Janick Maceta cuestionó la final del Miss Perú 2025: “¿Cómo que no hay más preguntas del jurado?”

El Miss Perú 2025 celebró su gala en Cusco el 15 de junio, en medio de gran expectativa por descubrir a la sucesora de Tatiana Calmell. La noche tuvo brillo y emoción, pero también una inesperada polémica: Janick Maceta, segunda finalista de Miss Universo 2020, siguió todo desde la transmisión en TikTok Live del influencer Kiwi y sorprendió al público con su reacción.

Mientras las cámaras enfocaban al jurado, donde destacaban Camila Escribens y Luciana Fuster, quienes esperaban la presencia de Maceta, sintieron su ausencia tanto en el escenario como en la mesa evaluadora. Sin embargo, la ex Miss Perú participó activamente del evento a través del chat en vivo. Cuando la ceremonia optó por hacer solo una pregunta para todas las finalistas y no realizó una segunda ronda de interrogantes para el top 3, Janick Maceta expresó su desconcierto en tiempo real.

Sus intervenciones rápidamente se viralizaron y avivaron la discusión sobre el formato de la gala, especialmente en el momento decisivo previo al anuncio final. Entre los fanáticos quedó la sensación de que algo faltó en esa noche, comparando con el clima de nerviosismo e intensidad que caracterizaba ediciones anteriores, incluida la que coronó a la propia Janick.

Además, la edición 2025 dejó un curioso déjà vu: Karla Bacigalupo, Miss Perú USA, venció a Maricielo Gamarra, Miss San Martín, repitiendo la misma final y resultado de 2020, cuando Maceta —también como Miss Perú USA— se quedó con la corona frente a la misma rival.

A pesar de no mostrarse ajena a la organización en el pasado, este año Janick Maceta dejó claras sus inquietudes y desató un nuevo debate sobre el desenlace de uno de los certámenes más seguidos en el país.

Karla Gabriela Bacigalupo Ancieta nació en Lima el 26 de diciembre de 1991 y desde joven combinó su formación en Administración y Gestión de Empresas en la Universidad de Lima con una marcada inquietud artística.

Buscando nuevos horizontes, se trasladó a Los Ángeles para ampliar sus estudios en actuación en la UCLA, participando en cortometrajes y desarrollando una postura creativa ligada a la sensibilidad y el liderazgo. Su capacidad para reinventarse encontró en la familia un soporte clave y determinante para asumir retos tanto en lo profesional como en lo personal.

Su llegada a los certámenes de belleza fue un paso más en una trayectoria orientada a la acción social y el impulso de causas solidarias. Karla ha destacado por su labor con la ONG ‘1000 Niños de Jesús’, que promueve la educación y alimentación de niños en situación vulnerable, y define su papel como reina de belleza con una mirada comprometida más allá de los reflectores.

Durante la final del Miss Perú 2025, celebrada en Cusco, la modelo convenció al jurado y al público con un mensaje enfocado en la inspiración y la empatía: “Quiero ser la siguiente Miss Perú porque quiero inspirar a todas las niñas peruanas para que sepan que pueden alcanzar sus sueños si es que trabajan día a día. Que de nada sirve la belleza externa si es que por dentro no eres una persona empática y tienes un gran corazón”. Tras su coronación, agradeció a su familia, a la organización y a quienes la impulsaron en este recorrido, iniciando su reinado con la promesa de responsabilidad social y autenticidad.