 6.000 metros sobre el nivel del mar.

El hallazgo se produjo esta mañana, luego de que un equipo de Asociación de Guías de Montaña del Perú informó que llegaron al lugar el sábado 21 de junio para hacer una nueva búsqueda. Un dron les permitió ubicar los cuerpos de Hommer Pretel Alonzo(34) y Jesús Picón Huerta (31), estudiantes del Centro de Estudios de Alta Montaña (CEAM), junto al fotógrafo brasileño Edson Vandeira Costa.

Los tres jóvenes fueron vistos por última vez el 29 de mayo y, hasta esta mañana, no se tenía información sobre su paradero pese a las constantes misiones de búsqueda. Sin embargo, luego de una suspensión de las labores para permitir que los factores climáticos mejoren, se logró encontrar a los tres hombres desaparecidos.

El pasado 12 de junio, la Asociación de Guías de Montaña del Perú anunció que suspenderían las labores de búsqueda de los tres montañistas desaparecidos por 20 días, hasta que inicie un proceso de desglaciación, lo que permitiría que el nevado “expulse” los cuerpos de las víctimas y permita una mejor visibilidad de su ubicación.

El equipo de guías precisó en esa oportunidad que la avalancha se produjo en la cara noroeste del nevado, un área caracterizada por crestas inestables y ramales de nieve que incrementan el riesgo de nuevos desprendimientos. El análisis con drones también detectó otro posible derrumbe en el lado oeste de la montaña, lo que representaba un peligro adicional para los rescatistas.

Finalmente, la estrategia dio resultado. Pero aunque se logró dar con la ubicación de las víctimas, ahora se requiere del apoyo del Ministerio de Defensa para asistir a las labores de rescate por medio de un helicóptero que lleve a los rescatistas a la zona y les permita extraer los cuerpos.

Los familiares de los jóvenes desaparecidos enviaron una carta al ministro de Defensa, Walter Astudillo, el pasado martes 17 de junio para que el Mindef apoye con un helicóptero en la misión de búsqueda del día 21 de junio. Esta finalmente fue la fecha en la que se halló a los montañistas.

“Evaluando que el clima ha mejorado y habiendo identificado los posibles puntos del accidente, emprendemos esta quinta búsqueda de nuestras familias desaparecidas (...) Frente a esta nueva etapa de búsqueda, ubicación y rescate, solicitamos que, a través de su Despacho, nos brinden un helicóptero en óptimas condiciones para dicha labor (...)”, indica el documento.

“Ministro de Defensa, por favor. Ordenar nuevamente este apoyo necesario para trasladar a los rescatistas (...) y pedirle el helicóptero de la Policía que haga el vuelo a los 5 mil metros. Para llegar ahí hay una pared de 200 metros de roca, lo cual se tiene que sacar con otro tipo de rescate”, indicó Beto Pinto, presidente de la Casa de Guías, en conversación con Latina.

Aunque el pedido de asistencia al Ministerio de Defensa se realizó el martes pasado, desde la página de Facebook ‘Desaparecidos.nevado’, los familiares siguen insistiendo en su solicitud y enviaron un mensaje directo al ministro Astudillo. “Pedimos su respuesta positiva y rápida a nuestro pedido porque nuestros seres queridos ya han sido hallados”, indicaron.

El Ministerio del Interior comunicó oficialmente que se sumó a las labores de rescate junto a un helicóptero, que ya se encuentra en la zona.

“El Mininter informa que el ministro Carlos Malaver dispuso, a través del Comando Institucional de la Policía Nacional del Perú, las acciones inmediatas para las labores de rescate de los cuerpos de los estudiantes desaparecidos en el nevado Artesonraju”, se indica en el comunicado oficial.

La montaña, ubicada dentro del Parque Nacional Huascarán, es conocida por sus condiciones climáticas impredecibles y por requerir un alto nivel técnico de escalada.

Edson, el fotógrafo brasileño que formó parte de la expedición al nevado, partió rumbo junto a tres personas. Uno de ellos abandonó la expedición antes del ascenso final y regresó al campamento base. Fue la última que tuvo contacto con el fotógrafo brasileño y el grupo, el 30 de mayo.

La hermana del desaparecido, Jackeline Vandeira, relató que ese compañero fue la última persona en ver con vida a Edson y a los otros dos peruanos. “Subieron cuatro personas, pero una regresó. Ese compañero que volvió fue el último que tuvo contacto con mi hermano”, señaló.

El presidente de la Asociación de Guías de Montaña del Perú (AGMP), Beto Pinto, informó que ya se cuenta con un plan de rescate que podría tomar por lo menos dos días y requerirá de hasta 22 rescatistas divididos en dos grupos, liderados por un reconocido montañista llamado Aritza Monasterio.

Pinto afirmó que el plan para escalar hasta el punto en el que se encuentran los cuerpos incluye el uso de helicópteros, los mismos que permitirán el traslado del personal y también de los cadáveres de los tres hombres fallecidos en el nevado Artesonraju.

Desde el lugar donde se encontraron los cadáveres, ubicado entre 5,100 y 5,200 metros sobre el nivel del mar, los tres montañistas fallecidos serán cargados por los rescatistas hacia un punto de encuentro en el que serán subidos a un helicóptero dispuesto por el Ministerio del Interior, que los llevará a una zona segura.

Una vez que salgan de este punto, el más complejo debido a la geografía del lugar, un helicóptero de mayor tamaño será el encargado de recoger a los 22 rescatistas, quienes volverán al campamento base una vez que finalicen las labor

El Artesonraju es uno de los nevados más conocidos de la Cordillera Blanca, en la región Áncash, Perú. Su altura oficial es de 6.025 metros sobre el nivel del mar y está situado dentro del Parque Nacional Huascarán, área protegida y Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.

El clima en la zona se caracteriza por variaciones extremas de temperatura, fuertes vientos y frecuentes nevadas, lo que incrementa los desafíos y riesgos para las expediciones. El nevado es parte de un entorno natural de gran diversidad ecológica, rodeado de glaciares, lagunas y otros picos de gran altitud.