Alcalde de Chancay advierte sobre ola de inseguridad: distrito que alberga el Megapuerto solo cuenta con 80 policías

De acuerdo a comerciantes de la zona, organizaciones criminales de diversas zonas del Perú se disputan el control del territorio

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El puerto de San Antonio
El puerto de San Antonio proyecta tener el doble de capacidad que el megapuerto de Chancay - crédito Logística 360

El impacto del Megapuerto de Chancay sobre la tranquilidad del distrito se ha evidenciado en los últimos meses, encendiendo las alarmas entre autoridades y comerciantes. Hoy, las calles de este enclave, antes apacibles, reflejan un clima de tensión por el avance de organizaciones criminales que buscan controlar la estratégica zona portuaria. Extorsiones, balaceras y amenazas se han vuelto parte de la vida cotidiana para numerosos residentes.

Desde la inauguración oficial del puerto en noviembre de 2024, el flujo de inversión y el auge económico trajeron consigo una problemática inesperada: la disputa violenta de bandas criminales por el control del territorio y las rutas delictivas asociadas al nuevo hub logístico.

Comerciantes locales, como Vladimir Cantoral, presidente del Frente de Defensa por la Dignidad y Libertad de Chancay, contó su experiencia tras ser blanco de amenazas directas y extorsiones.

“En este año, desde enero hasta abril, ha habido hasta cinco balaceras. Han matado vecinos, han puesto dinamita en negocios, entre otras cosas, porque se han negado a pagar el cupo. Yo tengo 44 años, y nunca hemos visto este nivel de delincuencia antes acá”, relató Cantoral hace unas semanas a Panorama, dominical de Panamericana Televisión.

megapuerto de chancay - cosco
megapuerto de chancay - cosco

Las organizaciones que han puesto sus ojos en Chancay replican los patrones delictivos observados en otras ciudades del norte peruano. Bandas como Los Pulpos, provenientes de Trujillo, los Monos de Quepepampa de Huaral y los Antitren o Puros Hermanos Sicarios, oriundos de Ancón, Ventanilla y Callao, se enfrentan por el predominio del Megapuerto y sus alrededores.

Ante este contexto, el alcalde de Chancay, Juan Álvarez, expuso de manera enfática la urgente situación que atraviesa el distrito, señalando las limitaciones severas en la respuesta estatal.

“Contamos con 81 efectivos policiales y no se dan abasto. Pero, si nos dan más efectivos, en dónde va a instalarse. Por eso es importante que la infraestructura se incorpore, pero, a su vez, más efectivos policiales de una especialidad”, manifestó Álvarez al referirse a la capacidad operativa de la comisaría local.
Megapuerto de Chancay
Megapuerto de Chancay

A pesar de sostener reuniones con distintos representantes del Ejecutivo, Álvarez criticó la falta de acciones concretas frente al flagelo de la delincuencia. “Esto ya se veía venir. Lo advertimos, pero no se tomaron cartas en el asunto”, reclamó el burgomaestre, quien demandó la creación de una división policial especializada y la instalación de un laboratorio criminalístico en la zona.

El alcalde urgió, tanto a la Policía Nacional del Perú (PNP) como a los servicios de inteligencia, a anticipar la conformación de redes de extorsión y sicariato en el distrito. Su llamado incluyó la necesidad de contar con visibilidad nacional sobre estos problemas, en busca de una respuesta integral que resguarde a la población y garantice la seguridad de una zona crucial para el desarrollo del país.

“Ya están buscando zonas económicas para instalarse. Si no intervenimos, vamos a tener conflictos entre bandas. La Policía y el servicio de inteligencia deben actuar ya”, advirtió Álvarez.

El panorama se complica por la presión derivada del incremento del tránsito pesado vinculado a la actividad portuaria, sumado a la fragilidad de la infraestructura local. El colapso de uno de los dos puentes principales, construido hace más de ocho décadas, añade otro factor de vulnerabilidad

Al respecto, Álvarez detalló que el puente permanece sin reparación debido a procedimientos judiciales. “Hemos cursado invitaciones, pero no hay avances. El pueblo está soportando esta situación con suerte, pero no podemos confiar en milagros”, dijo a Canal N.