Sismo en Lima y Callao: conoce las 69 zonas críticas y los más de 170 peligros geológicos, según el Ingemmet

El fuerte temblor que sacudió Lima y el Callao recientemente no solo generó alarma entre miles de familias, sino que volvió a poner en evidencia las condiciones de riesgo que enfrenta la capital frente a eventos sísmicos. Según información del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet), existen 69 zonas consideradas críticas y más de 170 peligros geológicos identificados en diversos distritos de la ciudad y el puerto, lo que convierte a estos territorios en puntos altamente vulnerables ante desastres naturales.

Los distritos más comprometidos por estos riesgos son Chorrillos, Independencia, Rímac, San Juan de Lurigancho, Lurigancho, Chaclacayo y Cieneguilla. Estas áreas concentran gran parte de las laderas y terrenos inestables que, en caso de un movimiento telúrico, pueden experimentar deslizamientos, derrumbes o caídas de rocas que pondrían en peligro la vida de sus habitantes.

El pasado domingo 15 de junio, un sismo de magnitud 6.1 interrumpió abruptamente las celebraciones por el Día del Padre. El movimiento, cuyo epicentro fue ubicado a 30 kilómetros al suroeste del Callao y a una profundidad de 49 kilómetros, provocó escenas de miedo en múltiples puntos de la capital. Aunque fue clasificado técnicamente como un sismo fuerte y no un terremoto, el impacto fue suficiente para dejar al descubierto deficiencias estructurales en viviendas, calles y edificaciones públicas.

El remezón provocó el fallecimiento de un ciudadano en Independencia, luego de que una pared colapsara mientras se desplazaba por una calle del distrito. Además, el Ministerio de Salud (Minsa) reportó al menos 40 personas atendidas por lesiones leves.

En varios sectores, se observaron cortes de luz, desprendimientos de techos y ventanas fracturadas. También se registraron evacuaciones preventivas en centros comerciales y supermercados de zonas como San Miguel, Surco y Miraflores.

Uno de los escenarios más preocupantes se vivió en la Costa Verde, donde se produjeron deslizamientos de tierra y rocas que obligaron al cierre temporal de algunos tramos de la vía que conecta distritos clave del litoral limeño.

Ingemmet ha identificado más de 36,000 peligros geológicos en todo el país. De ellos, 2,170 se encuentran clasificados como zonas críticas debido a que coinciden con la presencia de viviendas, infraestructura urbana o servicios públicos expuestos.

En Lima Metropolitana y el Callao, se han documentado 69 puntos críticos y 173 peligros asociados a fenómenos naturales como derrumbes, avalanchas, deslizamientos y caídas de bloques rocosos. Estas amenazas están principalmente localizadas en zonas altas, bordes de quebradas o áreas con condiciones geológicas frágiles, donde la presencia de la población incrementa el nivel de exposición.

Uno de los factores clave que hace peligrosa a una zona es su relación con suelos sueltos, taludes inestables o pendientes pronunciadas. Estas características, al combinarse con eventos como lluvias intensas o sismos, pueden desencadenar procesos geodinámicos destructivos.

El reciente temblor confirmó ese escenario: varios tramos costeros colapsaron por efectos cosísmicos, afectando la transitabilidad y revelando la vulnerabilidad de las rutas cercanas al mar. Esta situación refuerza la necesidad de tomar medidas de prevención y reforzar las construcciones en áreas de alto riesgo.

El Ingemmet ha habilitado una herramienta virtual interactiva que permite a los ciudadanos conocer si su domicilio o entorno se encuentra en una zona identificada como crítica.

Para conocer cuáles son y otros detalles, basta con ingresar al siguiente enlace: https://app.ingemmet.gob.pe/zonascriticas/. Una vez dentro, se debe seleccionar el departamento de interés y, tras unos segundos, se visualizarán puntos rojos sobre el mapa. Cada punto representa una alerta geológica activa, y al hacer clic sobre ellos, el sistema proporciona un reporte técnico detallado sobre el tipo de amenaza.

Entre los peligros que se pueden consultar están: caídas de rocas, deslizamientos, movimientos complejos, huaicos, derrumbes, aluviones, y vuelcos. Esta plataforma es una herramienta clave para que autoridades locales, municipalidades y ciudadanos conozcan con precisión el nivel de amenaza en su comunidad y puedan actuar de manera preventiva.

El Ingemmet no solo recopila datos, sino que mantiene un programa continuo de observación y análisis de zonas potencialmente peligrosas. Esta labor resulta fundamental para que se diseñen políticas de reducción de vulnerabilidad y se definan las prioridades en la ejecución de obras de defensa civil.

Según explican los especialistas del instituto, el conocimiento técnico sobre las condiciones geológicas debe integrarse a la planificación urbana, sobre todo en ciudades como Lima y Callao, donde la expansión poblacional ha avanzado sin considerar en muchos casos la estabilidad del terreno.

Las 69 zonas críticas no son un número abstracto: representan áreas donde miles de personas podrían verse directamente afectadas en un escenario sísmico. Conocerlas, comprender su ubicación y saber cómo actuar ante un desastre puede hacer la diferencia entre una emergencia controlada y una tragedia, reflexionaron los expertos.